La rebaja de la prima de riesgo española, en niveles inferiores a los de la crisis griega por primera vez en semanas, ha permitido al Ibex escalar un 0,76% hasta los 10.636,9 puntos, pese a la mala apertura de Wall Street.
Después de varios vaivenes, el Ibex ha conseguido cerrar por encima de los 10.500 puntos tras perder el 0,25%. El mercado español siguió un comportamiento ligeramente superior al resto de los europeos y después de haber subido un 12% en las seis sesiones anteriores.
Los buenos datos de confianza de Alemania y el éxito en la colocación de letras por parte del Tesoro español han compensado los peores resultados de Citi y el castigo de Apple en Wall Street permitiendo al Ibex quedarse a pocos puntos de superar el 10.600 pero cerrando en niveles de noviembre. La subida de hoy ha sido del 2,95%.
La Bolsa española ha decidido arrancar la semana con números rojos. El Ibex ha restado un 1,01% que le ha situado en los 10.280 puntos en una sesión que no ha contado con la brújula de Wall Street. La prima de riesgo, por su parte, se ha elevado hasta los 239 puntos básicos después de que el Tesoro haya cancelado las dos subastas de obligaciones a 10 y 13 años previstas para el próximo jueves y en su lugar haya anunciado una venta de bonos sindicada.
La posibilidad de la ampliación del fondo de rescate en la eurozona y el éxito de las subastas de deuda en España, Portugal y Grecia han animado la semana a un Ibex que ha sido el mejor del Viejo Continente, con diferencia, al revalorizarse un 8,6%. La banca se ha convertido en el principal puntal de estas subidas.
La buena acogida que ha tenido en los mercados la subasta de bonos a cinco años del Tesoro español ha dado alas al Ibex una sesión más, la tercera consecutiva. En los últimos tres días, la Bolsa española ha recuperado un 9,9% y ha puesto fin a los números rojos que venía registrando desde que comenzara el año.
Jornada de optimismo en la Bolsa española. El Ibex se ha disparado un 5,42%, el mayor ascenso desde el pasado mes de mayo, cuando se decidió llevar a cabo el rescate de Grecia. Con la subida de hoy, el selectivo ha recuperado los 10.100 puntos y ya es rentable en el año. El sector bancario se ha convertido en el gran privilegiado.
El anuncio de Japón de que comprará bonos europeos, la colocación de letras a seis meses de Grecia y los rumores sobre compra de deuda por parte del BCE han llevado al Ibex a superar los 9.500 puntos al cierre tras recuperar un 1,53% después de cuatro días consecutivos de caídas.
Cuarta jornada consecutiva de recortes. El Ibex ha cedido un 1,29% en una sesión que una vez más ha llegado marcada por el posible e inminente rescate de Portugal. Los rumores de compra de bonos lusos por parte del BCE, sin embargo, han conseguido poner un relativo freno a la caída y relajar la prima de riesgo.
El año es nuevo pero las preocupaciones que traen de cabeza a los inversores y que por tanto se reflejan en las Bolsas siguen siendo las mismas. La tensión en los mercados de deuda ante los rumores de rescate de Portugal ha penalizado al selectivo Ibex en la primera semana del año en la que ha recortado un 3,03%.
El excelente dato de empleo privado creado en EE UU no ha sido suficiente para darle la vuelta a un Ibex bajista. Pese a moderar su caída al cierre, el selectivo ha despedido la tercera jornada del año con un descenso del 0,88% pero salvando los 9.800 puntos.
Los números verdes hacen acto de presencia en los parqués europeos en el comienzo del año bursátil. El selectivo Ibex ha recuperado un leve 0,3% y vuelve a colocar los 10.000 puntos en el punto de mira en una jornada en la que han escaseado las referencias macroeconómicas y en la que el volumen de negocio ha sido bajo debido a que muchos inversores siguen de vacaciones navideñas.
El selectivo pierde un 17,43% anualLejos de recuperar terreno, el Ibex ha echado al cierre del ejercicio con un recorte del 17,43%. Con este descenso, el selectivo se ha alzado como el peor índice de una Europa dividida en dos por la crisis en el mercado de deuda. El sector bancario, una vez más, se ha convertido en el centro de las ventas. El euro, por su parte, también ha sufrido las consecuencias de la incertidumbre que han despertado algunas economías como Grecia, Irlanda, Portugal o España. En la última jornada del año, la Bolsa española ha perdido un 1,23%.
En una jornada con sabor a fin de año y falta de referencias macroeconómicas, el Ibex ha optado por los números verdes. El selectivo ha recuperado un 0,79%, un ascenso que sin embargo ha sido insuficiente para reconquistar los 10.000 puntos.
La Bolsa española ha protagonizado una jornada de dudas que finalmente se ha saldado con un leve ascenso del 0,05%. Al cierre, sin embargo, el selectivo ha conseguido recuperar los 9.900 puntos. Los datos macroeconómicos de Estados Unidos no han conseguido que el índice se decante por una tendencia clara.
La decisión de China de subir los tipos de interés y el anuncio de su Gobierno, que frenará el número de nuevas matriculaciones, se han convertido en una losa para la Bolsa española. El Ibex ha perdido un 2,06% que ha hecho imposible que se materialice el 'minirally' de Navidad. Con este descenso, el selectivo se sitúa en 9.899 puntos.
La Bolsa española ha recuperado un 2,1% en cuatro sesiones, en las que ha destacado la escasez de volumen y el apoyo de China al paquete de estabilización financiero de la UE y del FMI. Hoy, sin embargo, ha caído un 0,75%.
El Ibex ha puesto fin al que parecía un posible rally de fin de año. El selectivo ha perdido un 0,2% en una sesión marcada por los decepcionantes datos macroeconómicos en Estados Unidos y las ventas en el sector bancario.
Los malos augurios de Moody's y Fitch sobre la economía y los bancos españoles han pasado desapercibidos en los mercados al igual que el aviso de rebaja de calificación a Portugal. El Ibex 35 apura los últimos cartuchos del año y recupera un 2% superando los 10.200 puntos.
Faltan siete sesiones para que acabe el año y los inversores dan casi por finalizado el ejercicio. Aunque Wall Street ha enfriado las ganancias, el Ibex ha sumado hoy un 0,99%, un ascenso que ha sido insuficiente para reconquistar los 10.000 puntos. Los grandes valores se han alzado como el motor del selectivo en una sesión en la que los bancos han recibido una nueva amenaza por parte de Moody's.
Las dudas en torno a España sembradas, en este caso por Moody's, han castigado a la Bolsa española esta semana. La volatilidad generada hoy por la cuádruple hora bruja ha provocado una caída del 1,12% al Ibex que ha perdido un 2,2% en la semana. A pesar de ello, se revaloriza un 7% en lo que llevamos de diciembre.
La subasta de bonos y la reunión del Consejo de Europa cuyas conclusiones podría tener consecuencias para los países que peor lo están pasando en la UE, entre ellos España, han centrado la sesión de hoy en la que el Ibex 35 ha salvado los 10.000 puntos in extremis en una sesión negativo que se ha cerrado en tablas.
Los buenos datos macroeconómicos en EE UU han ayudado al Ibex a moderar sus caídas a la hora del cierre. Y es que el selectivo, que ha llegado a caer un 2%, ha cedido al cierre un 1,5%. El bono a 10 años también se ha estrechado, hasta el 5,4%.
Aunque la jornada ha tenido subasta de letras, nuevas tensiones en la prima de riesgo y amenazas de S&P de rebajas de rating a Bélgica, las Bolsas han conseguido cerrar la jornada en tablas con la mirada puesta en la reunión de la Fed que se celebra hoy. El Ibex 35 partirá mañana de los 10.162 puntos, tras subir un escaso 0,1%.
Las Bolsas comienzan la semana con ganancias, aunque moderadas. El selectivo Ibex sube un 0,29% y consolida los 10.100 puntos dejando para mañana el ataque a la zona de los 10.200. Los bancos han logrado salvar la jornada pese al tirón de orejas de Moody's.
Una semana levemente positiva con un fin de fiesta agridulce. Así podrían resumirse las últimas cinco sesiones del Ibex. El selectivo ha sumado un 1,07% semanal, un ascenso que se ha visto moderado por el recorte del 0,62% registrado hoy. La prima de riesgo, que se ha elevado hasta los 245 puntos básicos, ha marcado el ritmo de un selectivo que ha conseguido conservar los 10.100 puntos.
El excelente comportamiento de los grandes valores permite al Ibex dejar atrás las caídas registradas la semana pasada y todavía deja la puerta abierta a un posible rally de fin de año. De momento, el Ibex suma a las subidas de las últimas jornadas unas ganancias del 1,06% y se coloca por encima de los 10.100 puntos.
El Ibex ha recuperado la senda alcista después de comenzar la jornada con pérdidas. Los bancos están siendo la cruz de la sesión tras conocerse que a partir de febrero del año que viene comenzarán a realizarse de nuevo las pruebas de solvencia al sector.
Los toca pero no los conserva. Perder los 10.000 puntos fue demasiado fácil y recuperarlos se está convirtiendo en una complicada tarea. El Ibex se ha quedado a las puertas de esta cota en una sesión marcada por la falta de convicción en la subida. Al cierre, el selectivo ha sumado un 0,35% que le ha situado en los 9.924 puntos. La banca, una vez más, se ha convertido en la cara mala de la moneda.
La compra masiva de bonos por parte del BCE ha devuelto las subidas semanales al Ibex. Aupado por el sector bancario, el selectivo ha registrado un ascenso del 4,9% y ha recuperado los 10.000 puntos. El mercado de deuda también ha respirado y el riesgo país de España, que ha llegado a superar los 300 puntos básicos en algunas jornadas, se ha moderado hasta 220.
La fiesta bursátil continúa por segunda jornada consecutiva a pesar de que por breves momentos el BCE ha aguado el festival a las Bolsas. El Ibex ha recuperado la compostura rápidamente y al cierre ha subido un 2,78%. En dos días, estas ganancias suponen un 7,3%. Además, el selectivo se ha quedado a tiro de piedra de los 10.000 puntos.
Las nuevas medidas anunciadas por José Luis Rodríguez Zapatero, la moderación de la prima de riesgo de España y la confianza que ha puesto el mercado en el mensaje de mañana del presidente del Banco Central Europeo han devuelto las compras al Ibex. El selectivo ha sumado un 4,44%, su mayor ascenso desde que se aprobara el rescate de Grecia.
La crisis de deuda en Europa generada por la incertidumbre en torno a la solvencia de los países periféricos de la zona euro ha provocado al selectivo Ibex unas pérdidas mensuales del 14,28%, ésta no sólo es la mayor caída mensual del año sino que hay que remontarse a la quiebra de Lehman en septiembre de 2008 para ver una caída mensual superior a esta. Entonces, el selectivo español perdió un 17%.
Aunque la concreción del plan de rescate de Irlanda parecía insuflar el optimismo perdido a las Bolsas, lo cierto es que la alegría ha durado muy poco. La jornada, una vez más, se ha caracterizado por las ventas generalizadas y el Ibex ha perdido un 2,33% ante una prima de riesgo periférica que ha vuelto a dispararse. El riesgo país de España, en concreto, ha marcado un nuevo récord histórico por encima de los 270 puntos básicos.
Desde que Grecia fue rescatada, el Ibex no había vivido una semana tan bajista. Entonces perdió un 13,78%, en las cinco últimas jornadas, el selectivo ha encajado un recorte del 7,05% siendo además la tercera peor semana desde enero. Las dudas en torno a España han copado la atención de los inversores penalizando además a la prima de riesgo que ha marcado máximos desde la entrada del euro y la propia moneda europea que ha caído a 1,32 dólares.
Los mensajes de que no hay riesgo de que nuevos países de la UE pidan ayuda han tranquilizado los ánimos de los inversores en los mercados europeos, sobre todo en el español. Tanto es así que el Ibex 35 ha pasado en algo más de una hora de perder más de un 1,5% a caer sólo un 0,2% al cierre.
Las ganancias no son nada espectacular pero al menos el Ibex ha conseguido poner suelo a las caídas de las tres últimas jornadas. El selectivo ha recuperado hoy un 0,52% apoyado en una moderación de la prima de riesgo, que ha llegado a dispararse hasta los 250 puntos básicos, las novedades del plan de austeridad de Irlanda y algunos datos macroeconómicos positivos que han llegado desde Estados Unidos.
En un mercado que parece catalogar de la misma manera a España, Irlanda o Portugal, no está de más puntualizar las diferencias que existen entre estos países. Los analistas destacan que España no es Irlanda, pero no dejan pasar la ocasión de resaltar la necesidad de llevar a cabo los planes de austeridad y acometer las reformas pertinentes.
La Bolsa española, lejos de levantar cabeza sigue perdiendo soportes de referencia. Mientras que ayer cerró por debajo de los 10.000 puntos por primera vez desde agosto, hoy se ha despedido de los 9.700 puntos al ceder un 3,05%, elevando a 5,6% las pérdidas de dos sesiones con el lastre de la banca. Portugal, otro de los países en el punto de mira, ha visto como su selectivo ha caído un 2,1%.
La intervención de Irlanda no ha convencido a unos mercados que no desvían la mirada de otros países como Portugal o España. En este contexto, los analistas consideran que son necesarias más medidas de ajuste fiscal y reformas estructurales para que vuelva la confianza a las Bolsas y destacan que España no es Irlanda.