Seat presentará un segundo expediente de regulación (ERE) temporal sobre un máximo de 5.300 empleados de la factoría de Martorell (Barcelona). El nuevo ajuste completará el actual entre el 2 de febrero y el 30 de junio y responde a la continua caída de ventas.
La banca española no está conforme con el principio de acuerdo anunciado la semana pasada por la comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, ante las distintas recapitalizaciones bancarias con capital público. Cree que las medidas no son transparentes. Asegura que en algunos casos el coste de las inyecciones por parte de los Estados se está realizando por debajo de su coste de mercado, 'lo que puede considerarse subvenciones encubiertas', señala un alto ejecutivo del sector.
Al menos 25 fondos registrados en la CNMV tenían exposición a instituciones que dieron mandato de inversión al otrora venerado, y ahora odiado, Bernard L. Madoff. A cierre del primer semestre, y según Lipper, el patrimonio afectado era de sólo 30,94 millones.
El sector inmobiliario ha acogido con entusiasmo contenido la reforma mercantil aprobada el pasado viernes por el Consejo de Ministros. La medida exime a las compañías por dos años del requisito de afrontar una ampliación de capital, que antes sí era obligada, cuando la depreciación de activos era tal que podía provocar su disolución.
El gigante japonés Sony anunció ayer la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE) para 275 trabajadores de su fábrica de Viladecavalls (Barcelona). La compañía también desveló que congela los salarios para el resto de los empleados del Barcelona Technology Center y que transferirá 185 personas desde este centro a una filial de logística. UGT y CC OO tildaron el ERE de 'indecencia' y 'aberración'.
El máximo responsable del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, dijo ayer en Madrid que tan importante es 'fortalecer las ratios de capital de la banca' como 'recuperar la transparencia y alejarse del individualismo y la codicia'. No estimó necesaria 'la recapitalización pública' para los bancos españoles, pero sí exigió para todos una supervisión 'más clara y robusta'.