La guerra del ruido en Barajas comienza a cobrarse víctimas. Aerolíneas de carga y con vuelos nocturnos a Latinoamérica amenazan cambiar el aeropuerto de Madrid por los de Lisboa o París. Se sienten perseguidas con la incoación de más de 600 expedientes que les imponen gastos de 10 millones.
Las familias Nozaleda, Carabante y Santamaría negocian una salida a sus compromisos de inversión que evite la asfixia de sus respectivas compañías (grupo Nozar, Corporación Issos y Reyal Urbis), informan fuentes cercanas a los empresarios.
El mercado inmobiliario continúa prácticamente parado debido al empeoramiento de la coyuntura económica y a las dificultades de acceso al crédito. Esto es lo que explica que los precios de la vivienda sumen un mes más una nueva caída, que alcanza el 10,2% anual en términos reales, según la tasadora Tinsa.
Fibanc Mediolanum reestructura su modelo de negocio en España. La entidad ha optado por cerrar la única oficina operativa que tenía en Madrid para focalizarse en el asesoramiento financiero personalizado. Diez trabajadores dejarán el banco y otros siete se reubicarán en otros puestos.
Ferrovial quiere mantener el aeropuerto británico de Stansted pese a que Competencia aboga por su venta, junto a Gatwick y un tercer aeródromo en Escocia, para evitar una situación de monopolio en Reino Unido. La española, a través de su filial BAA, intensifica los contactos con aerolíneas y consumidores con el fin de que influyan en la decisión que el regulador dará a conocer en marzo.