Jornada de idas y venidas en el parqué neoyorquino. La caída de las peticiones iniciales de desempleo y el explosivo debut bursátil de LinkedIn animaron las compras contra una avalancha de referencias macro poco favorables, que azuzaron las ventas. A la postre, subidas moderadas.
Pese a la recuperación en el tramo final, el Dow Jones cede un 0,55%
El parqué neoyorquino persiste en la corriente bajista de las dos últimas jornadas, pero una reacción postrera evita caídas mayores. Tanto el apartado macro como el empresarial -con los resultados de HP como decepción principal- ofrecieron este martes nuevas trabas, dificultando el rebote.
Los datos de empleo en el sector privado y la caída del precio de las materias primas llevan al parqué neoyorquino a encajar la tercera jornada consecutiva a la baja.
Las dudas continúan planeando en sobre el parqué neoyorquino. Después de que ayer el Dow Jones cerrase plano, hoy los futuros apuntan a que la tendencia se repetirá en los tres indicadores, al menos en el inicio de sesión.
Ni el aumento de los pedidos de fábrica ni los resultados de MasterCard. Ningún argumento es bueno para devolver la corriente ganadora al parqué neoyorquino, aunque en el último tramo se suaviza la caída.
Pese a que los analistas preveían que las celebraciones por el asesinato de Bin Laden se extenderían hasta el parqué neoyorquino, azuzando a los principales selectivos, el efecto quedó reducido a un chispazo de apertura. Al término de la jornada, pueden las pérdidas.
El dólar continúa perdiendo posiciones frente al euro
La decisión de la Fed de mantener los tipos de interés inamovibles al menos hasta otoño ha gustado en Wall Street. El selectivo Dow Jones ha subido un 0,76% mientras que el Nasdaq se ha anotado un 0,78% y ha regresado a niveles en los que no se encontraba desde diciembre de 2000.
Larga como un día sin pan es la tendencia que lleva el índice americano, y técnicamente no parece que eso vaya a cambiar, muy al contrario seguirá ascendiendo, ayer lo confirmó rompiendo al alza un Hombro Cabeza Hombro invertido
La resaca del lunes deja paso a los avances en el parqué neoyorquino, donde los resultados trimestrales de Ford aceleraron las alzas esta jornada. El rally lleva al Dow Jones a ganar un 0,93% y lo coloca en cotas máximas desde 2008 (12.595 puntos).
La Bolsa de Nueva York arranca la semana con cierta apatía después del parón de la Semana Santa. El Dow Jones cede un 0,21% (12.479 puntos) y el S&P 500, un 0,16% (1.335 enteros). Por el contrario, el tecnológico Nasdaq gana un 0,20% (2.825 puntos).
Los resultados empresariales han hecho de contrapeso ante los negativos datos macroeconómicos y han permitido a Wall Street despedir la jornada con números verdes. El Dow Jones ha sumado un 0,42%, mientras que el S&P 500 ha repuntado un 0,53% y el tecnológico Nasdaq se ha revalorizado un 0,63%.
Los inversores, deseosos de buenos resultados empresariales, afianzan hoy las compras apoyados en los balances trimestrales de Yahoo!, Intel y United Technologies. A la espera del gigante Apple, el Dow Jones registra un sólido avance del 1,52%.
Las alzas vuelven al parqué neoyorquino, después del correctivo que ayer aplicó S&P a la economía de Estados Unidos y que llevó a los principales selectivos a encajar un recorte superior al 1%. La agenda macro y los resultados de Johnson & Johnson contribuyen al repunte.
El aviso de S&P sobre la deuda de Estados Unidos desata las ventas en el parqué neoyorquino, que queda ya lejos de las cotas máximas que tocara hace un par de semanas. Una pequeña recuperación de última hora evita las cotundentes caídas registradas durante buena parte de la jornada.
Los futuros del parqué neoyorquino pronostican un arranque de sesión negativo. En un día en el que la única referencia macro es el índice NAHB del mercado de viviendas y la agencia S&P ha puesto en perspectiva negativa la deuda de EE UU, el Dow Jones cedería un 0,50%
El jueves empezó con mal pie para el parqué neoyorquino. El aumento de las peticiones iniciales de desempleo y el fantasma de la deuda en la zona euro desataron la corriente bajista y obligaron a los selectivos a pelear por la remontada. Al término, llegan los frutos a tanto esfuerzo.
El parqué neoyorquino perdió el empuje de la apertura y entró en zona peligrosa, aunque a la postre los tres selectivos de referencia escaparon de las pérdidas. Solamente el Nasdaq resiste el envite con solvencia.
El parque neoyorquino acaba el martes ampliando las caídas de la apertura. Los resultados de Alcoa y la depreciación del crudo pesan en el ánimo de los inversores.
Los alcistas probaron una y otra vez a ganar terreno en los últimos días, pero de poco ha servido. La Bolsa de Nueva York acaba con pérdidas una semana en la que el precio de las materias primas alcanzó máximos históricos.
Un nuevo terremoto en Japón recupera el fantasma de la crisis que vivió el país asiático el 11 de marzo y hace caer en picado a la Bolsa de Nueva York. Apaciguadas las primeras alertas, el parqué neoyorquino reacciona y recupera parte del terreno perdido, aunque acaba con descensos en los tres selectivos de referencia.
Los resultados de Monsanto cayeron como un jarro de agua fría en el parque neoyorquino, diluyendo las contundentes alzas de la apertura. Con todo, los tres selectivos de referencia acaban ganando cómodamente.
La división del comité de la Reserva Federal de EE UU ante una posible subida de los tipos de interés no ha tranquilizado a los inversores, que esperaban un poco de luz sobre la política económica de la Fed. En una jornada sin rumbo fijo, el selectivo Dow Jones cerró la sesión con una caída del 0,05%.
Ante la expectativa de lo que haga el presidente de la Reserva Federal con los tipos y en ausencia de otras referencias macro, la vacilación fue la pauta de la primera jornada de la semana en el parqué neoyorquino, donde la escalada del precio del petróleo retrajo las compras. Con todo, el Dow Jones rebasa su cota más alta en el año después de subir un 0,19% (12.400 puntos).
El sector tecnológico boicotea en el último tramo de la sesión los avances que durante el viernes colocaron a la Bolsa de Nueva York en máximos de casi tres años y a los que el parqué llegó de la mano de los datos de empleo, que constatan una mejoría en marzo.
Que Japón ha pasado factura al balance mensual de la Bolsa de Nueva York es evidente. Que podría haber sido peor, también. El Dow Jones acaba marzo con un alza del 0,76%. Mientras, el S&P 500 y el Nasdaq caen un 0,10% y un 0,04%, respectivamente.
El parqué neoyorquino contradice los resultados poco favorables del ámbito macro y remonta una floja apertura, para acabar el martes con avances en los tres selectivos de referencia. Tampoco le afecta la rebaja del rating de Grecia y Portugal.
La compra de la firma de comercio electrónico GSI Comerse por parte de eBay y varias mejoras en las recomendaciones de las empresas de telecomunicaciones no lograron inyectar optimismo en Wall Street, que al cierre optó por las pérdidas. El selectivo Dow Jones cedió un leve 0,19%.
Los futuros del parqué neoyorquino prevén un inicio de sesión sin un rumbo claro. Los datos macro conocidos hasta el momento y la nueva alerta nuclear en Japón son dos de los factores que añaden incertidumbre al panorama. Ante esta situación el Dow Jones subiría un leve 0,08% y conservaría los 12.100 puntos.
La Bolsa de Nueva York cierra una semana en la que prefirió no atender a los motivos de preocupación y aferrarse casi exclusivamente a aquellos datos y noticias que pintan un horizonte económico esperanzador. El desastre de Japón, el conflicto en Libia o la crisis de deuda quedan en un segundo plano, tras las buenas perspectivas que albergan las empresas estadounidenses.
Alzas en la Bolsa de Nueva York, donde la expectativa de que la próxima campaña de resultados resulte favorable ha restado peso a la crisis portuguesa o a los conflictos en Libia.
Las alzas vuelven a la Bolsa de Nueva York este miércoles, después de una apertura poco prometedora. El fabricante aeronáutico Boeing ha anunciado que aumentará el flujo de caja, hecho que podría conllevar un incremento del dividendo. Esta expectativa y las oportunidades que presenta la recuperación de Japón han ayudado a remontar el día.
La Bolsa de Nueva York opta por la recogida de beneficios este martes, después de las abultadas alzas que ayer permitieron al Dow Jones recuperar los 12.000 puntos. Con pocas referencias macro y menos excitación que en la jornada previa dentro del apartado empresarial, la corriente bajista acaba con la racha de tres días consecutivos de subidas.
La compra de T-Mobile USA por AT&T ejerce de revulsivo en el parqué neoyorquino, donde las alzas ganan brío este lunes al amparo del anuncio de la operación.
La medida de la Fed -permitirá a varios bancos elevar el dividendo- unida a la decisión libia de decretar el alto al fuego y a la intervención del G-7 para frenar el avance del yen, han permitido a los selectivos amortiguar parte de las pérdidas que deja el desastre japonés. Aún así, Wall Street cierra la semana en negativo. El Dow Jones cede en los cinco días un 1,54%, el S&P retrocede un 1,92%; y el Nasdaq se deja un 2,65%.
Si ayer a la crisis japonesa se le unía un decepcionante dato de vivienda, que llevó al parqué a vivir su peor día del año, hoy ha sucedido todo lo contrario. Gracias una batería de referencias macro los inversores se han centrado en la economía nacional y han conseguido recuperar parte del terreno perdido estos días. Los resultados de FedEx también han contribuido al rebote. El Dow Jones avanza un 1,39%, hasta los 11.774 enteros.
La crisis nuclear japonesa, agravada por las palabras del comisario europeo de Energía, y el mal dato de vivienda han sido razones más que suficientes para hundir al parqué en los números rojos. El Dow Jones cede un 2,04%, hasta los 11.613 puntos.