Cinco años y un día del principio del fin
El pasado domingo 9 de marzo se cumplió el quinto aniversario de una épica hazaña alcista. 1.826 días de imparable tendencia en Wall Street. La pregunta que todo el mercado se hace es... ¿Cuándo se agotará?.
El pasado domingo 9 de marzo, se cumplió el quinto aniversario del inicio de la épica tendencia alcista en los selectivos americanos. Fue el viernes día 6 de marzo 2009 cuando empezó el principio del fin de los osos con el último mínimo. El lunes 9 comenzó la impresionante escalada. Aunque muchos sostuvieron en aquel entonces que era inviable la hazaña de girar la potente tendencia bajista, lo cierto es que sí hubo unos pocos maestros que lo vieron posible e iluminaron al resto de alumnos. Hoy recogemos en este análisis, las numerosas señales y avisos que muchos entendidos están vertiendo sobre un posible techo de mercado en Wall Street. Nosotros damos las nuestras, las velas y el precio. Pero antes, un resumen de lo acontecido en la sesión de ayer.
Mucha incertidumbre había en los mercados para este inicio de semana. La súbita caída de última hora el viernes pasado en Europa, junto a los primeros enfrentamientos armados en Crimea, entre el ejército ruso y el ucraniano, no permitían albergar muchas esperanzas para los toros. La clara debilidad del Káiser germano tampoco. Tan sólo el sostenido cierre semanal americano dejaba la puerta abierta a alguna ilusión. Tras las dudas iniciales se despejaron en parte las dudas. Europa subía con fuerza y en algunos selectivos como el español, brillaba el +1% verde. El Dax se quedaba estancado. A medida que llegaban noticias del Este y subía la tensión de las armas, se fueron desinflando los ascensos. La volatilidad llegaba con los disparos entre ambos ejércitos. Como resultado, se acabaron imponiendo los números rojos. Especialmente duros de nuevo en el selectivo germano, alcanzaron el entorno del -1%.
Los tres mosqueteros
Pero los toros no amedrentaron a pesar de la complicada situación. Europa no secundó la debilidad del Káiser y poco antes del final de la jornada los alcistas devolvían la primera batalla de la semana a su nivel de origen, A cierre, los tres mosqueteros de nuestro continente acabaron la sesión en positivo, Ibex, Mibtel y Cac. El Campeador ascendía un +0,3%, hasta situarse frente a la antigua resistencia de los 10.200 puntos, no superada a cierre semanal. Seis puntos más abajo dejó a sus tropas. Trazó un extenso martillo invertido verde que alcanzó máximos en los 10.292 puntos y mantuvo las medias móviles de las 20 y 50 sesiones. Siguen juntas, en paralelo y sin girarse a la baja. La figura muestra el rechazo a caer y el ímpetu de los toros por continuar en su lucha por alcanzar los 10.552 puntos.
El General De Gaulle francés ascendía un ligero +0,10% hasta los 4.370 puntos. Misma figura que en el selectivo español tras buscar sus máximos anuales a primera hora de la mañana. También mantiene la media móvil de las 20 sesiones en su caso. Por su parte, El César italiano no dio opciones a los bajistas. Mantuvo se ejemplar comportamiento y fue el selectivo más enérgico. Subió un +0,58% hasta los 20.753 puntos. Peonza verde con sombras en ambos extremos. Empieza a delatar el fallo de la estrella fugaz dibujada a finales de la pasada semana.
La Europa indecisa y la peligrosa
Entre los perdedores, mínimos descensos del -0,08% en el Emperador europeo hasta los 3,092 puntos. Esbelta vela doji con cierre en la parte media/baja de la figura, tras alcanzar a primera hora los 3.126 puntos y la media móvil de las 20 sesiones. Por abajo fue a cubrir a la parte superior de hueco alcista del martes pasado. Finalmente se sujeta sobre la media móvil de las 50 sesiones. El mismo significado técnico que en el Ibex. Ganas de subir y resistencia a caer. Los descensos en el Footsie fueron del -0,35% hasta los 6.689 puntos. Martillo invertido de cuerpo real rojo que se detuvo en los mínimos del marubozu trazado en el inicio de la crisis de Ucrania, sobre los 6.671 puntos. Cede la media móvil de las 50 sesiones. Si bien la figura da esperanzas a los cuerpos especiales británicos para el contraataque, con un posible doble suelo, un pequeño descuido y se verán sobre los 6.600 puntos luchando por la media móvil de las 200 sesiones. Han de atacar de inmediato o la batalla por los máximos históricos sufrirá un nuevo revés.
La peor parte se la llevó el Káiser germano. La crisis de Ucrania y las posibles sanciones a Rusia le han dejado muy tocado. La maniobra del "Loco Iván" parece haber funcionado. Los blindados se retiran a marchas forzadas, perdiendo el soporte intermedio de los 9.338 puntos sin figura de vuelta. Lograron detener a sus adversarios en la directriz alcista acelerada del corto/medio plazo. Resistió por el momento. Si es perforada, el nivel clave de los 9.000/100 puntos espera. El Dax se dejó un abultado -0,91% hasta los 9.265 puntos. Vela de pequeño cuerpo real rojo y amplias sombras en sus extremos. La divergencia alemana empieza a ser muy preocupante. Aún así, mientras el resto de homólogas aguanten, pensaremos que puede ser producto de la tensión por el tema ruso y por amplio movimiento lateral en el que se encuentra inmerso. La lateralidad no es más que un intenso debate entre la oferta y la demanda llegado a un nivel. Los fuertes vaivenes, las salidas en falso así como figuras engañosas son su forma de desarrollarse. Pero sí los Panzer entregan los citados 9.000 puntos, mucho ojo. El resto de Europa se puede desplomar en cuestión de horas. No obstante, los traders más agresivos verán una clara ventana de Trading para entrar en la subida libre absoluta del Dax. Ofrece una clara oportunidad con poco riesgo si se acerca al gran soporte de los 9.000 puntos. La media móvil de las 200 sesiones será su Stop de pérdidas sobre los 8.815 puntos.
Cinco años y un día. Felicidades
La primera sesión tras el quinto aniversario de la contundente tendencia alcista en Wall Street no deparó cambios. Los bajistas continúan sin poder asestar un golpe contundente que haga dudar de la subida libre en la que están instalados sus grandes índices. El General Custer se quedó plano -0,05% sobre los 1.877 puntos. Nuevo doji, esta vez con cierre arriba. Misma figura y resultado en el Nasdaq Composite. Mínimo descenso del -0,04% hasta los 4.334 puntos. En el Sargento de Hierro, las leves caídas fueron del -0,21% hasta los 16.418 puntos. Dibujó un pequeño martillo de cabeza roja. Tranquilidad por tanto en zona de máximos.
La cuestión que todos nos preguntamos es si llega ya la hora de un gran techo temporal a la kilométrica e imparable tendencia. No son pocos las grandes casas de análisis y bancos de inversión que hablan de descensos entre el -20% y el -50% al otro lado del Atlántico. Tampoco las señales que ven muchos grandes inversores. Alejamiento de la Bolsa de la realidad económica. El fuerte diferencial entre alcistas y bajistas que llega a niveles extremos. Pánico comprador entre los inversores para no quedarse fuera de otro gran impulso. El fuerte optimismo que reina en los mercados. La posible retirada de estímulos de la Fed y el famoso "tapering". La altísima sobrecompra del largo plazo y la vertical ascensión. Los máximos históricos de la deuda de los inversores para comprar acciones. El porcentaje de cotizadas por encima de la media móvil de las 200 sesiones. El síndrome inversor ATM (Anythings thats move), se dispara contra todo lo que se mueva. Los grandes ciclos alcistas tienen una duración de cinco años. ¿Sigo?
Pues bien, todas ellas son percepciones, sentimientos y señales de mercado muy válidas y respetables. Pero chocan con lo esencial, el precio o nivel. Este es quien dicta sentencia, así de sencillo. De momento y a pesar de tantos generosos o interesados avisos, Wall Street no cae ni a patadas. Y aquí los que mandan son ellos. Donde hay patrón no manda marinero, dicen. Además, a todas estas teorías del techo de mercado se opone una severa realidad llamada subida libre absoluta. Ya hemos explicado en numerosas ocasiones lo que esto significa. Bolsas alcistas por los cuatro costados. El mayor éxito que se pueda ver sobre un gráfico.
Por tanto, mientras el S&P 500 esté por encima de los 1.576 puntos, podrán continuar los sermones de muchos sobre el final de la impresionante tendencia, pero esta seguirá subiendo. Lo mismo sucede con el Dow Jones mientras no ceda los 14.198 puntos. Me fío más de las velas que de cientos de sabios de Bolsa. Porque la mayoría de los ahora hablan de techo en 2014, no vieron el suelo en 2009. ¿Cómo vamos a creerles ahora?
En este aniversario en Wall Street, hoy les mostramos el gráfico del largo plazo del General Custer. Mañana será el Sargento de Hierro. Veremos como a pesar del la duras resistencias crecientes a las que se enfrentan, no hay signos que hablen de agotamiento. Muy al contrario. Se denota una solidez y una contundencia sorprendente tras más de cinco años sacando la piel a tiras a los osos.