Los líderes del G20 se han comprometido a reactivar la economía con medidas de estímulos fiscales e inversiones productivas que deben ser coordinadas porque como dijo ayer el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, "hemos comprobado que medidas país a país tienen escasa eficacia". Zapatero explicó que la política fiscal es también acelerar la inversión productiva que "es lo más sólido para combatir la recesión económica". El presidente dijo que el sector público tiene que liderar en este momento y con carácter coyuntural a la economía.
Los países han acordado que desde principios de esta década la apreciación de los riesgos no ha sido adecuada y no se ha "ha actuado con debida diligencia" en un momento en el que los estandares de trabajo se han relajado.
La cumbre del G20 arrancó ayer con una cena en la Casa Blanca a la que asistieron todos los participantes a esta reunión. Durante el encuentro se habló de la necesidad de poner en marcha un estímulo fiscal a nivel mundial que sea coordinado para que tenga eficacia, algo que está impulsando el primer ministro británico, Gordon Brown. Fuentes de la delegación española indicaron que España y otros países están dispuestos a estudiar la medida.
Brasil, que ejerce la presidencia del G-20, respaldó hoy la participación de España en la próxima cumbre prevista para antes de finales de abril, y mencionó la posibilidad de su integración formal en este Grupo.
Unos 600 clientes del banco islandés Kaupthing en Bélgica se manifestaron hoy en Bruselas para pedir garantías a sus depósitos y lograr el desbloqueo de sus cuentas, congeladas desde hace más de un mes.
La mayor entidad financiera de Italia, Unicredit, ha aprobado un aumento de capital de 3.000 millones de euros mediante la emisión de 973.078.170 acciones ordinarias a realizarse en uno o varios tramos que se ofrecerán a los socios, en junta de extraordinaria de accionistas celebrada ayer.
El presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, instó hoy al Congreso estadounidense a aprobar, con la mayor celeridad posible, "al menos un avance" del plan de rescate previsto para solventar los efectos de la crisis financiera.
El ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI) Rodrigo Rato ha apostado hoy por la economía de mercado para abordar la crisis financiera internacional frente al "riesgo" que supondría la adopción de medidas proteccionistas como consecuencia de "presiones políticas domésticas inevitables".
El presidente de EEUU, George W. Bush, y el primer ministro británico, Gordon Brown, aseguraron hoy que los líderes del G20 "han hecho progresos" en sus conversaciones previas a la cumbre financiera, y se mostraron confiados en que los países alcancen un consenso final.
Son las únicas compañías de pequeña capitalización que ganan en 2008 y están entre las opciones favoritas de los analistas por su escasa dependencia al ciclo.
La banca ha respondido a las peticiones del Gobierno con una participación masiva en el fondo de liquidez conocido como FAAF. Mientras, el PP vuelve a desmarcarse con las medidas de ayuda a la banca. El Partido Popular sólo está dispuesto a apoyar avales para el sistema financiero por 100.000 millones y no por el doble.
Manuel Martínez traza un paralelismo entre las teorías de la Tierra cóncava de Fisher y la vida del ejecutivo después de los 49 años, momento en el que, rechazado por muchos, debe iniciar su renacimiento.
La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's ha dibujado un panorama sombrío para las entidades especializadas en banca corporativa y de inversión. La firma reconoce, no obstante, que empieza a haber signos de recuperación en el mercado de créditos.
La reforma del plan Vive no ha colmado las expectativas del sector automovilístico. Las diez novedades que incluye el nuevo proyecto de Industria, como la inclusión de vehículos usados y la ampliación de 5.000 a 10.000 euros de la financiación sin intereses, parecen insuficientes para la patronal española que ha criticado, entre otros aspectos, la falta de ayudas directas y el efecto limitado de la medida.
La cumbre de Washington intentará reforzar la coordinación en la supervisión de la banca, pero no resolverá de un día para otro los errores que han motivado la crisis