Dow Jones

En el último tramo de la sesión, la Bolsa de Nueva York consiguió recortar las caídas superiores al 2% de la apertura. La alerta nuclear en Japón queda, así, contrarrestada en parte por la Fed.

Los ecos del seísmo que azotó Japón el pasado viernes llegan al parqué neoyorquino con una jornada de retraso. La repercusión de la catástrofe sobre la economía penaliza este lunes los principales selectivos. Con todo, en el último tramo se amortiguan los recortes.

Los avances del viernes no son suficientes para contrarrestar los recortes semanales en la Bolsa de Nueva York. Los selectivos caen en los cinco días más de un 1%. El Nasdaq lo hace más de un 2%.

Las decepcionantes referencias macro, el fantasma de deuda en la eurozona y el revés en las expectativas económicas de China cavaron el hoyo por el que se despeñó el parque neoyorquino este jueves. Los enfrentamientos en Arabia Saudí -principal productor de petróleo- acabaron dando la puntilla. El Dow Jones anota su peor caída desde agosto de 2010.

Contrastes entre los selectivos. Así fue el miércoles en el parque neoyorquino, donde la extrema precaución que exige la crisis libia empujó a la recogida de beneficios. El Dow Jones, que peleó hasta el último minuto apoyándose en las alzas de IBM, es el mejor parado y acaba casi plano.

La caída del precio del petróleo allanó el terreno y la banca hizo el resto para devolver las compras al parqué neoyorquino. La jornada acaba con subidas generalizadas en los tres selectivos de referencia.

La escalada del precio del crudo arrastra una jornada más al parqué neoyorquino hacia las pérdidas generalizadas. Sin referencias macro en la agenda, el frente empresarial -con las tecnológicas a la baja- agravó la herida.

El encarecimiento del petróleo penalizó la renta variable estadounidense este viernes. La mejora del empleo no pudo ejercer como contrapeso, después de conocerse que la tasa de paro es favorable pero no satisface las expectativas alimentadas en los últimos días. Con todo, el parqué neoyorquino amortigua las caídas en el último tramo de la sesión y cierra la semana en positivo.

Los principales selectivos estadounidenses cogieron carrerilla este jueves con el precio del petróleo en descenso y las referencias macro a favor.

Jornada de idas y venidas. Después del varapalo del martes, el parqué neoyorquino tardó en encontrar su camino. A la postre, el iPad 2 de Apple ayudó a recuperar las ganancias en un día en el que persistió la preocupación por el precio del petróleo.

Pese a que el parqué neoyorquino empezó la jornada con ganancias -al rebufo del cierre alcista de febrero-, la alegría resultó pasajera. Las palabras del presidente de la Fed, Ben Bernanke, ante el Senado de Estados Unidos alertando sobre los efectos del alto precio del petróleo cayeron como un jarro de agua fría y borraron de un golpe los avances. El barril de Brent repunta un 3,23% y cotiza a 115,42 dólares. Por su parte, el crudo de Texas sube un 2,74% y cierra a 99,63 dólares.

El parqué neoyorquino se resiste a ceder y ni las revueltas en Oriente Medio ni el precio del petróleo consiguen que Wall Street cierre el mes en negativo. La subida de hoy ha venido propiciada por la estabilización del precio del crudo y por el repunte de los ingresos personales, que han llevado a los inversores a apostar por las compras, dejando a un lado la situación internacional. El Dow Jones gana en el mes un 2,81%, el S&P sube un 3,20%, y el Nasdaq avanza un 3,04%.

Wall Street consigue superar las dudas de los días anteriores y abre la sesión en verde. El índice norteamericano ha optado por hacer caso omiso de los malos datos de crecimiento y premiar a sus inversores con una subida del 0,26% que le deja en los 12.100 puntos.

Los inversores han continuado con la mirada puesta en Libia y en especial en la producción de petróleo, lo que ha provocado que los indicadores no encontraran un rumbo claro y la sesión se definiera por la volatilidad. La idea de un posible corte del suministro libio sobrevolaba el parqué hasta que se ha conocido que Arabia Saudí planea suplir el abastecimiento libio, lo que ha conseguido estabilizar el precio y relajar las tensiones. Solo el Nasdaq logra cerrar en verde.

La situación libia continúa acentuando las pérdidas en el parqué neoyorquino y hoy los recortes han llegado a hacer perder al Dow Jones más de 100 puntos, algo que no sucedía en ocho meses. Las cuentas de HP, presentadas ayer al cierre del mercado, no han hecho mas que favorecer los números rojos. Asimismo, el precio del barril de crudo de Texas sigue su escalada imparable y llega a niveles de 2008.

El parqué neoyorquino parece dejar atrás el pesimismo de la jornada anterior que llevó a los selectivos a cosechar los peores resultados de los dos primeros meses del año. Los futuros anticipan un inicio de sesión positivo en el que el Dow Jones crecería un 0,23%, manteniéndose en los 12.200 puntos.

Ayer, festivo por el Día del Presidente, el parqué neoyorquino se libró de los recortes generalizados en los mercados por los disturbios en Libia. Y hoy tocaba cifrar las pérdidas. Los números rojos se han impuesto desde la apertura en todos los índices, que se han visto arrastrados también por el mal dato de la vivienda. Asimismo, el crudo de Texas ha experimentado la mayor subida en un solo día de los últimos dos años.

Viernes de idas y venidas que acaban con balance positivo para los principales selectivos de Estados Unidos. Así, el Dow Jones gana un 0,59% y el S&P 500 y el Nasdaq suben por los pelos un 0,19% y un 0,08%, respectivamente. También en el cómputo semanal ganan todos.

El selectivo Dow Jones se repone de las pérdidas de la apertura y consigue acabar en los 12.318 puntos, después de ganar un 0,24%. Lo hace en una jornada marcada por el IPC y la confianza de la Fed de Filadelfia, en el que la ola de revueltas en Oriente Próximo hizo subir el precio del petróleo de Texas un 1,61%.

La confianza de la Reserva Federal en la recuperación económica ayuda a sostener los avances en el parqué neoyorquino este miércoles y salva la amenaza que por un momento representó el nuevo capítulo de agitación en Oriente Próximo -con dos barcos de guerra iraníes preparados para atravesar el Canal de Suez-. Este escollo hacía peligrar unas subidas, que ya desde el toque de campana ganaban terreno, alentadas por los resultados de Dell y el aumento contra pronóstico de las viviendas iniciadas en enero.

La batería de datos macro, la mayoría de ellos por debajo de las expectativas de los analistas, noquea al parqué neoyorquino, que registra este miércoles los mayores recortes desde el 28 de enero, cenit de la crisis egipcia.

El parqué neoyorquino arranca la semana con cierta desgana y muchas idas y venidas. Este lunes sin referencias macro, el presupuesto de Estados Unidos para el próximo ejercicio fiscal acaparó toda la atención aunque resultó insuficiente para establecer una corriente. La cautela fue la máxima del día.

La renuncia de Mubarak ha disipado la incertidumbre de un plumazo y ha devuelto al parqué la corriente alcista, asegurando así los avances la semana. Tras una apertura en números rojos, Wall Street ha conseguido amarrar las ganancias apoyado también en el repunte de la confianza del consumidor. En los últimos cinco días, el Dow Jones avanza un 1,50%, hasta los 12.273 puntos. Asimismo, el S&P 500 gana un 1,39%, y queda en 1.329 enteros; y el tecnológico Nasdaq suma un 1,45%, hasta los 2.809 puntos.

A pesar de la incertidumbre que se ha instalado hoy en el parqué por la crisis de deuda europea y el conflicto egipcio, Wall Street ha moderado las caídas hasta cerrar con signo mixto. Solo el Dow Jones, que se ha visto arrastrado por el mal dato de Cisco, ha cedido un 0,09% hasta los 12.229 puntos.

El parqué neoyorquino contiene la racha ganadora y acaba con descensos comedidos este miércoles, en el que las conversaciones para la fusión de Nyse Euronext y Deutsche Börse y la comparecencia del presidente de la Fed en el Senado han acaparado la atención. æscaron;nicamente el Dow Jones escapa por los pelos y acaba con una exigua subida del 0,06% (12.239 puntos).

El parqué neoyorquino vuelve a la corriente ganadora con el transcurso de la jornada después de que la subida de tipos en China le hiciese titubear al toque de campana. El Dow Jones sube este martes un 0,59% y alcanza los 12.233 puntos.

La corriente compradora no decae en el parqué neoyorquino, que este lunes encontró en las operaciones empresariales el mejor argumento para extender el rally alcista. El Dow Jones sube un 0,57% y alcanza los 12.161 puntos.

El parqué neoyorquino salva la semana gracias a las ganancias acumuladas en los dos primeros días. Los ecos de la revuelta en Egipto, el temporal de frío y la decepción con algunas referencias macro han pesado en las últimas sesiones impidiendo avances mayores. Con todo, en los cinco días el Dow Jones de Industriales anota un incremento del 2,27% y consolida ampliamente el soporte de los 12.000 puntos (12.092 enteros).

Toda la cautela es poca en el parqué neoyorquino. Si la semana arrancó con la crisis de Oriente Próximo en un segundo término, este jueves la preocupación por el agitado panorama egipcio -que ya afectara ayer- castigó a los principales selectivos estadounidenses. No obstante, en el último tramo de la sesión, los favorables resultados de la agenda macro contrarrestaron parte de los recelos. Bernanke también contribuyó al efecto.

Wall Street ha cerrado con signo mixto una sesión marcada por la volatilidad. Tras firmar su mejor mes de enero desde 1997 y situarse en niveles de 2008, el parqué se toma un respiro y opta por contener las alzas, tendencia que se justifica por las revueltas en Egipto y el temporal que paraliza un tercio del país. El Dow Jones avanza un ligero 0,02%, hasta los 12.041 puntos.

Las alegrías van a más. Si ayer el parqué neoyorquino cerraba el mejor enero desde 1997, este martes febrero arranca con ganancias en los tres selectivos de referencia. Los avances permiten al Dow Jones de Industriales empezar el mes rebasando el soporte de los 12.000 puntos y lleva al S&P 500 a superar los 1.300.

Jornada de recortes en el parqué neoyorquino, los más importantes en dos meses. La crisis en Egipto acrecentó este viernes una corriente bajista que ya venía favorecida por la decepción de las referencias macro domésticas y los resultados empresariales. El Dow Jones cae un 1,39% y queda en 11.823 puntos, aplazando el asalto a los 12.000 enteros. Asimismo, el S&P 500 cede un 1,79% (1.276 puntos) y el tecnológico Nasdaq un 2,48% (2.687 puntos).

El color verde continúa imponiéndose en el parqué neoyorquino aunque el Dow Jones no consigue amarrar los 12.000 puntos, con los que coquetea desde el inicio de la semana. Los resultados empresariales han servido para mantener la cotización en positivo tras unos decepcionantes datos macro.

Idas y venidas en el principal selectivo de la Bolsa de Nueva York que después de tocar en un par de ocasiones durante el miércoles el soporte de los 12.000 puntos vio cómo se le escurrían en el último compás de la sesión, incapaz de amarrarlos. El Dow Jones gana, así, un exiguo 0,07% y queda en los 11.985 enteros.

Tras una sesión en números rojos, con descensos de hasta el 0,75%, el parqué neoyorquino ha encontrado su razón para subir: el discurso de Obama. Los inversores confían en que el presidente congele el gasto general y los valores han rebotado en el último tramo para cerrar esta jornada -plagada de referencias- prácticamente como estaban. El Dow Jones cede un ligero 0,03%.

El parqué neoyorquino encontró en los resultados de General Electric un buen pretexto para volver a las ganancias, después de dos jornadas de pérdidas. Todo lo contrario ocurría con las decepcionantes cuentas de Bank of America, que ejercieron de freno. El viernes se resuelve con disparidad en los principales selectivos y el Nasdaq cierra a la baja el día y la semana.

Los buenos resultados macro han servido para amortiguar las caídas pero no para situar a los valores en terreno positivo. Los inversores recogen beneficios ante la incertidumbre generada por el crecimiento chino, que ha llegado al 10,3% en 2010. El Dow Jones cede un ligero 0,02%, hasta los 11.822 puntos.

El parqué neoyorquino encontró en los resultados de JPMorgan el mejor pretexto para superar un apático arranque de jornada. Con las subidas del viernes, Wall Street afianza las alzas semanales, amenazadas por la preocupación sobre el paro y la crisis de deuda en la eurozona. En los cinco últimos días, el Dow Jones de Industriales gana un 0,96%, hasta los 11.787 puntos.