El automóvil quintuplicó beneficios en España en 2021 pero redujo su empleo un 11%
El sector ganó 1.011 millones frente a los 189,8 millones de 2020, un ejercicio marcado por el inicio de la pandemia Este incremento de las ganancias no fue de la mano de las matriculaciones, que apenas subieron un 1% el año pasado A cierre del ejercicio, el motor daba trabajo a 61.704 personas, según Anfac
La crisis de microchips ha golpeado con fuerza en la actividad de las fábricas de coches en España, pero no en las cuentas de resultados de las automovilísticas. Según la memoria anual de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) publicada este miércoles, los productores de coches más que quintuplicaron sus beneficios en España en 2021, hasta los 1.011 millones de euros, un 432,7% más que los 189,8 millones registrados en 2020. En ese ejercicio, el motor había sufrido un fuerte recorte de ganancias del 78,8% debido a la pandemia.
Este gran aumento de los beneficios no fue de la mano de las matriculaciones de vehículos nuevos, que apenas subieron un 1% el año pasado, con poco más de 859.477 coches. La cifra de negocios, por su parte, subió en idéntico porcentaje, un 1%, hasta los 60.908 millones. El motivo para esta discordancia entre ventas y ganancias es que las automovilísticas, ante la escasez de componentes, priorizaron la venta de sus marcas y modelos prémium que les reportan mayores beneficios que los coches y firmas con precios más asequibles.
Esta situación permitió, por ejemplo, que el grupo Volkswagen ganase un 74,8% más en todo el mundo en 2021, hasta los 15.428 millones, pese a que sus matriculaciones cayeron un 4,5%. Por su parte, Stellantis, el mayor productor en España con tres plantas, triplicó sus beneficios hasta los 13.354 millones en todo el mundo el año pasado.
El empleo cayó un 11,3% en España
Según los datos ofrecidos por Anfac, a cierre de 2021, el sector empleaba a 61.704 personas en nuestro país, un 11,3% menos que los 69.580 puestos de trabajo directos que mantenía a finales de 2020. "La bajada está motivada por la disminución de la producción, con fábricas que han dejado de hacer varios turnos", ha indicado el director general de Anfac, José López-Tafall. Esto, ha explicado, no se produjo en 2020, ya que en ese entonces los ERTE permitieron que no se destruyeran puestos de trabajo y, una vez pasado el confinamiento, la actividad se retomó rápidamente ya que no había escasez de chips, como sí hubo en 2021.
En total, el motor aporta a la economía española el 7,7% del PIB y el 9% del empleo si se tiene en cuenta tanto los puestos de trabajo directos como los indirectos. En cuanto a la recaudación fiscal, subió un 15,9% en 2021, hasta los 34.148 millones.