El éxito del negocio inmobiliario de Amancio Ortega pasa por EE UU
En diez años, el peso de Pontegadea se ha trasladado de España al otro lado del Atlántico. El ‘family office’ facturó 658 millones, un 15% más en 2023, por sus propiedades
La estrategia de Amancio Ortega con su family office Pontegadea Inversiones se muestra clara. Este vehículo inversor del fundador y máximo accionista de Inditex ha dado la vuelta como un calcetín para depender más del mercado norteamericano que del español y europeo. Los números son claros respecto a la apuesta del multimillonario por EE UU. Este holding, que tiene en el sector como principal empresa a Pontegadea Inmobiliaria, facturó el pasado año 658 millones, de los que el 67% proceden del otro lado del Atlántico, según se recoge de las cuentas consolidadas de Pontegadea Inversiones recientemente depositadas en el registro mercantil. El mercado norteamericano (solo invierte en EE UU y Canadá en ese continente) se está mostrando clave del éxito, con un 15% más de negocio en tan solo un año.
Las compras que Ortega ha ido haciendo en EE UU, en mucho menor medida también en Canadá, ha llevado a que ese mercado sea el principal, dejando atrás a España. En 2019, fue la primera vez que las propiedades americanas ofrecieron más facturación que las europeas. Las cuentas de Pontegadea Inversiones agrupa esos ingresos en tres grupos: América (fundamentalmente EE UU), España y resto de Europa (donde Reino Unido es otro de sus grandes mercados) y Asia (dónde únicamente ha invertido en Seúl, Corea del Sur).
A nivel global, las numerosos compras de activos ha permitido que el grupo ingrese un 165% más en una década. Pero es que en Norteamérica el crecimiento ha sido de un 358% en 10 años. Así, el pasado año esa facturación en EE UU y Canadá alcanzó los 440 millones, frente a 206 millones en España y resto de Europa y solo 12 millones de Asia. Además, esas rentas transatlánticas crecen más rápido, a un ritmo del 18,9% en el último ejercicio, que en el Viejo Continente.
El creador de Zara utiliza su family office para invertir la gran cantidad de dividendos que obtiene por el gigante textil, por ejemplo de 2.845 millones este año tras el récord histórico de beneficios de Inditex, del que controla el 59,3% del capital, en 2023. Y especialmente ha apostado por el ladrillo. Aunque inicialmente adquirió activos en España, cada vez ha ido comprando propiedades más grandes en EE UU, el principal mercado inmobiliario mundial, y en general muy estable en activos prime.
Los activos que compra son de máxima calidad, bien ubicados y con buenos inquilinos. Inicialmente su apuesta eran edificios de oficinas, hoteles y locales comerciales, pero ha ido extendiendo sus adquisiciones, también en EE UU, a naves logísticas para grandes operadores y complejos de vivienda para alquiler.
Elección de activos
Precisamente la principal transacción de la historia de Pontegadea se produjo en EE UU. En septiembre de 2022 desembolsó 905 millones por nueve naves logísticas, adquiridas a la inmobiliaria Realty Income y operadas por empresas de primera fila como Amazon, Fedex TJX, Home Depot y Nestlé. Daba así el primer gran paso para entrar en la logística, en unas operaciones que desde entonces ha ido repitiendo en América y Europa.
Antes de ese movimiento, su principal transacción había sido, por un solo activo, la compra de Royal Bank Plaza en Toronto en 2022, por el que desembolsó 800 millones de euros al cambio de entonces. Allí tiene su sede Royal Bank of Canadá, el principal banco del país. No era la primera operación que Pontegadea realizaba en ese país. En 2016 adquirió un edificio comercial en Montreal y antes ya contaba con otro activo en la propia Toronto. En enero de 2024 se hacía igualmente por 250 millones con un almacén al sureste de Vancouver operado por Amazon.
Sus últimas compras en el mercado estadounidense han consistido en naves logísticas en Miami y en California (en este caso para Walmart), además de grandes edificios de viviendas de lujo destinadas para el alquiler. El primero de ellos fue hace dos años en Nueva York, cuando pagó casi 500 millones por un rascacielos cerca del World Trade Center. Meses más tarde se hizo con otro residencial en Seattle por 300 millones y, finalmente, uno adicional en Chicago por 210 millones. Todas esta compras han permitido que las rentas recibidas por alquileres desde Norteamérica se disparen.
Anteriormente, entre sus grandes operaciones destacan un hotel operado por Iberostar en Park Avenue de Nueva York, una de las sedes de Amazon en Seattle, en una megaoperación de casi 660 millones, o la sede de JP Morgan en Miami por 470 millones.
Ortega invierte en ladrillo parte de su fortuna, calculada por Forbes en 122.700 millones de dólares (110.250 millones de euros, a cambio actual), lo que le ha convertido en una de las 10 personas más ricas del mundo. La última vez que actualizó públicamente el valor de su cartera de inmuebles (ubicados fundamentalmente en EE UU, Reino Unido y España), en el ejercicio 2022, ese portfolio estaba tasado en casi 18.000 millones. 12 meses después había sumado compras por alrededor de 970 millones adicionales, según los cálculos de este diario.
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