Torres ante el juez: las claves de la declaración que llega tras cinco años de investigación por Villarejo
La comparecencia como testigo del presidente de BBVA servirá para aclarar cuánto sabía de la contratación del comisario jubilado José Manuel Villarejo
El sector financiero tendrá el próximo lunes las miradas puestas en la Audiencia Nacional. El juez que investiga el caso Villarejo tomará declaración como testigo al presidente de BBVA, Carlos Torres. El interrogatorio será clave para el futuro procesal del banco, la primera empresa del Ibex en ser imputada en la causa judicial y la única que aún sigue con este estatus, después de que Repsol, CaixaBank e Iberdrola, lograran salir. Pero la comparecencia resulta también una gran oportunidad para el primer espada de la entidad, que podrá aclarar cuándo conoció y cuánto sabía de la contratación de Cenyt, la empresa del comisario jubilado José Manuel Villarejo, que desarrolló sus trabajos privados para el banco entre 2004 y 2017, y por los que cobró 10,3 millones de euros.
“Dado que el juez ha considerado pertinente mi citación como testigo, por supuesto que acudiré con total normalidad”, afirmó Torres tras tener noticia de su declaración, que ya se había planteado en alguna que otra ocasión.
Sin abogado y frente a las acusaciones: Al ir como testigo, Torres no podrá contar con la asistencia de sus abogados y estará obligado a contestar todas las preguntas que le formulen las acusaciones y defensas personadas en el caso.
Entre ellos se encuentran exdirectivos de BBVA investigados, como su antecesor en el máximo cargo de responsabilidad, Francisco González; o el exjefe del área de riesgos y recuperaciones inmobiliarias y expresidente de la filial Distrito Castellana Norte (DCN), Antonio Béjar, con quien BBVA mantiene una intensa batalla legal por esta causa.
Y entre las acusaciones no solo figura la Fiscalía Anticorrupción, que ha acusado al banco en varias ocasiones de ocultar información y de no llevar a cabo su intención manifiesta de colaborar con la investigación; sino que también están presentes algunas de las víctimas de los trabajos de Villarejo, como el líder de Ausbanc, Luis Pineda, o el expresidente de Sacyr Luis del Rivero, con cuyo espionaje comenzó la relación entre BBVA y el polémico policía.
Imputación del banco en 2019: Torres inició su mandato como presidente en enero de 2019 con el caso Villarejo al rojo vivo. Poco antes, el 4 de diciembre de 2018, el Juzgado de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional acordaba la apertura de una causa para investigar los presuntos encargos para espiar a empresarios, políticos y periodistas. Desde entonces, altos ejecutivos y exdirectivos han sido imputados. El banco pasó a estar investigado oficialmente, como persona jurídica, en julio de 2019.
Expectación sobre su testimonio: Fuentes jurídicas conocedoras de la causa consideran que es llamativo que en los casi cinco años de investigación nunca haya testificado Torres, cuando además fue consejero delegado del banco (2015 - 2019) en la última época de los trabajos del comisario jubilado. Sus antecesores en este cargo o bien han testificado, como fue el caso de José Ignacio Goirigolzarri, actual presidente de CaixaBank, o bien están imputados, como Ángel Cano.
Hasta el momento, el magistrado instructor había alegado que no existían elementos en el sumario de la causa que justificaran la citación de Torres. Pero esto ha cambiado. Según explicó el juez Manuel García Castellón en el auto de citación, ahora existe la necesidad de saber lo que sucedió “internamente” en BBVA a partir de junio de 2018, poco después de que aparecieran las primeras noticias sobre los trabajos de Cenyt para el banco. “En relación a la persona jurídica BBVA, resulta especialmente relevante conocer si funcionaron los mecanismos de control corporativo, a efectos de determinar la existencia de una efectiva cultura de cumplimiento normativo, en aras a esclarecer su responsabilidad penal”, detalló.
Palabras clave polémicas: El segundo grupo bancario español empezó a analizar estos hechos a través del comité global de corporate assurance (órgano de prevención de delito), que informó a un grupo selecto de directivos sobre el avance de la investigación interna que se inició para depurar responsabilidades. Este proceso terminó externalizándose en 2019, tras dejar fuera al departamento de auditoría interna, tal y como informó CincoDías, y acabó con la elaboración de un forensic, que también ha suscitado polémica en la causa por las palabras clave utilizadas para indagar en los dispositivos electrónicos de los ejecutivos investigados y hallar las evidencias (hits) a analizar.
Algunos de los encausados denunciaron que estas palabras claves se utilizaron con criterios de trazado grueso para poner el foco en determinados ejecutivos como responsables de los trabajos de Villarejo.
Así, Torres se enfrentará a las preguntas sobre cómo se elaboró dicho forensic, en el que, precisamente, sus correos, archivos y datos no fueron cruzados con los de otros directivos. Tampoco se examinaron los de Ricardo Forcano, hombre de confianza del presidente, y encargado del área de talento y cultura entre 2016 y 2018, una especie de recursos humanos, del que dependía el departamento de seguridad corporativa, dirigida entonces por Julio Corrochano, uno de los principales investigados por su relación directa con Villarejo.
Reacción interna: Anticorrupción apuntó a la citación del presidente de BBVA el pasado julio, debido al conocimiento que tiene del comité de corporate assurance. Torres presidió este cónclave, en su función como consejero delegado del banco, un control que mantuvo durante los primeros meses de mandato en 2019.
En un principio, para conocer cuál fue la reacción del banco tras desvelarse que confió en los servicios de Villarejo, el juez, a petición de los fiscales, llamó a declarar a la jefa de los servicios jurídicos del banco, María Jesús Arribas. Esta directiva conoce al detalle la investigación interna y reporta directamente a Torres. Sin embargo, la responsable legal de BBVA se acogió a su derecho a no declarar por su obligación de guardar secreto profesional como abogada de la entidad. Ello ha provocado la citación de Torres.
El BCE, atento a su examen de idoneidad
El Banco Central Europeo (BCE) vigilará la declaración de Torres y la información nueva que pueda desprenderse del caso en relación a la actuación del presidente de BBVA en el ‘caso Villarejo’. Cuando un banco nombra a un consejero, éste debe pasar un examen de idoneidad, conocido como ‘fit & proper’, en el que el máximo supervisor bancario constata que cumple con los requisitos para desempeñar el cargo.
Las fuentes del supervisor contactadas rechazan hacer comentarios sobre este caso en particular, pero recuerdan que, de forma general, el BCE puede reevaluar esa idoneidad cuando se producen “hechos nuevos” que puedan cuestionarla. En 2021, último año del que proporciona datos, BCE llevó a cabo 17 reevaluaciones de varios miembros del consejo de administración de entidades europeas por cuestiones relacionadas con el blanqueo de capitales, con procedimientos penales, con procedimientos civiles y seis con otros asuntos como quiebras y fraudes. Todos los procesos finalizaron con una evaluación positiva, por lo que el BCE no ordenó la destitución de ninguno de los miembros, auqnue hubo ocho que decidieron dimitr antes de que el regulador presentara los resultados.
El BCE detalla que, en realidad, los propios bancos están obligados por ley a notificar cualquier hecho que pueda tener un impacto en la idoneidad de los miembros de su consejo. En caso de no hacerlo puede dar lugar a sanciones. Y en todo caso, el BCE puede reevaluar por su cuenta. En ese sentido, el supervisor estará muy atento a los hechos nuevos que puedan conocerse durante la declaración de Torres como testigo.
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