El ‘flex living’: así es una vivienda flexible para cada momento de la vida
Aumentan las soluciones habitacionales para estudiantes, nómadas digitales o séniors
La casa comprada en propiedad y para toda la vida está dando paso a nuevos formatos para cubrir necesidades temporales de distintos segmentos de la población en momentos vitales diversos. Desde el universitario lejos del hogar de sus padres que busca una residencia, a un mayor de 65 años activo e independiente que demanda una vivienda con alguna atención complementaria, pasando por un nómada digital que reclama flexibilidad.
“Los nuevos modelos de vivir, trabajar y consumir están transformando el mercado residencial”, expresa Enrique Sánchez-Rey, director de fondos inmobiliarios de Bestinver, impulsando soluciones smart living, que presentan tres características: la flexibilidad, con barreras de entrada más suaves; la segmentación, y la hotelización de la oferta, con servicios incluidos (lavandería, limpieza) para ofrecer “una experiencia en torno al alojamiento”, acota Sánchez-Rey. Bestinver ha creado la socimi Smart Living Properties, con 150 millones de euros, para invertir en estos nuevos formatos.
Flexibilidad, segmentación y ‘hotelización’ de la oferta, las nuevas soluciones
El living agrupa todas las áreas del inmobiliario que forman parte del ciclo de vida de las personas: residencias de estudiantes, flex living o vivienda pensada para alquileres flexibles, suelo, residencial en alquiler, residencial en compraventa y senior living, siendo esta última “una opción prometedora, pero que aún está en vías de profesionalización y presenta grandes desafíos, como la falta de operadores”, detallan los analistas de CBRE. Mientras, el volumen de inversión en residencias de estudiantes “es muy limitado” (416 millones en 2023), “por el desajuste entre oferta y demanda”. Sin embargo, “a medida que los inversores asumían la subida de tipos, ha surgido un interés en adquisiciones de suelo y llaves en mano”, detecta la consultora.
“España tendrá unas 13.000 nuevas camas en flex living el próximo año y medio”, anuncia Javier Kindelan, director de living en España de CBRE, gracias a una demanda creciente. El flex living se consolida como segundo por volumen de inversión dentro del living, con 535 millones (un 17% del total). En paralelo, crece la opción de los alquileres –el porcentaje de hogares en este régimen pasará del 24,1% al 25,9% para 2027, según la consultora–, y no solo por factores socioculturales y demográficos, sino porque la subida de tipos ha agravado la incapacidad financiera para la compra de una vivienda en 2023, provocando que se pase de la venta al alquiler.
La pujanza del sector
Entre 2019 y 2023, el living alcanzó el mayor volumen de inversión de todas las tipologías de activos, con más de 19.000 millones de euros. Despunta como uno de los segmentos con mayor potencial de crecimiento. A partir de 2020 comenzó a despegar ante un escenario de falta de oferta frente a una elevada demanda en todos los tipos de productos. En 2023 alcanzó un volumen de inversión de 3.000 millones, concentrando el 27% del total transaccionado.