_
_
_
_

Meliá negocia con la banca refinanciar más de 1.100 millones de deuda

La intención de la hotelera es cerrar un acuerdo entre el primer y segundo trimestre del año que viene. La fórmula podría incluir una inyección de capital propia o de algún socio.

Radiografía de la deuda de Meliá Hotels International
Carlos Cortinas Cano

Meliá está abordando el proceso de refinanciación de más de 1.100 millones de euros de financiación bancaria. La hotelera cotizada en el Ibex 35 ha iniciado un proceso de negociación con la banca acreedora que podría estar concluido en el primer o segundo trimestre de 2024 y en el que pueden entrar fórmulas como la aportación de capital por parte de la empresa mallorquina o, incluso, de algún socio externo a través de una joint venture, explican fuentes conocedoras de las conversaciones.

A finales del tercer trimestre, la hotelera tenía una deuda financiera neta de 1.230 millones, con un coste medio el pasado año del 3,13%. Algo más de 1.100 millones corresponde a los préstamos con entidades de crédito y, con menor relevancia, el resto son bonos y emisiones ECP (Euro Commercial Paper Program). Si se tiene en cuenta el valor de los alquileres que paga en sus hoteles (como exige la norma contable NIIF-16), la deuda se eleva a 2.706 millones. Hasta ahora, la estrategia de desapalancamiento de la compañía se había centrado en la venta de activos y no había acelerado las negociaciones con la banca para refinanciar el pasivo, que aumentó en 638 millones tras la pandemia de Covid-19.

El calendario de vencimientos de deuda (ver gráfico) puede ser una buena explicación para entender ese cambio de postura: el mayor desembolso corresponde a 2024, en el que la hotelera tendrá que pagar 338 millones, mientras que en 2025 y 2026 el importe de pagos asciende a 211,4 y 256 millones, respectivamente. Solo en los tres próximos ejercicios, el importe a devolver asciende a 805,4 millones.

“Estamos en contacto con todos los bancos financiadores, pues un objetivo clave para nosotros es reducir y refinanciar la deuda, algo para lo que estamos analizando diversas opciones”, confirma un portavoz de Meliá, quien indica que en la actualidad no pueden comentar más detalles. La hotelera, de la que la familia Escarrer controla un 54,8% del accionariado, tiene, de hecho, como primera prioridad la reducción del endeudamiento.

La negociación se está llevando a cabo fundamentalmente con la gran banca española, que se muestra dispuesta a prestar a la firma mallorquina. El proceso de refinanciación lo está liderando el equipo financiero interno de la cadena hotelera, sin asesores externos, y con Ángel Luis Rodríguez, director financiero desde septiembre, a la cabeza.

En los próximos meses, las partes deben llegar a un acuerdo que, posiblemente, va a introducir algunas fórmulas exigidas por los acreedores. Como en otras grandes refinanciaciones en la actualidad, la banca va a exigir la aportación de capital a la propia hotelera, según las fuentes financieras consultadas. Así ha ocurrido, por ejemplo, con la reciente refinanciación de 1.500 millones de la socimi residencial Testa, propiedad de Blackstone, tal como adelantó este diario.

Para inyectar capital, Meliá podría abordar la venta de algún hotel, tal como ha realizado ya anteriormente para garantizar la liquidez de la compañía. Pero también ese equity puede llegar por la vía de alguna alianza, por ejemplo en una joint venture con algún socio. La compañía tiene experiencia en este tipo de asociaciones, como ha hecho con el tenista Rafa Nadal en la marca hotelera Zel o con Banca March, que controla el 80% de tres establecimientos de la cadena mallorquina.

37 hoteles en propiedad

Actualmente, los activos inmobiliarios en propiedad de Meliá tienen un valor de 4.041 millones, según la última tasación realizada por CBRE, además de otros 600 millones por inmuebles en los que participa a través de joint ventures. La cadena opera 350 hoteles en el mundo, de los que tan solo 37 son propios. De esos activos, 16 están en América, 14 en España y otros 7 en el área de Europa, Oriente Medio y África.

Así que es posible que la solución pactada con la banca sea mixta, según pronostican las fuentes conocedoras del proceso, que incluya tanto una refinanciación bancaria tradicional (y sin presión para la hotelera) como una aportación de capital vía venta de activos o con un socio externo.

La desinversión en el Caribe que se resiste


Bankinter.  La primera gran desinversión de Meliá tras la irrupción de la pandemia se cerró en junio de 2021, con la venta por 204 millones de euros de ocho hoteles (seis de su propiedad y dos participados) a una sociedad en la que mantendría un 7,5% del capital. Bankinter, la entidad encargada de crear el vehículo de inversión, también se quedó con otro 7,5%, mientras que el restante 85% se quedó en manos de clientes de altos patrimonios e institucionales de la entidad. Tres de los hoteles estaban en Baleares, dos en Canarias y los otros tres restantes entre Granada, Cádiz y Zaragoza

Propiedad.  Cerrada esa operación, la hotelera anunció su intención de culminar otra operación por un importe similar en 2022 y puso en el punto de mira a algunos de los 16 hoteles que tiene en América, fundamentalmente en el Caribe.

Retraso. La venta ha sufrido numerosos retrasos y todavía no se ha cerrado. En el último informe de resultados, correspondientes al tercer trimestre de 2023, confirmó que había cobrado un adelanto de 14 millones de euros por uno de los activos vendidos y que “esperaba avanzar en la materialización de las operaciones, por un importe total de 120 millones de euros”.
 

Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Regístrate gratis para seguir leyendo en Cinco Días

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Gracias por leer Cinco Días

_

Más información

Archivado En

_
_