Trabajo deberá garantizar que los becarios no tienen relación laboral para sumar a CEOE al pacto
El Gobierno se compromete a presentar un nuevo texto del Estatuto del Becario y CC OO advierte de que no aceptará cambios sustanciales de la redacción actual
El Ministerio de Trabajo reanudó este lunes las negociaciones con patronal y sindicatos para el diseño del Estatuto del Becario, la norma que recogerá los derechos y deberes de este colectivo y de las empresas o entidades asimiladas que los acojan. La última reunión había sido el pasado 18 de octubre y a su término los sindicatos CC OO y UGT anunciaron un preacuerdo alrededor del texto que les había proporcionado Trabajo. Sin embargo, CEOE rechazó la existencia de dicho preacuerdo y no fue hasta este lunes cuando las partes retomaron las negociaciones, una vez que la patronal ha celebrado sus elecciones y tiene las manos más libres para negociar.
Precisamente, fueron las quejas patronales, en la reunión del lunes, las que hicieron que Trabajo se comprometiera a presentar en próximos días un nuevo texto. La principal exigencia patronal para sumarse a este acuerdo es que la redacción de la nueva norma “introduzca mayor seguridad jurídica en lo relativo a la presunción de laboralidad o en la regulación de las prácticas habilitantes para el ejercicio de una profesión”, entre otras cuestiones, según informaron fuentes empresariales.
El texto ya aceptado por los sindicatos y rechazado por las patronales dejaba claro que la formación en la empresa “no supondrá la existencia de relación laboral entre la empresa o entidad equiparada y la persona en formación”. Si bien, dicho esto, la norma sí recogía excepciones en las que dicha relación sí se presumiría como laboral. Era el caso de “cuando la actividad desarrollada sustituya las funciones de una persona asalariada de la empresa; cuando la formación no se corresponda con las prácticas exigidas para lograr un título reglado; o cuando el becario esté en un puesto que no requiera una especial cualificación o no cuente con un plan de formación y tutorización. Estas excepciones son las que quieren eliminar o mitigar los empresarios.
No obstante, en CC OO advirtieron ayer a Trabajo y a los empresarios de que, “sobre todo en cuestión de las prácticas extracurriculares, que es en el fondo donde está el problema”, según el sindicato, “en la medida que tenemos aceptado el texto actual, si se va a producir algún cambio este no puede ser importante”.
Junto a estas cuestiones, el texto de esta norma recoge también que las relaciones entre los becarios y sus empresas deberán regularse en un convenio o acuerdo de cooperación con un centro formativo autorizado para impartir las ofertas de formación de las que las prácticas en la empresa formen parte. Dicho convenio deberá estipular cómo deberá la empresa "compensar los gastos" en los que el becario incurra para la realización de las prácticas como el desplazamiento, alojamiento o manutención. Aunque si existe una beca que ya financie estas cuestiones, la empresa no estará obligada a costearlas.
Otra de las cuestiones que sí reunió el consenso sindical fue que la ley fije que en ningún caso el número de personas en formación práctica que tenga una empresa podrá superar el 20% del total de la plantilla de la compañía. Aunque, el texto recogía hasta ahora la excepción de poder contratar dos becarios al menos, con independencia del número de personas de la plantilla.