Rescatar bancos estadounidenses puede ser, a fin de cuentas, lucrativo
La reciente fusión de PacWest ha dado frutos, pero es poco probable que la operación sirva de modelo para otros
Lo importante para los banqueros no es cuánto dinero ponen, sino cuánto recuperan. Si nos basamos en ese principio, la unión de dos entidades crediticias estadounidenses de tamaño medio que tuvo lugar el pasado martes, con la ayuda de amigos del capital riesgo, suma. Salvar instituciones financieras en dificultades puede ser más lucrativo para unos que para otros.
PacWest Bancorp ha sido castigado por los inversores espantados por los bancos regionales. Y es que este banco estadounidense fue una de las víctimas del temor al colapso de las entidades crediticias del pasado mes de marzo. Sus acciones, como las de tantos otros se desplomaron. Para compensarlo, acordaron una fusión con su rival más pequeño, Banc of California, creando una institución con 36.000 millones de dólares de activos combinados. Como parte del acuerdo, los bancos fusionados reembolsarán unos 13.000 millones de dólares de empréstitos con un tipo de interés medio del 5%, mediante la venta de inversiones en valores y la liquidación de algunas tenencias de efectivo que tienen un rendimiento de intereses combinado de poco más del 4%.
El día antes de que anunciara que se uniría a uno de sus competidores, su capitalización bursátil era de solo un tercio de sus activos netos, un signo de ansiedad elevada. Como han comprobado otras instituciones de crédito como Citigroup y Deutsche Bank, la mancha de una valoración por los suelos es difícil de quitar.
La unión debería poder hacerlo, pero no sin producir distorsiones. Visto desde fuera, Banc of California sale ganando con esta operación de 2.000 millones de dólares, aunque sus activos equivalgan a solo una cuarta parte de los de su socio.
Su consejero delegado, Jared Wolff, ocupará el puesto más alto en el banco fusionado y elegirá a gran parte de los miembros de la cúpula directiva y del consejo de administración. Sin embargo, en lo que a contabilidad se refiere, PacWest es el comprador. Esto es importante, porque en una adquisición bancaria, el objetivo recalcula sus activos a un valor razonable. Dado que el balance de Banc of California es mucho más pequeño, es de suponer que también lo sea la amortización resultante.
Si el banco fusionado cotiza a su valor contable, como deberían hacer los bancos sin problemas, su valor rondaría los 3.100 millones de dólares. Con su participación del 34%, los accionistas de Banc of California habrán convertido los 760 millones de dólares de capital que tenían el lunes en una participación valorada en 1.100 millones de dólares, aproximadamente un 40% más. Los accionistas de PacWest, que obtienen el 47% del nuevo banco, estarán convirtiendo una empresa de 1.100 millones de dólares en una participación de 1.500 millones.
Warburg Pincus y Centerbridge, las empresas compradoras que inyectaron 400 millones de dólares para engrasar la operación, se llevan un botín mayor. A cambio de su dinero, obtienen el 20% del banco ampliado, que valdría más de 600 millones de dólares si cotiza a su valor contable, lo que supone un beneficio contable de más del 50%. Las opciones negociables (warrants) que pueden convertir en acciones a un precio más alto engordarían aún más la cifra.
Sin embargo, es poco probable que la operación sirva de modelo para otros bancos faltos de confianza. Lo difícil de reproducir no es el dinero, sino que los ejecutivos estén dispuestos a ceder las riendas mientras puedan elegir. PacWest ha proporcionado a sus promotores un buen negocio, pero a diferencia de lo sucedido con las quiebras de SVB Financial, First Republic y Signature Bank, sus accionistas podrán compartir los frutos.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de News Clip, es responsabilidad de CincoDías
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