Euskadi abre las ayudas a la compra de coches nuevos con hasta 3.500 euros por matriculación
El Ejecutivo de Vitoria impone la condición de achatarrar vehículos de más de 20 años o con altos niveles de emisión

Euskadi se convierte en la primera administración de España en impulsar la compra de coches nuevos tras el shock de esta industria por los nuevos aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a las importaciones de vehículos y componentes no fabricados en ese país. Las subvenciones del Ejecutivo de Vitoria tendrán una cuantía máxima de 3.500 euros en cada caso, o el límite del 20% del coste del vehículo. No valdrá para automóviles con un precio superior a los 40.000 euros.
El consejero de Industria del gabinete del lehendakari Imanol Pradales, Mikel Jauregi, ha detallado en la tarde de este jueves las condiciones de un nuevo programa dotado con un presupuesto de hasta cinco millones, con opciones a su ampliación, para renovar la flota de vehículos de la comunidad autónoma y sin discriminaciones, en el sentido de que las matriculaciones pueden corresponder tanto a vehículos con motores de combustión, híbridos o impulsados por baterías eléctricas.
Pero hay condiciones. La principal, que para el acceso a esas ayudas hay que achatarrar primero un coche de veinte años de antigüedad, o que emita más de 175 gramos de CO2 por kilómetro. La segunda, que los vertidos de la unidad matriculada estén por debajo de los 125 gramos de CO2 por kilómetro (150 en el caso de las furgonetas).
La iniciativa del Gobierno vasco entrará en vigor a partir del próximo 1 de abril con la intención de quitar de la circulación a 2.000 unidades, entre turismos y furgonetas. Todos de mayor eficiencia, para lograr una reducción global de las emisiones que supere las 24.000 toneladas de CO2. Hay una lista de unidades aptas para el relevo. Como algunas versiones del modelo Golf de Volkswagen, el Seat León, el Audi A3 o el Peugeot 508.
Jauregi había advertido en la mañana de este jueves que la apuesta de Europa por el coche eléctrico “no estaba funcionando”, por lo que era necesario ayudar a los ciudadanos a la hora de comprar un vehículo. Las dudas ante las políticas de la UE en este ámbito estaban dilatando esos procesos de adquisición y alargando la circulación de una flota obsoleta y, por tanto, más contaminante, según Jauregi. Porque expresó que los consumidores optan, con este escenario, por la adquisición de vehículos de segunda mano, más contaminantes que los de nueva generación.
El Ejecutivo de Vitoria quiere defender una industria de automoción que es fundamental para el PIB vasco. Este sector está integrado en Euskadi por unas 300 empresas que facturan más de 25.300 millones con 140.000 empleados, 38.000 de los cuales trabajan en la comunidad autónoma. Estas cifras no incluyen la actividad de Mercedes-Benz en Vitoria. La marca de la estrella ha anunciado que por el frenazo de la demanda de vehículos ha decidido reducir en 2.000 furgonetas la producción prevista en inicio para este año en su planta alavesa. Ahora se plantea ensamblar 122.634 unidades.