El supervisor europeo de los mercados exige máxima transparencia ante el virus
Esma desaconseja a las empresas emplear indicadores nuevos que pueden confundir a los inversores
El impacto en los resultados de las empresas cotizadas del Covid-19 será, por regla general, espectacular. Las cuentas del primer trimestre así lo revelarán, pese a que el Gran Confinamiento comenzó a mediados de marzo. Y Esma, el coordinador de las comisiones de valores europeas, ha lanzado un aviso a navegantes: ojo con inventarse nuevas medidas para detallar la evolución de los negocios. En última instancia, puede ser información engañosa para el inversor.
En una actualización de su guía de preguntas y respuestas sobre las medidas alternativas de rendimiento, el supervisor explica que tal vez no sea apropiado incluir nuevas medidas alternativas de rendimiento o ajustar estas cuando los efectos del Covid-19 son generalizados en el rendimiento financiero general, la posición y los flujos de efectivo”.
El problema que detecta Esma es que estos indicadores “pueden no proporcionar información fiable y más útil al mercado y pueden inducir a error a los inversores en cuanto a la imagen fiel de los activos, pasivos, posición financiera y ganancias o pérdidas del emisor”. Dentro del cajón de sastre de estos indicadores están, entre muchos otros, los ingresos de explotación, los resultados antes de cargos no recurrentes, el ebitda o la deuda neta.
Esma, al que debe obediencia la CNMV, considera que lo mejor es que los emisores se abstenga de dar números cocinados y que opten por incluir los posibles efectos sin cifras. Insta, por lo tanto, a los emisores a que incluyan “información descriptiva en sus comunicaciones para explicar cuál ha sido el efecto, o se espera que sea, del virus”.
El organismo sigue así la línea de sus recomendaciones iniciales, del pasado 11 de marzo, cuando solicitó a las compañías que informaran sin ninguna demora de cualquier cuestión significativa sobre el impacto del Covid-19 en su negocio. Tanto Esma como la CNMV piden además que todos los emisores incluyan en sus informes periódicos un apartado específico con el impacto del Covid-19 en sus resultados.