Navantia avanza en el gran contrato de Defensa en Australia
La empresa pública Navantia avanza en el proceso para entrar en un gran contrato del Ministerio de Defensa australiano. La compañía española firmó este lunes con la Commonwealth para que esta comience el estudio de viabilidad de la empresa de cara a su participación en este programa.
Tras este acuerdo, y por un periodo de un año, la Commonwealth y Navantia trabajarán de forma conjunta, permitiendo al departamento de Defensa del país de las antípodas la evaluación de las capacidades, riesgo y otras materias asociadas a la propuesta de Navantia.
La compañía española no es la única que ha entrado en este proceso. El Gobierno austral ya avanzó en primavera que eran tres empresas las que llegaban a este punto. A Navantia se unen la italiana Fincatieri y la británica Bae Systems. El primer ministro Australiano, Malcolm Turnbull, fue el responsable en abril de hacer este anuncio.
Si finalmente se confirma la entrada de Navantia en este programa, la española podría participar en un gran contrato de Defensa. El proyecto se encuadra dentro de un plan del Gobierno para ampliar y mejorar la flota de barcos y submarinos del ejército con una inversión a 20 años de 89.000 millones de dólares australianos (60.000 millones de euros). No se ha concretado a cuánto ascendería la participación de la empresa pública.
El Gobierno australiano busca con este plan, en el que se encuadra el contrato al que opta Navantia, como un intento para reflotar y fortalecer la industria naval en el país, tras unos años en caída. Por ello, la empresa que resulte ganadora en el concurso deberá realizar sus trabajos en Adelaida, al sur del país. Navantia ya está presente en dicho astillero, donde construye tres destructores AWD. El Ejecutivo quiere garantizar “durante décadas” el trabajo para 2.500 australianos en esta industria.
En concreto, el Gobierno australiano busca comenzar la producción de la nueva fragata SEA 5000, que sustituya a la clase Anzac, utilizada hasta la fecha. Según explicó Navantia en primavera, el Gobierno quiere nueve fragatas de este tipo, cuyo contrato no se firmaría hasta 2018 y su construcción se iniciaría en 2020. Este programa sustituye al que tenía en vigor el Gobierno y que preveía el inicio de la construcción para 2023.
- Refuerza su peso en Australia
La compañía pública señaló ayer en un comunicado que participar en este programa sería “un hito relevante para su futuro en Australia puesto que da la oportunidad de entrar en el programa de buques se superficie más relevante de la actualidad”.
La firma naval ya cuenta con una participación relevante en el país oceánico, donde ha entrado en distintos programas de diseño y construcción de barcos para la armada australiana. En primavera, cuando se conoció su inclusión en la fase que ahora empieza, Navantia aseguró que, en caso de ser ganador, tendría asegurada su presencia y consolidación en este país para los próximos 25 años, y con “gran potencial” para futuras oportunidades.
Hace apenas un mes, Navantia llegó a un acuerdo con el departamento de Defensa del país oceánico para prestar servicios de ingeniería, asistencia técnica, suministros de repuestos, etc. en el entorno de los buques LHDS y lanchas de desembarco LCMS, que Navantia ha diseñado y construido en su mayor parte para Australia. La empresa celebró este acuerdo como una manera de fortalecer su presencia en dicho mercado y convertirse en “suministrador fiable” en Australia.