El coche eléctrico, cuesta abajo y sin frenos en Europa: sus ventas cayeron un 44% en agosto
La patronal europea de automovilísticas, ACEA, señala que en los ocho primeros meses del año las matriculaciones de este tipo de vehículos cayeron un 8,3% en un mercado que avanzó un 1,4%
La situación del vehículo eléctrico en Europa es alarmante. Según los datos ofrecidos este jueves por la patronal europea de fabricantes de coches, ACEA, las entregas de este tipo de coches cayeron un 43,9% en agosto en la Unión Europea, con 92.627 matriculaciones. La caída se sustentó en el desplome del 68,8% en Alemania, con apenas 27.024 entregas, y la caída del 33,1% en Francia, con 13.143 unidades vendidas. Otros grandes mercados, aunque muy atrasados en materia del vehículo eléctrico como España e Italia, también bajaron sus ventas de eléctricos un 24,8% y un 40,9%, respectivamente.
El principal ganador de este retroceso del coche eléctrico en el Viejo Continente es el vehículo híbrido, que aumentó sus ventas en agosto un 6,6%, hasta las 201.552 unidades, en un contexto de caída generalizada de las matriculaciones del 18,3%. Los híbridos supusieron casi una tercera parte del mercado total de Europa en agosto. En lo que va de año, esta tecnología creció un 21,1%, con casi 2,14 millones de comercializaciones, cuando en el total de la UE se entregaron 7,18 millones de vehículos de todo tipo de motorizaciones.
El principal vendedor de coches de la Unión Europea hasta agosto, como es costumbre, fue el grupo Volkswagen, con 1,89 millones de matriculaciones, un 1,6% más que en el mismo periodo de 2023. A pesar de esos buenos números, con una cuota de ventas del 26,4%, la compañía atraviesa un momento delicado por la caída del mercado respecto a la etapa prepandemia y la fuerte competencia en el vehículo eléctrico, con Tesla y los fabricantes chinos en ventaja respecto al consorcio alemán. La compañía dirigida por Oliver Blume busca reducir costes y aumentar sus márgenes a toda costa, sobre todo en la marca que da nombre al grupo, la cual aglutina casi la mitad de las entregas del consorcio, con más de 777.000 entregas en los primeros ocho meses (un 0,8% menos).
En la diana está la producción de Volkswagen en Alemania, donde el grupo se plantea el cierre de hasta dos plantas, algo inédito en la historia de la compañía. Habrá que ver si finalmente sucede debido al peso de los sindicatos en la empresa (forman parte del consejo de supervisión) y la presión del Gobierno alemán, que ha lanzado un agresivo paquete de ayudas para incentivar la venta de coches eléctricos, sobre todo entre las empresas con fuertes de deducciones que pueden llegar al 40% del precio del coche.
El segundo gigante europeo, Stellantis, que tampoco atraviesa un momento sencillo (sus beneficios en la primera mitad de 2024 se derrumbaron un 48%), redujo sus ventas un 3,2% con 1,25 millones de unidades entre enero y agosto. El grupo Renault se mantuvo prácticamente igual, apenas por encima de las 770.000 matriculaciones. El grupo Hyundai (incluye a Kia) fue el cuarto máximo vendedor de coches en Europa, con más de 575.000 entregas, y justo por detrás se situó Toyota (incluye a la firma Lexus). La nipona, sin embargo, dejando de lado la batalla entre grupos y centrándose solo en las marcas, tiene a Toyota como la segunda marca con más matriculaciones en la Unión Europea, con 535.214 unidades (subió un 16,9% gracias a su oferta híbrida), solo por detrás de la alemana Volkswagen.