Xpeng, la nueva marca china de coches que llegará a España en 2024
La compañía ha firmado un acuerdo para comercializar sus vehículos en la red de concesionarios del grupo Salvador Caetano Auto en España y Portugal
Siguen llegando marcas de coches chinas al mercado español. La nueva en sumarse a la ola de firmas provenientes del gigante asiático es Xpeng, marca que comercializará sus vehículos en España y Portugal en la red de concesionarios del grupo Salvador Caetano Auto, que cuenta con una importante presencia en el país y que ya ha firmado otros acuerdos de comercialización con otras marcas de ese país como BYD o Dongfeng. Los primeros vehículos de Xpeng comenzarán a venderse este año, según han informado ambas empresas este lunes en un comunicado conjunto.
Xpeng es una marca joven, de apenas diez años (fundada en 2014), centrada en la producción y venta de “vehículos eléctricos inteligentes”, que el año pasado anunció su intención de extenderse a Europa, Oriente Medio y África. A día de hoy, la compañía cuenta con una gama formada por las berlinas P7 y P5, y los SUV G3i y G9, según la web del fabricante. “Estamos muy orgullosos de contar con Salvador Caetano como socio estratégico en España y Portugal, mercados muy importantes para Xpeng”, ha indicado Brian Hongdi Gu, vicepresidente honorario del consejo de administración y copresidente de Xpeng. “La experiencia internacional de Salvador Caetano Auto y su larga trayectoria en la distribución de marcas en Europa, Sudamérica y África, lo posicionan como la mejor opción para asegurar la representación de Xpeng en la Península Ibérica y explorar futuras colaboraciones”, ha añadido el directivo.
De esta forma, Xpeng se suma al ya muy nutrido abanico de marcas de coches chinas que han llegado en los últimos años. Quizá la que ha conseguido pisar con más fuerza hasta ahora ha sido MG, del grupo SAIC Motor, que logró colocar a su MG ZS de gasolina como el sexto vehículo más vendido en España en el primer trimestre y que acabó 2023 como el cuarto modelo más matriculado en el país. Además, cuenta con el MG4 como uno de los coches más vendidos en el mercado eléctrico, solo por detrás de la todopoderosa Tesla.
BYD, por su parte, el mayor fabricante de vehículos eléctricos chinos, aterrizó en España el año pasado y se ha centrado en ofrecer coches en un rango de precios superior al de MG, como sus BYD Tang y Han, los cuales se venden por 69.990 euros cada uno. Otras marcas como Lynk & Co, que solo cuenta con un modelo, apuesta por un modelo de suscripción mensual. Chery, que negocia su llegada a las instalaciones de la antigua Nissan Barcelona para producir allí, hizo oficial recientemente el desembarco en España de su firma Omoda, a la que después seguirá Jaecoo (ya hay un lote de vehículos de esta firma en el país, pero su llegada aún no se ha hecho oficial).
Ante este aluvión de nuevos competidores para los fabricantes tradicionales europeos, Bruselas anunció en octubre pasado la apertura de una investigación para determinar si las automovilísticas chinas estaban recibiendo subsidios ilegales por parte del Gobierno de Xi Jinping. En marzo, la Comisión Europea indicó que hay “pruebas suficientes de que las importaciones” de vehículos eléctricos de pasajeros procedentes de China reciben ayudas de distintos tipos y no descartó imponer aranceles con carácter retroactivo a estas compañías.
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