Tesla, BYD o Stellantis: las fábricas y proyectos del automóvil por los que pelea España
Francia, Alemania o Portugal también compiten por atraer a estas grandes automovilísticas
El paso del coche de combustión al eléctrico ha iniciado una batalla sin cuartel entre países europeos, EE UU y China para atraer proyectos de producción tanto de vehículos como de baterías. En este contexto, España juega sus bazas para afianzar su posición como segundo productor automovilístico europeo y noveno mundial, y conversa con varios fabricantes para hacerse con nuevas plantas.
Uno de ellos es Tesla, el mayor productor de vehículos eléctricos del mundo (vendió 1,31 millones de coches en 2022), que negoció durante meses con el anterior Gobierno de la Comunidad Valenciana para levantar allí una fábrica de coches. La compañía había firmado con el ejecutivo autonómico un acuerdo de confidencialidad y se molestó cuando la noticia se filtró a los medios. A pesar de ello, según fuentes consultadas por este periódico, la operación nunca se canceló, pero Tesla se ha acercado a otros países como Italia y Francia, interesados en quedarse con la fábrica a la que aspira Valencia. Por ello, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el presidente francés, Emmanuel Macron, se reunieron personalmente con el consejero delegado de Tesla, Elon Musk.
A pesar de esos acercamientos, la Comunidad Valenciana parece bien situada por ser un importante centro del motor con Ford (que eligió a Almussafes para hacer coches eléctricos a partir de la segunda mitad de la década en detrimento de Saarlouis, en Alemania) y el grupo VW, que está construyendo en Sagunto una gigafactoría de 40 GWh. Levante-EMV informó la semana pasada, citando a fuentes logísticas, de que la administración valenciana está acelerando para expropiar un terreno de grandes dimensiones en Cheste, donde podría ir la fábrica de Tesla.
Además, España cuenta con el Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC) cuya segunda convocatoria tiene actualmente la ventanilla abierta para presentar proyectos. Pondrá a disposición de la industria 1.409 millones en subvenciones y préstamos blandos. Uno de los fabricantes interesados en el Perte es Stellantis, el mayor productor de coches en España. CincoDías adelantó que la compañía mantiene un contacto constante con Industria para traer a España la plataforma de producción STLA Small, que es sobre la que se harán los futuros coches eléctricos pequeños que el grupo saque a partir de 2025. Aunque por esta plataforma también puja Francia: el Gobierno de ese país, que tiene un 6,1% de las acciones de la automovilística, pidió a Stellantis que haga allí coches dedicados a un público masivo como el Peugeot 208 eléctrico (que Stellantis quiere hacer en Zaragoza) y además lleve a Francia la STLA Small.
Sin embargo, España corre con una clara ventaja, ya que además del contacto constante con el Ejecutivo de Pedro Sánchez, el propio Carlos Tavares, consejero delegado de Stellantis, indicó en una entrevista en Le Figaro, que no era viable mover la producción del 208 a Francia. “La ecuación económica ligada a la reubicación de este proyecto no sería de interés ni para la empresa ni para el país”, aseguró el empresario. Además, España aspira a una planta de baterías de Stellantis. La compañía también contempla la posibilidad de levantarla en Portugal, aunque España tiene la clara ventaja de contar con una presencia industrial de Stellantis mucho mayor (produce coches y furgonetas en Vigo, Zaragoza y Madrid).
El gigante chino BYD, una compañía que no solo fabrica coches sino también componentes como las baterías, también posó sus ojos en España. Una fuente conocedora de las conversaciones consultada por este periódico señala que preguntó hace meses por dos localizaciones para instalar una fábrica de coches en España. Otra indica que no solo se mostró interesada en ensamblar coches, sino también en levantar una gigafactoría. España no es la única candidata, ya que BYD también contempla como posibles localizaciones a Alemania y Francia, según Les Echos.
SAIC Motor, fabricante chino propietario de la marca MG, que está creciendo de forma exponencial en Europa, también busca localizaciones para su primera fábrica europea. España vuelve a aparecer en las quinielas debido a su fuerte peso industrial en el motor. La compañía duplicó sus ventas en el primer semestre en Europa con 115.000 unidades.
Por otro lado, Toyota, líder en ventas en España, da por hecho que tendrá que fabricar baterías en la segunda mitad de la década en Europa y no descarta a España. “Estamos viendo a dónde se mueve la cadena de suministro del motor. Da la sensación de que se está inclinando más hacia Europa central, aunque parece que España está hablando con Tesla y VW está construyendo una planta allí. Estamos observando cómo se configura el futuro de la cadena de suministros. Y sí, podemos seguir esa estela”, explicó Matt Harrison, CEO de Toyota Europa, a CincoDías en junio.
Victorias y derrotas recientes del motor español
Inobat. La eslovaca Inobat dudó entre España y Reino Unido para levantar una planta de baterías de 32 GWh. Finalmente, la compañía se decidió por construirla en Valladolid, para lo que espera contar con fondos del Perte VEC.
Tata. España también pujó por una planta de baterías del fabricante indio Tata (se habló de que podría haberse levantado en Zuera, en Zaragoza), aunque la compañía finalmente se decidió por Reino Unido. Esto tiene sentido, ya que las baterías irán destinadas a su unidad Jaguar Land Rover que Tata produce en Reino Unido. La compañía parece haber utilizado a España para conseguir más ayudas públicas del Gobierno presidido por Rishi Sunak.
Envision. La compañía china confirmó en julio que se presentó al Perte VEC para levantar una planta de baterías en Navalmoral de la Mata (Cáceres), que tendrá una potencia inicial de 10 GWh.
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