Menos horas extraordinarias… ¿más empleo?
La mayoría de las pymes carece de un sistema de control
Transcurridos más de cuatro meses desde la entrada en vigor de la polémica norma que obliga a las empresas a registrar la jornada de sus empleados, todavía es pronto para conocer a fondo el resultado de su aplicación o el negocio que supone la implantación de los sistemas de control, pero datos recientes del INE indican que en el primer semestre de 2019 el descenso de las horas extraordinarias, respecto a las efectuadas en el mismo periodo de 2018, se ha situado en el 11,6%.
Durante el ejercicio pasado se trabajaron un total de 330 millones de horas extras. Por tanto, se podría concluir que el control horario comienza a surtir algún efecto y que se está moderando una práctica, la de las horas extras no declaradas y no pagadas, que la ley persigue eliminar. No obstante, aunque desde la implantación de la normativa el número de horas extras no remuneradas ha bajado un 4,7%, todavía supone más del 47% de las realizadas.
El fichaje comienza a surtir efecto en el trabajo no pagado
Estas cifras muestran, según UGT, que la introducción de mejoras legales para ayudar a controlar las horas extraordinarias tiene efectos positivos, pero también que aún queda mucho trabajo por hacer en esta materia, en la que el fraude empresarial sigue siendo muy elevado.
Si no es la mayoría, muchas empresas se han puesto manos a la obra para cumplir la ley. Queda un gran recorrido, pero Nuño Azcona, director general de B+Safe, también califica de muy positivos los primeros datos de reducción de las horas extras que se han dado a conocer, sobre todo si al final se traduce también en creación de empleo.
En el primer semestre de este año, las horas extras se redujeron un 11,6% respecto a las efectuadas en el mismo periodo de 2018
“Para nosotros, como compañía que desarrolla y comercializa soluciones de gestión y control del tiempo de los trabajadores, la medida ha supuesto un importante incremento de trabajo y de facturación, que se aproxima al 50%”. En concreto, la aparición de la normativa ha significado un aumento del volumen de negocio para B+Safe de tres millones de euros y espera triplicar, o al menos duplicar, el resultado el próximo ejercicio.
Oferta
Al calor de la ley, han surgido muchas empresas que ofrecen diferentes soluciones, que la norma especifica deben ser fiables y veraces. Otras, como B+Safe, llevan años diseñando sistemas de fichaje o de gestión presencial, sobre todo biométrica. Azcona asegura que la biometría es la mejor forma de hacer un registro cómodo, seguro y fiable: “Mejora la gestión de personal, ofrece máxima fiabilidad y permite automatizar el cumplimiento de la nueva obligación, evitando errores y sanciones”, subraya.
Estos sistemas también ayudan a conservar fácilmente los datos que, no hay que olvidar, deben mantenerse durante cuatro años y tienen que ser fáciles de obtener y de mostrar al interesado cuando lo requiera. A la vez, el administrador o los responsables de cada departamento podrán hacer seguimiento de las horas de su equipo, dar permiso de vacaciones, etcétera.
Muchas empresas lo ven simplemente como un control, como una exigencia más, pero es, sobre todo, una herramienta de gestión de los recursos para ser más productivos, puntualiza Nuño Azcona: “Esto tiene un gran valor para el negocio”.
David Arderiu, consejero delegado de Robotics, otra de las compañías veteranas con más de 35 años en el mercado, especializada en el diseño e implementación de soluciones para la gestión del tiempo y control de acceso, resalta que las empresas no deberían plantearse solo el registro horario como una obligación, sino ir más allá y apostar por la gestión eficiente del tiempo de sus empleados: “Creemos que el tiempo es un bien cada vez más preciado y que hoy los horarios y formas de trabajar no benefician a nadie. Con la gestión del tiempo se consigue ver qué necesidades tiene la empresa, pero también los trabajadores. Y esto es muy positivo”.
Antes de la entrada en vigor de la norma, Robotics ya experimentó crecimientos del 25% al 30%. Tras su implantación, las ventas han aumentado por encima del 60% o el 70% con respecto al año pasado. En 2018 alcanzó una facturación cercana a los tres millones de euros.
Soluciones
El mercado ofrece dos tipos de soluciones asociadas al uso de lectores biométricos que dan respuesta a diferentes demandas y necesidades. Hay lectores que, fundamentalmente, se utilizan para el control de acceso y otros que se aplican a la gestión de presencia y el fichaje.
En paralelo a la instalación de sistemas más o menos sofisticados (tornos, lectores de huella, sistemas de reconocimiento facial…), el número de negocios, básicamente pequeños, que registran el fichaje a mano sigue siendo importante.
“Es muy elevado el número de pymes que utilizan el sistema de registro manual”, apunta Nuño Azcona. Por eso, B+Safe facilita la instalación de sus sistemas a las pequeñas, a quienes aconseja el renting. Con una cuota mensual a partir de 50 euros, las pymes pueden contar con un sistema de gestión presencial fiable y cómodo.
Por su parte, Robotics ha invertido 250.000 euros para hacer accesible su solución VisualTime Zero a todas las organizaciones que lo deseen. Se trata de una herramienta gratuita que permite a las empresas de 2 a 30 empleados llevar un registro diario de la jornada de sus trabajadores veraz, fiable y no alterable, de forma ágil y cumpliendo con la ley para evitar sanciones que pueden llegar a ser sustanciosas.
También hay otras alternativas vía internet como la que ha ideado Ekon, que incluso permite a los empleados fichar desde el móvil. “Nuestro módulo para la gestión del tiempo persigue que el empleado pueda gestionar su propio calendario. Está muy orientado a descentralizar la gestión de las pequeñas empresas, tiene un sistema de autoimplantación y no es necesario hacer una fuerte inversión”, resalta Jordi Sole, director de producto de Ekon.
No es fácil saber cuántas compañías tienen pendiente de incorporar el control horario. Hay consenso en que entre las grandes queda un porcentaje pequeño, pero es probable que, entre las pymes, el 50% esté todavía pendiente de implantar un control seguro, no susceptible de sanción, que pueda demostrar que la información no es manipulable, que tenga en cuenta la jornada real… Da igual el modelo de registro horario elegido, lo importante es que siempre cumpla dos requisitos: fiabilidad e invariabilidad.
Balance
Respecto a los últimos datos sobre la caída de las horas extra desde el mes de mayo publicados por el INE, la CEOE considera que caben distintas lecturas. Por un lado, argumenta la patronal, arrojan que se han realizado menos horas extra pero no se sabe hasta qué punto esto se debe solo a la implantación del registro horario o también a la ralentización de la actividad económica y el empleo que se ha puesto de manifiesto en los últimos meses. “Sería necesario más tiempo para evaluarlo”, señalan fuentes del departamento de empleo. Y añaden que, en general, se está produciendo una buena aplicación de la norma.
Por su parte, UGT recuerda que se podrían crear 180.000 empleos a tiempo completo de no realizarse horas extraordinarias. El sindicato subraya que la ley, a pesar de sus carencias, constituye un importante paso hacia adelante en el control efectivo de la jornada laboral.
Inquietud
Si alguna normativa ha generado preocupación antes y después de entrar en vigor, esta es la del registro de jornada, comenta Martín Godino, socio director general de Sagardoy Abogados: “Creo que nunca hemos tenido tantas consultas sobre una materia concreta como con esta. Pero el balance a estas alturas es que la mayoría de las empresas están en ello”. La norma dice que hay que abrir un proceso de negociación con los representantes de los trabajadores para concretar la forma de documentar el registro. “Muchas compañías abrieron antes del verano esa negociación con los sindicatos.
Algunas han concluido con acuerdo y están ya en la fase de implantar la herramienta; otras están todavía negociando. Mi impresión es que, de aquí a final de año, un porcentaje muy alto tendrá los sistemas de registro”, afirma. Godino cree que la mayoría van a ser respetuosos con la ley y, si no son fiables y permiten la manipulación, habrá impugnaciones de los sindicatos.