BBVA prevé un déficit de capital en la banca de 50.000 millones
El déficit de capital del sistema financiero español va a suponer en total entre el 3% y el 5% del PIB hasta 2013, según cálculos del servicio de estudios de BBVA, que añade que será un coste "perfectamente asumible para la economía española".
Las advertencias sobre un elevado déficit de capital en las entidades financieras españolas han sido el mantra habitual de las agencias de calificación financiera y de numerosas firmas de análisis, pero ayer quedaron suscritas también por el servicio de estudios de BBVA. La entidad calcula una necesidad de capital para el sistema financiero español equivalente a entre el 3% y el 5% del PIB hasta 2013, es decir, entre 30.000 y 50.000 millones de euros, casi el triple del déficit de capital detectado por el Banco de España el pasado mes de marzo, de 15.200 millones de euros.
El banco justifica esta diferencia en que la estimación del Banco de España se basa en una foto fija y responde a las necesidades "estáticas" en un punto del tiempo, diciembre de 2010, mientras que los cálculos de BBVA responden a una estimación "dinámica". Es decir, con la proyección de las cuentas de las entidades hacia el futuro y las necesidades que pueden surgir en los próximos años. La entidad añade que sus supuestos son más estrictos que los del test de estrés europeo.
El servicio de estudios de BBVA puntualiza en cualquier caso que "el sistema financiero español está avanzando en su reestructuración y en la cobertura de las necesidades de capital, que son perfectamente asumibles para el conjunto de la economía". Además, apunta que el citado déficit de capital se concentra en tres entidades, que acumulan el 77% de las necesidades y equivalen al 36% de los activos totales del sistema. De acuerdo con las cifras anunciadas por el Banco de España, las entidades que más capital requieren para cumplir los nuevos requisitos de solvencia son Bankia, CAM, Novacaixagalicia y CatalunyaCaixa.
Evolución del crédito
En línea con el mensaje anunciado la pasada semana por Ángel Cano, consejero delegado de BBVA, el servicio de estudios del banco prevé una "moderada disminución del crédito". Aunque matiza que esa caída "es perfectamente compatible con demandas crecientes por parte de algunas empresas y sectores".
Virtudes y defectos de las ayudas públicas
El servicio de estudios de BBVA afirma que el plan de reestructuración del sistema financiero propuesto por las autoridades tiene "elementos positivos", tales como dar una hoja de ruta clara para acometer los cambios, fomentar la participación del capital privado o crear la figura del FROB como garante de que se alcanzará el capital mínimo. Sin embargo, advierte también de "limitaciones que siguen alimentando las incertidumbres de los mercados".La entidad señala que los plazos de reestructuración son largos y, de agotarse completamente (cinco años), sería un proceso lento. Apunta además que, aunque el plan fomenta la conversión de cajas en bancos, "el capital privado puede tener incentivos a esperar a que el FROB reorganice las entidades y las revenda más adelante".