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Indra llega a un acuerdo con Redeia para comprar el 89% de Hispasat por 725 millones

La compañía ha asegurado una financiación de 700 millones de euros para la operación, el resto será cubierto con cargo a la caja existente

Exterior de las oficinas de Indra en Madrid.
Exterior de las oficinas de Indra en Madrid.Susana Vera (REUTERS)

Indra ha alcanzado un acuerdo con Redeia para la compra de la práctica totalidad de Hispasat. Tras muchos meses de negociaciones entre ambas compañías, sus responsables han llegado a un entendimiento para ejecutar la transacción, tal y como avanzó este diario el pasado viernes 24 de enero. Según ha detallado Indra en un comunicado remitido a la CNMV, la compañía presidida por Ángel Escribano ha suscrito la compra del 89,68% de Hispasat por un precio de 725 millones de euros.

“La operación está sujeta al cumplimiento de determinadas condiciones suspensivas, de carácter esencialmente regulatorio, tanto en España como en otras jurisdicciones; a la aprobación por la Junta General de Accionistas de Indra; así como a la ejecución de determinados acuerdos para que Indra consolide contablemente Hisdesat Servicios Estratégicos S.A., operador de servicios gubernamentales por satélite en las áreas de defensa, seguridad, inteligencia y asuntos exteriores”, especifica el documento.

Para la compra, Indra ha asegurado financiación por un total de 700 millones de euros, mientras que el resto del importe será cubierto con cargo a la caja existente. Tanto Redeia como Indra han celebrado sendos consejos de administración esta misma semana. La operación ya se ha elevado al más alto nivel.

Por su parte, Redeia ha comunicado que “invirtió en la compra de Hispasat 933 millones de euros en 2019 y con el cierre de la venta de su participación habrá recibido un total de 821 millones de euros que incluyen el precio acordado con Indra más los 96 millones de euros de dividendos cobrados de Hispasat entre 2019 y 2025, lo que supone una minusvalía total en caja de 112 millones de euros”.

Fuentes al tanto de la operación señalan que esta ha sido aprobada en un consejo extraordinario celebrado este mismo viernes, después de que Indra hiciera lo propio en su cúpula. Tal y como detalla Redeia, se trata de una operación que tiene el carácter de vinculada. Tanto el principal accionista de Indra como el de Redeia es la SEPI. Eso ha obligado a que el consejo celebrado este viernes solo haya tenido la participación de los consejeros independientes. Es decir, que en las votaciones para aprobar la operación no ha participado el holding inversor del Estado, que tiene presencia tanto en Indra como en Redeia y en la propia Hispasat.

Cuando se haga de forma definitiva con el control de Hispasat, Indra dará un gran paso a la hora de implementar su plan estratégico para lo que resta de década. El pasado marzo, Indra anunció que se focalizaría en la defensa, el espacio y la tecnología digital avanzada, en detrimento de otras actividades como las desempeñadas por su filial de pagos Minsait Payments, una sociedad que lleva desde septiembre en la rampa de salida para ser vendida. En medio del tenso momento geopolítico que atraviesa un mundo en el que los conflictos se han venido intensificando en los últimos años, Indra apuesta por una compañía de satélites española y que, además de tener una vertiente civil, cuenta con una red satelital militar bajo el paraguas de Hisdesat.

Esta misma semana, Indra había estado preparando la financiación necesaria para llevar a cabo una operación de estas características. Según detallaron recientemente a El País fuentes cercanas a la operación, el objetivo de Indra pasa por convertirse en el elemento vertebrador de todo el sector espacial español para así pasar a competir en ligas internacionales. Ya el pasado verano, Indra compró Deimos, la filial tecnológica de Elecnor especializada en el desarrollo de misiones espaciales e integración de satélites.

Se trata de una operación que el mercado considera de Estado. Indra y Redeia tienen en común que su máximo accionista es el propio Estado español a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). La clave para encajar el puzle y lo que en parte ha demorado la operación ha sido la falta de consenso sobre el precio.

Redeia pagó 933 millones en 2019 a Abertis por el 89% de las acciones de Hispasat, una cifra sensiblemente superior a la transacción actual. No obstante, la presión competitiva en el sector de los satélites y la bajada de valoración de otras empresas como la francesa Eutelsat han tirado a la baja del precio. Para Redeia, el desprendimiento de Hispasat le permite sanear su balance y mejorar su rating financiero ante el reto de invertir en redes eléctricas 1.000 millones de euros al año. Este reto se da justo cuando la matriz de Red Eléctrica de España ha perdido parte de su retribución regulada al terminar la vida útil de todos los activos puestos en operación antes de 1998.

En otra comunicación dirigida a la CNMV, por su parte, Redeia confirma que, además del cambio estratégico que acometió la compañía para centrarse aún más en el desarrollo y modernización de la red eléctrica, los financieros han sido los motivos que explican el movimiento. “La venta de Hispasat permite a Redeia reforzar su capacidad financiera y mejorar el perfil de riesgo de su rating crediticio para desarrollar el próximo Plan Estratégico cuyo foco principal será impulsar la transición energética en España con la ejecución de un volumen de inversiones sin precedentes entre 2025 y 2030, reafirmando nuestro compromiso con la creación de valor sostenible para nuestros accionistas”, dice el comunicado de Redeia.

La operación supone el reconocimiento de una minusvalía contable en la cuenta de resultados de Redeia de 2024 por un importe aproximado de 137 millones de euros después de impuestos, correspondiente a la diferencia entre el coste de los activos netos del negocio satelital que figuran en los estados financieros consolidados de Redeia (862 millones de euros) y el precio de venta. “Dicho importe será registrado en el ejercicio 2024, no teniendo efecto en caja. Adicionalmente, la operación tendrá un impacto positivo de 725 millones de euros en el flujo de efectivo de la Sociedad en 2025 debido al cobro que supondrá esta desinversión”, añade Redeia. Además, la transacción se ha cerrado finalmente por una cantidad algo superior a lo que se había especulado en el mercado.

En esta nueva etapa de Indra, con grandes licitaciones internacionales del sector espacial como meta, en el mercado se especula con que Pedro Duque, actual presidente de Hispasat, pase a liderar toda la división espacial dentro de Indra. El astronauta y exministro de Ciencia e Innovación goza de amplio prestigio en el sector del Espacio.

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