Las menores expectativas de recortes de los tipos se traducen en rentabilidades más altas: las letras a 12 meses pagan el 2,6%
El Tesoro inaugura noviembre con la venta de 4.956,85 millones en deuda a muy corto plazo
Los cambios en las expectativas de los tipos de interés fueron una de las señas de identidad de octubre, un mes en el que los operadores llegaron a descontar una rebaja de 50 puntos básicos en la próxima reunión del consejo de gobiernos. Con una eurozona que logró esquivar la recesión en el tercer trimestres y una inflación que en octubre repuntó al 2% la presión para ejecutar grandes rebajas de tipos en la eurozona se diluyen. El mercado espera que el BCE siga adelante con la flexibilización monetaria a un ritmo más moderado. En medio de este escenario, el Tesoro español continúa ejecutando su programa de financiación e inaugura noviembre con la subasta de letras a seis y 12 meses.
El organismo que dirige Paula Conthe ha colocado 4.956,85 millones en deuda a corto plazo con un resultado mixto: las rentabilidades de las letras a 12 meses repuntan ligeramente mientras el rendimiento de los títulos a seis meses han vuelto a experimentar una nueva rebaja. Las menores expectativas de recortes agresivos del precio del dinero ayudan a contener la caída de los rendimientos y esto se deja sentir en la demanda. Las órdenes de compra para ambas referencias han alcanzado los 8.747,63 millones. La ratio de cobertura ha sido de 1,76 veces la oferta.
El grueso de la emisión, 3.440,2 millones, ha ido a parar a las letras a 12 meses. El interés marginal ha repuntado ligeramente desde el 2,598% de la puja de octubre al 2,631% actual. Las órdenes de compra no competitivas, que corresponden en su mayoría a los pequeños ahorradores, han alcanzado los 921,6 millones, ligeramente por debajo de los 931,6 millones de octubre.
En letras a seis meses se han adjudicado 1.516,65 millones. El tipo marginal ha continuado reduciéndose y se sitúa en el 2,882%, frente al 2,919% del mes pasado. Es el rendimiento más bajo desde febrero de 2023. La rebaja de las rentabilidades se ha dejado sentir en la demanda. Las peticiones de los particulares han alcanzado los 920,24 millones, por debajo de los 1.075,85 millones de octubre, y un volumen que se sitúa en línea con los niveles registrados a comienzos de año.
A dos meses para el cierre del ejercicio el Tesoro ha completado el 82% de su programa de financiación a medio y largo plazo. Para el conjunto del año, el organismo dependiente del ministerio de Economía preveía unas emisiones netas de 55.000 millones, 10.000 millones menos que el año anterior. Se trata del importe más bajo desde el estallido de la pandemia y ronda niveles de 2014 (55.600 millones). En conjunto, la emisión bruta estimada por el Tesoro ascenderá a 257.572 millones de euros, un 2% superior a la de 2023 debido al incremento de las amortizaciones, y el grueso se cubrirá mediante la emisión de instrumentos a medio y largo plazo para mantener la vida media de la cartera de deuda próxima a los ocho años.
Esta estrategia ha permitido reducir el impacto de la agresiva subida de tipos de los dos últimos años. El coste medio de la deuda en circulación se situó en septiembre, último mes del que se disponen datos, en el 2,214%, apenas 57 puntos básicos por encima del 1,641% registrado a cierre de 2021 antes de que los bancos centrales se enzarzaran en su lucha contra la inflación. En su comparecencia ante el Congreso para la aprobación de la memoria de endeudamiento del Tesoro en 2023, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, destacó que el impacto de la subida de tipos de interés en la zona euro ha sido “muy moderado” en el pago de intereses de la deuda española durante el pasado de ejercicio, por lo que considera que la deuda pública española es sostenible y prosigue con su proceso de reducción. A cierre de 2023 la ratio de deuda sobre PIB se situó en el 107,7%, frente al 111,6% y el 116,8% registrados en 2022 y 2021. “Esta buena evolución prudente del Tesoro está permitiendo que la retirada progresiva de los estímulos del BCE esté siendo compatible con una fuerte atracción de inversiones extranjeras”, destacó. La reducción de las tasas por parte de la institución europea ya se está dejando sentir en las colocaciones. El tipo medio de las nuevas emisiones se situó por debajo del 3% en septiembre, algo que no sucedía desde enero de 2023. Respecto a los máximos de 3,853% de octubre de 2023, el coste se ha reducido en más de 100 puntos básicos.
La próxima cita del Tesoro con los mercados será el jueves. En una jornada en la que todas las miradas estarán puestas en la reunión de la Reserva Federal (se espera que baja los tipos en 25 puntos básicos) el organismo que dirige Paula Conthe espera captar entre 3.500-4.500 millones en deuda a medio y largo plazo. La próxima emisión de letras tendrá el 12 de noviembre en la que se venderán títulos a tres y nueve meses. Aunque las rentabilidades de la deuda están lejos de los máximos registrados el año pasado (la deuda a 12 meses llegó a alcanzar 3,876%), los particulares siguen viendo en este producto la estrategia más segura para batir a la inflación. A cierre de octubre el IPC en España se situó en el 1,8%. El componente de fidelización juega un papel importante. Muchos inversores que en 2023 se subieron a la ola de las letras, han optado por reinvertir la deuda que vence.