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El 25% de las rentas altas tiene casas alquiladas frente al 9% de las medias y bajas

Los caseros con ingresos superiores a los 601.000 euros por ejercicio se multiplican por cuatro en los últimos 10 años 

Alquileres ricos Gráfico
Pablo Sempere

En España hay algo más de un millón de contribuyentes que declaran cada año en el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) unos ingresos superiores a los 60.000 euros. De ellos, casi 250.000 obtienen una parte de sus rendimientos a través del alquiler de viviendas, un 25%. Sin embargo, a medida que se desciende en los tramos de renta la proporción de caseros va cayendo en picado. El resultado es que de los contribuyentes con ingresos inferiores a los 60.000 euros por ejercicio (unos 21 millones de personas) solo un 8,6% tiene casas alquiladas.

Los datos, correspondientes a 2021 y publicados hace unos días en la última estadística del IRPF de la Agencia Tributaria, muestran por ello una radiografía heterogénea dentro del mercado del alquiler. A modo de resumen, un vistazo a los dos extremos: mientras que las rentas más ricas –aquellas por encima de los 601.000 euros– alquilan viviendas en casi un 35% de los casos, las más bajas lo hacen únicamente en el 0,3% de las ocasiones.

Por su parte, si se toman como referencia los 4,5 millones de contribuyentes que oscilan entre los 12.000 y los 21.000 euros anuales, en los que se encontrarían aquellas personas que perciben el salario más habitual de España, la proporción de caseros rondaría el 7,8%.

Aunque avanza a un ritmo muy tenue, los datos de la Agencia Tributaria evidencian la tendencia de una paulatina concentración de la vivienda en alquiler en manos de los contribuyentes mejor posicionados del país.

De entrada, un análisis a lo largo de los últimos 10 años evidencia que el número de caseros ha aumentado en la práctica totalidad de los tramos de renta del país. Si en 2012 la cantidad de contribuyentes con este tipo de rendimientos era de 1,2 millones de personas, en 2021 la cifra se acerca a los 2,1 millones, un aumento del 63%. Sin embargo, al analizar los grupos, el avance es muchísimo más acusado en los tramos superiores de renta, que parecen haberse animado a comprar viviendas para obtener de ellas un rendimiento.

Hace 10 años había cerca de 91.700 personas con rendimientos entre 60.000 y 150.000 euros al año que obtenían rentas del alquiler. En 2021, según la agencia, la cifra rondó las 206.500, un aumento del 125%. Por su parte, las casi 14.000 personas que declaraban entre 150.000 y 601.000 euros hace 10 años pasaron a 38.500, una subida del 177%. Por último, los 1.150 contribuyentes que alquilaban vivienda y obtenían más de 601.000 euros por ejercicio han pasado a los 4.200, una subida del 270%.

En los tramos inferiores las subidas son mucho menos fuertes. Destaca únicamente un alza del 162% en las rentas que se mueven entre los cero y los 1.500 euros anuales, si bien fuentes expertas consultadas explican que este grupo suele estar compuesto por jubilados con pensiones mínimas o por jóvenes titulares de vivienda pero con pequeños ingresos, por lo que quedaría prácticamente descartado cualquier fin inversor.

De nuevo al seleccionar al tramo mayoritario –entre 12.000 y 21.000 euros al año– la subida de declarantes con este tipo de rendimientos es menor que en la media nacional, tan solo de un 18% en el periodo analizado.

En estos 10 años el precio medio de la vivienda en alquiler ha crecido en torno a un 20%. Según los datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en el periodo 2015-2021 la mediana ha aumentado un 22,7% en España.

Rendimientos

La Agencia Tributaria también ofrece en su estadística los datos del importe medio que abonan los arrendadores en el impuesto, una cifra que permite hacerse una idea aproximada de los rendimientos netos que obtiene cada uno de ellos y que, de nuevo, muestra la tendencia alcista de los contribuyentes de mayores ingresos. En España, de media, los propietarios de vivienda en alquiler pagan 2.600 euros cada año a Hacienda por este concepto, un avance del 7% frente a los 2.430 euros que se abonaban hace 10 años.

Sin embargo, mientras que los importes de los contribuyentes que se mueven entre los 12.000 y los 21.000 euros han crecido un 14% (hasta los 2.460 euros), los de las rentas de más de 601.000 euros lo han hecho un 47,5%, hasta llegar a los 8.800 euros.

Si los caseros se agrupan únicamente en dos grandes tramos la tónica se repite. El aumento promedio se sitúa en el 5,7% en las rentas de hasta 60.000 euros por ejercicio, unos 2.100 euros de media para Hacienda. A partir de los 60.000 euros anuales la subida es del 21,5%, hasta los casi 6.000 euros de media.

Los más ricos

Los datos de la agencia muestran además que el número de declarantes ultrarricos, tengan o no vivienda en alquiler, ha crecido año tras año y se encuentra hoy en máximos históricos. En el año 2021 hubo en España un total de 12.178 personas con más de 601.000 euros por ejercicio que pagaron el IRPF, un aumento del 163% respecto a 2012 que supera con creces el avance registrado por el total de declarantes en el mismo periodo, que se sitúa únicamente en el 6%. También crecieron con fuerza los que oscilaban entre 150.000 y 601.000 euros: más de 123.000 personas y un aumento del 104%.

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Sobre la firma

Pablo Sempere
Es redactor en la sección de Economía de CINCO DÍAS y EL PAÍS y está especializado en Hacienda. Escribe habitualmente de fiscalidad, finanzas públicas y financiación autonómica. Es graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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