Telefónica acelera las desinversiones en Latinoamérica y encarga a JP Morgan la venta de su negocio en México
La teleco busca rubricar una venta antes de su próxima junta de accionistas, con transacciones en liza en Colombia y Argentina
![Sede de Telefónica en Las Tablas.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/ZWIJIBILPZHWVCKXUUPGA6FNBM.jpg?auth=54547949badef65e3b8f84079c19d5f8d17e6a37d3f6c7245a37275f4d1497c0&width=414)
Telefónica acelera con la venta de su negocio en Latinoamérica. La compañía de telecomunicaciones ha encargado al banco de inversión JP Morgan y al despacho de abogados White&Case la desinversión de su filial en el país azteca, según indican fuentes financieras. El proceso se suma a la transacción en liza en Argentina y a la fusión que negocia con Milicom para su negocio en Colombia, con el objetivo de rubricar una de estas tres operaciones en el corto plazo, antes de la próxima junta de accionistas en la que se votará el nombramiento de su nuevo presidente, Marc Murtra.
El nuevo presidente, que fue nombrado hace en torno a un mes, ya ha establecido contacto con la mayor parte de los banqueros y asesores de cabecera con los que trabaja la compañía. El mensaje fue claro. Todas las operaciones corporativas pendientes siguen en marcha, incluso en algunos casos con más celeridad.
La desinversión de activos en Latinoamérica ha sido ya un plan sobre la mesa de la empresa ya desde hace años. El anterior presidente, José María Álvarez-Pallete, encomendó en 2020 la venta del negocio como una unidad, agrupado bajo la filial Hispam, a Morgan Stanley, si bien el proceso embarrancó al no encontrar ofertas suficientes. El plan volvió a estar sobre la mesa este año, pero en esta ocasión se aborda como desinversiones paralelas por geografías.
La compañía dio el pistoletazo de salida en verano, cuando anunció un acuerdo con Milicom, que opera en este mercado bajo la enseña Tigo, para explorar una fusión en el negocio entre ambas compañías en el país. Designó a JP Morgan y a Citi como sus asesores en las cuestiones financieras y a Latham&Watkins para los aspectos legales. Las partes mantienen las negociaciones durante todo este semestre y esperan alcanzar un acuerdo final próximamente.
Otra pata en liza es la desinversión de los activos en Argentina, que también ha encomendado a JP Morgan y a Latham&Watkins. El proceso ya ha arrancado en ese enclave y cuenta con varias ofertas, como la presentada por el magnate mexicano Carlos Slim, America Móvil, además de Iliad, Liberty, Werthein, Olmos y Grupo Clarín, según publicó La Nación. Finalmente ha encargado la desinversión en México también a JP Morgan y a White&Case. Un portavoz de Telefónica ha declinado hacer comentarios.
Según las cuentas del ejercicio de 2023, la filial del grupo registró un resultado operativo de tres millones de euros, tras las pérdidas de 178 millones en 2022. Los ingresos del negocio de móvil en el país ascendieron a los 1.318 millones. La compañía cerró en 2019 un acuerdo con el gigante AT&T para utilizar las infraestructuras en el país del gigante estadounidense, de modo que este grupo prestará servicios mayoristas de acceso a última milla inalámbrica a Telefónica México. Así, Telefónica opera desde este momento en el país como operador independiente tras haber migrado a los clientes a la red de AT&T. Percibió por ello unos 500 millones de euros.
En cualquier caso, el margen con el que trabaja el mercado es que Telefónica culminará al menos una de estas transacciones antes de la próxima junta de accionistas, que se celebrará esta primavera. La cita adquiere una especial trascendencia por el relevo en la cúpula de la empresa, con la sucesión de Álvarez-Pallete por Murtra. Si bien el movimiento está casi asegurado, con el sí de sus tres principales accionistas (SEPI, Criteria Caixa y Saudi Telecom), un elevado voto en contra del free float (capital en el mercado) no es un escenario ideal para empezar una nueva era en la compañía. Por ello, el mercado espera que antes de someterse a la votación, el nuevo presidente ofrezca muestras al mercado de que la senda de desapalancamiento y las operaciones en liza no están muertas.
De todas las opciones encima de la mesa, fuentes del mercado apuntan a la transacción en Colombia como la más cercana a materializarse, si bien no se descarta que alguna de las otras dos se acelere en las próximas semanas. Una vez se desprenda de las divisiones de México, Argentina y Colombia, sobre el perímetro de Hispam solo quedarán los negocios en Venezuela, Perú, Chile, Ecuador y Uruguay. De ellos, el mercado especula con que en el futuro se produzca una transacción con la rama peruana, en la que redujo capital hace pocos meses para absorber pérdidas unos 700 millones el año pasado, así como acumula varios pleitos con el Gobierno de ese país. Por el contrario, la parte de Brasil (que ya no se incluyó desde un inicio bajo el perímetro de Hispam) está totalmente descartada su venta, como tampoco parece que opte por una desinversión en Chile.
Sobre la firma
![Álvaro Bayón](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2Fe2cdf436-e1e2-4cd9-94e6-d16e6cc2b57b.png?auth=15acc8f32e288e63064b7a431c8353fd42d72ea04615eecc8f5dea8b7ab1fe72&width=100&height=100&smart=true)