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Mercado de capitales

Los emisores europeos aceleran la venta de deuda y colocan más de 18.300 millones

BBVA y Santander dan el pistoletazo de salida a 2023 con la venta de 4.500 millones

Emisiones deuda
Infografía: Belén Trincado

El mercado de capitales calienta motores. Ante la expectativa de que el coste de financiación siga subiendo a medida que los bancos centrales aceleren el alza de los tipos, los emisores aprovechan la tradicional ventana de inicio de año para acelerar sus programas de financiación. Eso es lo que sucedió ayer, la primera jornada hábil tras el festivo el lunes en Londres y EE UU. Los inversores tuvieron que digerir una avalancha de papel de más de 18.300 millones en Europa, la sesión más activa desde noviembre. Como sucedió un año antes, los financieros acapararon el protagonismo, con la excepción de Toyota (1.300 millones).

BBVA y Santander fueron los dos representantes españoles. La entidad que preside Carlos Torres fue la encargada de dar el pistoletazo de salida con una emisión de deuda sénior no preferente con vencimiento en 2031. No obstante, como tiende a ser tendencia en los últimos tiempos, incluyen la opción de amortización anticipada en 2030. BBVA captó 1.000 millones.

A pesar de la incertidumbre que existe en torno a la política monetaria y el devenir de la economía, los mayores retornos que empieza a ofrecer la deuda despiertan el apetito de los inversores. Una buena muestra fue la demanda lograda por BBVA. Las órdenes de compra superaron los 2.200 millones. Esto permitió rebajar el precio. La operación partía con un diferencial de 195 puntos básicos sobre midswap (tipo de interés libre de riesgo) y al cierre bajó a los 170. Barclays, BBVA, BNP Paribas, Crédit Agricole y JP Morgan fueron las entidades contratadas para llevar a buen puerto la operación. Los bonos se emitieron de acuerdo a la ley española, pero cotizarán en el mercado dublinés.

El martes, 3 de enero, la jornada de mayor actividad desde noviembre

Las cédulas hipotecarias, un producto que ofrece liquidez y que en los últimos años ha caído en desuso ante la subasta del BCE (TLTRO), están llamadas a cobrar un protagonismo especial este año. Ya ayer lograron abrirse un hueco. Santander lanzó 3.500 millones en títulos a tres y siete años. Para las cédulas con vencimiento en 2026 (2.500 millones) el precio fue de 22 puntos básicos sobre midswap, tres puntos menos con los que partía la emisión. Los 1.000 millones restantes corresponden a los títulos a siete años para los que el diferencial alcanzó los 47 puntos básicos. La demanda conjunta superó los 5.800 millones. El propio Santander, Barclays, Commerzbank, Crédit Agricole, Deutsche Bank y Natixis fueron los colocadores.

Junto a Santander –al cierre de la edición dio mandato para la venta de bonos en dólares a través de su filial británica– el banco hipotecario Münchener Hypo levantó 100 millones de francos suizos (130 millones de euros) en cédulas a siete años. Las cédulas son el producto de renta fija bancario más seguro que, como el conjunto de la deuda, ha logrado dejar atrás los rendimientos negativos.

Empresas y bancos apelan al mercado ante el alza de tipos

La primera jornada del año en el mercado de capitales contó con la preponderancia de los financieros franceses. Junto a los grandes nombres como BNP Paribas (1.250 millones a ocho años), Crédit Agricole (1.250 millones a seis años) y AXA (750 millones a 10 años) se sumaron otras como RCI Banque (750 millones a tres años y medio), la cooperativa de crédito BPCE (2.250 millones en bonos a cinco y 10 años)y Danske (2.000 millones). Société Générale y UBS no quieren dejar escapar la ocasión y ayer dieron mandato para la venta de deuda en dólares en cinco tramos.

“Los emisores tanto públicos como privados tendrán que emitir mucho este año y cuanto antes empiecen mejor. Además, en las próximas semanas comienza el periodo previo a la presentación de los resultados, una época en la que tienen restringido su acceso al mercado de capitales”, afirman fuentes del mercado.

Exigencias regulatorias

Tipo de deuda. Dentro del universo de la renta fija financiera los bonos sénior preferente y la deuda sénior no preferente fueron las grandes protagonistas de la jornada. Aunque las entidades financieras de la zona euro no tienen la liquidez comprometida, deben seguir avanzando en el cumplimiento de los requisitos regulatorios que les exige construir un colchón de deuda con capacidad de absorber pérdidas, una categoría en la que entra la sénior no preferente. Además de cumplir con las exigencias, parte de la deuda emitida en años anteriores empiezan a perder los criterios de elegibilidad y necesita refinanciarse.

‘Cocos’. Crédit Agricole fue la única entidad que aprovechó que los inversores están empezando a construir sus carteras para vender deuda contingente convertible, cocos en la jerga. Estos títulos, que son el tipo de deuda de más riesgo, exigen un precio mayor. La entidad vendió 1.250 millones al 7,625%.

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