La CNMV se reunirá con la banca de inversión para impulsar las OPV en España
El supervisor aboga por procesos más rápidos y baratos; defiende que la carga regulatoria no dependa de si la firma cotiza o no
Sebastián Albella, el presidente de la CNMV, expuso ayer el plan del supervisor para 2020. Precisamente este ejercicio, en noviembre, vence el mandato del actual jefe del vigilante de los mercados. Nadia Calviño puede prorrogar su permanencia otros cuatro años más, si bien el propio Albella declinó pronunciarse sobre su continuidad en el cargo.
La solicitud, ya convertida en mantra, de mayor autonomía en cuanto a gestión del personal, volvió a estar encima del tapete. Ahora que están negociándose los Presupuestos Generales, Albella pidió que se permita a la CNMV atraer y retener el talento e insistió en que su plantilla no dependa de la oferta de empleo público.
Otro de los problemas que detecta el supervisor es la pertinaz sequía en las salidas a Bolsa en España. Solo hubo una el año pasado, la de Grenergy, y ni siquiera fue un estreno como tal, puesto que pasó del Mercado Alternativo Bursátil (MAB) al mercado sénior. Es más, el fondo de capital riesgo para invertir en empresas tecnológicas de Silicon Valley de Arcano, Balboa, tuvo que suspender su oferta pública de suscripción (OPS), y ha iniciado su comercialización por la vía privada. También Europastry desistió de salir a Bolsa, debido a que el precio que estaban dispuestos a pagar los inversores no estaba a la altura del exigido por sus accionistas: los Gallés, con un 79,27%, y la gestora de capital riesgo MCH, con el 20,73%. En 2018, solo debutaron Metrovacesa y Solarpack.
La CNMV se propone revertir esta situación y está en conversaciones con las empresas y, especialmente, con sus asesores en estos procesos: los bancos de inversión. Albella ha desvelado que quiere que estas operaciones sean más rápidas y baratas para que puedan competir mejor con las compras que realizan por los fondos de private equity. Estos cuentan con una gran liquidez y pueden endeudarse a tipos de interés ultrabajos, lo que les lleva a pagar más que los fondos de inversión.
El destino final es que “las empresas se financien en mayor medida a través del mercado y mediante fondos propios”. “En relación con esta iniciativa, se mantendrán reuniones con participantes del mercado (entidades financieras y profesionales especializados en la materia y emisores) e infraestructuras de mercado”, explica la CNMV en el informe del plan de actividades.
Bankinter ya anunció que entregaría como dividendo el 82,6% del capital de Línea Directa y la aseguradora cotizará de manera independiente en la segunda mitad del presente ejercicio. También están pendientes los estrenos de Vips, propiedad de la mexicana Alsea, de Restaurant Brands Iberia, que gestiona en exclusiva la marca Burger King en España, y el de Tendam (la antigua Cortefiel), siempre que se den las circunstancias adecuadas. TSK también prevé realizar un spin-off (separación) de su filial de renovables Esersa en junio o julio, como publicó CincoDías el pasado 17 de enero.
Como en otras ocasiones, Albella insistió en que debe revisarse la carga regulatoria de las empresas cotizadas por el mero hecho de serlas. “Los requisitos deben fijarse por el tamaño de la empresa y no por el hecho de que esté en Bolsa o no. Ya ocurre así con la información no financiera”, resaltó.
Otro de los planes es elaborar un informe sobre un posible código de buenas prácticas para la implicación de los accionistas a largo plazo. Esto estará vinculado a una directiva que debió haber sido traspuesta el pasado 10 de junio y que el Ejecutivo prevé aprobar en breve, como publico este periódico el 20 de enero. Entre otras obligaciones, los fondos de inversión, de pensiones y las aseguradoras revelarán cada año cómo han aplicado su política de voto.
La publicidad, tanto de los contratos por diferencias (CFD) como de los intermediarios que operan con licencias de otros países –Albella apuntó con el dedo a Chipre–, será muy vigilada y la institución propondrá la restricción de los CFD.
La liquidez de los fondos estará bajo la lupa
Test de estrés. El coordinador de las comisiones de valores europeas, ESMA, ya tiene una guía para hacer pruebas de resistencia a eventos de grandes salidas de patrimonio de los fondos de inversión. Incluso publicó el 5 de septiembre un ejemplo que realizó a nivel europeo. En 2020, la CNMV “diseñará y realizará pruebas de estrés sobre fondos de inversión”. Este tipo de ejercicios tiene una finalidad macroprudencial, dado el creciente tamaño de los fondos de inversión y su relación con las entidades financieras, el mercado y la economía real. En relación con esto, llevará a cabo una actuación de supervisión en coordinación con ESMA sobre la gestión de la liquidez de los fondos y además publicará una guía sobre la gestión y control de la tesorería de las carteras. Se recogerá una posible modulación en ciertos casos del valor de suscripción o reembolso cuando estos sean masivos los criterios que deben seguir para la venta de las posiciones.