La brecha de la desigualdad es la responsable de las sociedades injustas
La ONU busca disminuir las diferencias que el crecimiento económico produce entre los países y en el interior de estos. Unos pocos se quedan la riqueza de todos
La distancia que separa Pozuelo de Alarcón (Madrid) del barrio sevillano del Polígono Sur es mayor que los 543 kilómetros que refleja el mapa. La familia de Antonio Gómez (Sevilla, 1970), de profesión conductor, formada por él, su mujer (ama de casa) y dos hijos (con la ESO terminada, pero sin trabajo), vive con los 1.000 euros que este gana al mes.
Con una renta anual por habitante de 4.897 euros (estadística sobre riqueza y calidad de vida del INE), están a gran distancia de los 25.596 euros de Pozuelo. Otras cifras que describen esta desigualdad: más paro, analfabetismo, viviendas en mal estado y problemas de seguridad en Sevilla.
Son solo algunos de los problemas que denuncia a nivel global la ONU: crecimiento económico que no beneficia por igual a todos (el 10% más rico se queda hasta con el 40% del ingreso mundial total); dificultad en el acceso a los servicios sanitarios y educativos; es un obstáculo para la paz y los derechos humanos y una amenaza al desarrollo económico, y tiene un mayor impacto en los grupos más vulnerables, jóvenes, mujeres, inmigrantes y discapacitados (tres de cada diez no tienen empleo).
La ONU propone reducir la desigualdad de ingresos y de oportunidades entre y dentro de los países con una redistribución justa de la riqueza y con un crecimiento inclusivo en la dimensión social, ambiental y económica. En el capítulo de las personas, garantizar el acceso para todos a un trabajo digno y a los servicios básicos.
En España, donde el 1% más rico se hizo con el 40% de toda la riqueza en 2016-17 (informe de Oxfam ¿Realidad o ficción? La recuperación económica, en manos de una minoría), somos el cuarto país más desigual de toda la UE, continúan produciéndose importantes diferencias entre comunidades autónomas.
En opinión de los expertos, habría que empezar por dos aspectos: llevar la recuperación económica producida tras la crisis a todos, ya que ha favorecido cuatro veces más a los más ricos que a los más pobres (informe de Oxfam), y equilibrar un crecimiento que se concentra en el triángulo formado por Madrid, Barcelona y País Vasco y algunas zonas de litoral.
El profesor de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid Rafael Feito, cree que para reducir la desigualdad es básico “la redistribución equitativa de la renta, subiendo los impuestos”, más becas y buenos sistemas de salud y educación.
Feito opina que permitir que un 1% tenga tanta riqueza es “nocivo para la democracia”, ya que le permite influir de una “manera desproporcionada y desmedida en la conformación política de la sociedad”.
Las cifras
10% más rico se queda hasta con el 40% del ingreso total mundial.
20.699 euros separan a Pozuelo (Madrid) del barrio sevillano del Polígono Sur en renta anual por habitante.
Desde la ONG Red Europea de Lucha Contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN-ES), su director, Carlos Susías, ve necesario “una estrategia global, que pasa por una justicia fiscal más redistributiva, subiendo los impuestos directos y los de acumulación de capital (patrimonio, sucesiones…) y bajando los indirectos”, además de unos buenos sistemas de protección social” como la sanidad, la educación o el acceso a la vivienda.
Por lo que respecta a la situación en el mundo y al impacto que el comercio internacional tiene en el mantenimiento de las desigualdades, la ONU destaca un dato: entre 2010 y 2016 un 64,4% de países en desarrollo pudieron exportar sin aranceles, un incremento del 20%. No obstante, la guerra comercial entre EE UU y China y el crecimiento del proteccionismo en otros países (Rusia, India y Brasil) suponen un factor negativo.
Esta incertidumbre genera, según Andrés Gómez, director internacional del área universitaria de ESIC, un proceso llamado “slowbalisation” (globalización lenta). Las empresas “limitan su presencia en mercados más alejados y centran su actividad en los más cercanos”. La OMC prevé una caída del 0,4% en 2019 (2,6% frente al 3% de 2018).
Federico Steinberg, investigador principal en economía y comercio internacional del Real Instituto Elcano, señala tres situaciones donde los países ricos son más proteccionistas y hay más desigualdad: “En materia agrícola (perjudica a países de América del Sur), con picos arancelarios en productos específicos (leche en polvo en Europa o arroz en Japón) y un producto con valor añadido (Suiza y el cacao)”.
Steinberg señala que, aunque el comercio internacional puede aumentar las desigualdades, “ya que genera ganadores y perdedores, con un aumento de la renta de algunos y el descenso en la de otros”, con “moderación, cautela y a medio y largo plazo es positivo para el desarrollo”.
Educar y trabajar por la integración
Jorge Rodríguez tiene 27 años y síndrome de Asperger. Eso no le impide participar con otros compañeros y a veces dirigir el programa de radio Gigantes, que se emite en Radio Vallekas los martes de 10 a 11 (podcasts en www.radiovallekas.org y www.fundacionadecco.org) gracias a la Fundación Adecco.
Además, Jorge ha participado en diferentes talleres y en un curso de capacitación profesional. “Este verano he hecho prácticas de administrativo en la escuela Afinarte”, explica, por las que le han pagado. También está en varios procesos de selección en los que recibe la ayuda de la Fundación Adecco, “aunque todavía no me han cogido en ninguno”, dice.
Es una de las miles de personas que han pasado por el programa Empleo para todos que esta fundación creó hace 15 años, y que ayuda a encontrar trabajo a personas que tienen dificultades para hacerlo. “Trabajamos con cuatro grupos de personas”, explica Begoña Bravo, responsable del área de integración de Madrid de la Fundación. Son discapacitados, personas en riesgo de exclusión social, mayores de 45 años y mujeres solas con hijos a su cargo o víctimas de la violencia de género.
Se encargan de las personas “con un itinerario de empleo individual y un seguimiento, y con las empresas, haciendo una labor de sensibilización y un plan de integración”, cuenta Bravo. En 2018 lograron que 468 empresas contrataran a 3.792 discapacitados, 561 mujeres, 1.504 mayores de 45 años y 1.038 en riesgo de exclusión social.
El pasado mes de octubre, unos 40 trabajadores de la empresa HomeServe se levantaron muy temprano un sábado por la mañana en Madrid, se pusieron monos de trabajo y se convirtieron en voluntarios del programa Reparaciones solidarias. Con él ayudan desde 2010 a organizaciones y fundaciones a reparar o pintar sus hogares o centros de acogida. A lo largo de estos años han conseguido impactar positivamente en la vida de 5.000 personas.
Dirigidos por un maestro albañil y otro pintor, se presentaron en la Fundación Síndrome de Down de Madrid para acondicionar un local de esta asociación. Primero taparon unas grietas y repararon unas humedades. Después pintaron todo el espacio. Este será utilizado como centro ocupacional de empleo.
Acciona tiene un programa educativo para los estudiantes de primaria en las comunidades cercanas al parque eólico de Bannur (India). En colaboración con la ONG Pratham y desde 2018, quieren mejorar las habilidades en lectura y matemáticas de los alumnos de 6 y 7 años de 16 colegios, con un impacto sobre 1.394 alumnos con Upper primary.
Con Community based intervention, la multinacional española apoya a los niños introduciendo la tecnología con actividades realizadas con tabletas. La empresa se involucra en un diálogo permanente con las comunidades, profesores y alumnos para lograr cambios y mejoras en sus programas educativos.
Mercadona, dentro de su labor para promover los objetivos de desarrollo sostenible, trabaja con la Fundación Capacis en la inserción social y laboral de personas con discapacidad intelectual. Esta colaboración se centra en la ejecución de jardines verticales en algunos centros. Han participado en cinco de estas instalaciones y colaboran en el mantenimiento del ajardinamiento de otros ocho centros.
Algunas iniciativas de grandes empresas, ONG e instituciones en todos los ámbitos
Talleres y programas. Los supermercados Covirán están adaptando sus establecimientos para los clientes con necesidades especiales. Con la iniciativa Involucrados, Tendam Retail (la antigua Cortefiel), en colaboración con ONG, fundaciones y asociaciones, destina dinero a las mujeres embarazadas, víctimas del maltrato o con dependencia emocional. Los empleados de Cecabank tienen la oportunidad de presentar, mediante el programa Tú eliges, proyectos con un fin social, ambiental o cultural. Kutxabank desarrolla en centros educativos de secundaria el programa Finanzas para la vida. Santalucía da protagonismo a empleados y clientes con el plan Tú eliges a quién ayudamos. Viajes El Corte Inglés ha establecido una práctica llamada Adaptación de trabajadores especialmente sensibles.
Plan integral. Manos Unidas tiene un plan integral para reducir la desigualdad de la población vulnerable de Isla Tortuga (Haití). Acción Social ha redactado una publicación para guiar a estas organizaciones y alinear sus estrategias con el marco de la Agenda 2030 y su contribución a los ODS. La Confederación Salud Mental España elabora el Informe anual sobre el estado de los derechos humanos en salud mental para favorecer la integración de los disminuidos psíquicos.
Acceso a viviendas. La Sareb ha firmado convenios con autonomías y ayuntamientos para facilitar una casa a personas en situación de exclusión. El Consejo General de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales denuncia la pobreza y desigualdad en que viven miles de familias en España tras la crisis. La Confederación de Empresarios de Bizkaia (Cebek) está promoviendo la participación de las empresas de la provincia vasca en el logro de los ODS. Y Barcelona de Servicios Municipales diseña un plan anual de acciones solidarias en el ámbito de la pobreza y de la exclusión social.