_
_
_
_

Así es el corazón de la nueva Mercadona online

La cadena de supermercados concentra en 13.000 metros cuadrados en Valencia el centro de operaciones de su nueva web

Fernando Sanz Sánchez de Rojas

Son 13.000 metros cuadrados de superficie y en ellos se concentran estanterías ordenadores, robots, empleados de reposición, de picking, de reparto, informáticos, programadores de software, analistas, fotógrafos para inmortalizar la imagen de los productos y un largo etcétera hasta un total de 160. Todos ellos son los pioneros de la apuesta que Mercadona puso en marcha, liderada por Juana Roig, hija del presidente de la compañía, Juan Roig, hace ochos meses para cambiar el concepto de la venta en línea del líder de la distribución alimentaria en España.

Cuando empezó daba servicio a 14 códigos postales de Valencia hoy ya es capaz de llevar la compra a los hogares de toda Valencia y de 95 localidades cercanas. Todas ellas situados en un radio de 40 kilómetros, distancia que permite optimizar el tiempo de transporte de las compras a no mas de 40 minutos desde 'la colmena'.

Más información
Mercadona invertirá 2.300 millones este año tras ganar 593 millones en 2018, un 84% más
Mercadona invierte 29 millones en renovar los uniformes de sus trabajadores de tienda
Los 'numeritos' y las letras de Juan Roig

El diseño inicial parte de una `tienda' dividida en diez pasillos de alimentación seca con estanterías a uno y otro lado, divididas a su vez en 27 módulos de 4 niveles cada uno. En ellos se concentra todo lo que puedes encontrar en un Mercadona normal con la única peculiaridad que los productos no están ordenados ni por familias ni por marcas, ni por tipología. Todo parte de un desorden absoluto y no convencional, solo optimizado por los ordenadores, para conformar un orden final y evitar que productos muy parecidos colocados uno al lado de otro puedan originar errores en los empleados que han de cogerlos y conformar el pedido, según aseguran los responsables del funcionamiento de la colmena.

Con su diseño actual y utilizando tanto hardware como software diseñado exprofeso e internamente por Mercadona un empleado puede preparar en una hora seis pedidos simultáneos equipado con un artefacto llamado anillo, que viene a ser un lector de código de barras que va guiando al empleado por la maraña de pasillos y módulos, confirmando paso a paso que los productos que va escogiendo se adecuan al pedido online que están preparando.

El modelo actual en plena actividad, pero siempre en fase de investigación y testeo, establece que los pedidos siempre se servirán a partir de las siete de la mañana del día siguiente y en franjas horarias de una hora hasta las diez de la noche. Los frescos, verduras, carnes y pescados, llegan la noche antes del reparto a las tres de la mañana a 'la colmena' para así asegurar que no hay un excesivo margen de tiempo desde el momento que se prepara el pedido hasta que se sirve.

Con todo ello Mercadona pretende hacer frente a las grandes multinacionales de la distribución organizada y reorientar e inventar un modelo de negocio que hace solo un par de años el presidente de la compañía reconoció que solo le aportaba poco mas del 1% de las ventas y le ocasionaba unos 30 millones de euros de pérdidas anuales. Ahora con la optimización de 'la colmena', un solo empleado es capaz de preparar a la hora seis pedidos por los que la empresa cobra, como tasa de reparto un total de 7,21 euros....

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Sobre la firma

Fernando Sanz Sánchez de Rojas
(Madrid, 1964). Estudió periodismo en Madrid. Comenzó su trayectoria profesional en la revista Aral. En 1991 se incorporó como redactor a la sección de Empresas de Cinco Días. Ha sido redactor jefe de la sección de Empresas, jefe de la sección de Especiales y actualmente redactor jefe de la edición impresa del diario.

Más información

Archivado En

_
_