Que los árboles no impidan ver el bosque de la digitalización
Más allá de las cifras de los Presupuestos, es indispensable la coordinación público-privada
Como todos los grandes proyectos que se asumen en las empresas, o en nuestra vida personal, éstos necesitan de una visión clara del objetivo a conseguir para poder diseñar diferentes alternativas o caminos para llevarlos a cabo. Esto es precisamente lo que se echa en falta en los Presupuestos Generales presentados el lunes. Más allá del aumento de la inversión en Investigación, Desarrollo e Innovación civil (I+D+i) en un 6,2% hasta alcanzar los 6.372 millones de euros, ya de por sí una buena noticia, faltaría enmarcar todos estos programas y proyectos a los que se va a financiar con esta partida en una visión y una estrategia general de hacia dónde debe avanzar España en la implantación de una economía digital más productiva y eficiente.
En este sentido, se han dado los primeros pasos a finales de año con el planteamiento de los ejes sobre los que se va a sustentar la nueva estrategia española de ciencia, tecnología e innovación: Implementación del Programa Marco de I+D+I de la UE Horizonte Europa; Economía Azul; e Inteligencia Artificial. Estos pilares son los que deben plasmarse, no solo en la actuación del Ministerio de Pedro Duque, si no en un verdadero plan transversal que aglutine y coordine la política TIC en materia industrial, económica, de empleo o sanidad, por citar solo algunas.
Además de esta visión general, es bueno señalar el aumento de la partida presupuestaria en Agenda Digital hasta los 701 millones de euros. Un programa que si bien ha conseguido grandes avances en el despliegue de redes de telecomunicaciones–España es ya el país con un mayor despliegue de fibra en la Unión Europea y podría tener el 100% de cobertura en 2020, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC); o en la implantación de la administración electrónica, que ha redundado en beneficios directos para el ciudadano: comenzó a elaborarse en 2012 cuando había elementos como la inteligencia artificial que aún se mantenían únicamente en las películas de ciencia ficción. En este aspecto la inteligencia artificial, el big data y el internet de las cosas deben marcar el futuro de la innovación TIC en España. De hecho, recientemente la UE ha presentado el plan de Inteligencia Artificial señalando así su carácter estratégico, y con el objetivo de que Europa lidere este nuevo driver de la digitalización bajo tres premisas: una tecnología puntera, ética y segura.
Un futuro en el que, más allá de las cifras, es indispensable la coordinación entre el sector público y privado para conseguir avanzar e innovar en la digitalización. Tenemos claro que el futuro es digital, pero hace falta trazar el camino con una visión a medio y largo plazo que nos sitúe en la primera liga de las economías mundiales.
Osmar Polo es managing director de T-Systems Iberia