Unicaja gana 189 millones hasta junio, el 32,6 % más
El Grupo Unicaja Banco ha obtenido en el primer semestre del año un resultado consolidado de 189 millones de euros, frente a los 142,6 millones del mismo periodo de 2014 (excluido el efecto contable del “badwill” por la adquisición de Banco CEISS), lo que supone un incremento del 32,6 por ciento.
El crecimiento de la cifra de beneficios ha descansado en la obtención de unos ingresos netos por intereses y comisiones de 475 millones de euros, 52,5 millones más que en junio de 2014, ha informado hoy Unicaja Banco en un comunicado.
Asimismo, la gestión activa de las inversiones en renta fija ha permitido que, pese a las oscilaciones de los mercados, el Grupo Unicaja Banco haya logrado una significativa cifra de resultados por operaciones financieras (295 millones de euros).
Las anteriores cifras de ingresos, junto con los resultados procedentes de inversiones en acciones y participaciones (33 millones de euros) y el neto de otros productos y cargas de explotación (40 millones de euros), principalmente por acuerdos de “outsourcing”, determinan la obtención de un margen bruto de 845 millones, un 27 por ciento más que en el primer semestre de 2014.
Los recursos administrados (sin ajustes por valoración) se elevan a 63.719 millones y el grueso de los recursos administrados se materializa en depósitos de la clientela (50.423 millones), de los que 18.524 millones son depósitos a la vista de clientes del sector privado; 23.996 millones, depósitos a plazo, y 6.047 millones, cesiones temporales de activos.
Los recursos gestionados mediante instrumentos fuera de balance se elevan a 11.189 millones, constituidos principalmente por recursos de clientes captados mediante fondos de inversión (5.037 millones), fondos de pensiones (2.128 millones) y seguros de ahorro (3.183 millones).
Atendiendo al origen de los recursos, el 78 por ciento (49.608 millones de euros) corresponde a negocio bancario con clientes, en tanto que el 22 por ciento restante (14.111 millones) lo constituyen los fondos captados en mercados mayoristas mediante emisiones o cesiones temporales de activos.
En cuanto a concesión de crédito a pymes y hogares, Grupo Unicaja Banco ha abierto nuevas operaciones por más de 1.200 millones de euros, un 23,7 por ciento más que en el mismo período de 2014.
El crédito a la clientela (sin ajustes por valoración) asciende a 36.507 millones de euros, y el mayor peso dentro de la cartera crediticia corresponde al crédito al sector privado con garantía real, que representa el 60 por ciento del crédito total.
El Grupo, aún sin haber acudido a los mercados de capitales para la obtención de capital, mantiene unos elevados niveles de solvencia, con una cifra de capital de primer nivel (CET1) de 3.438 millones de euros (un 99 por ciento del total de recursos propios), que se traduce en una ratio del 11,85 por ciento, mientras que la ratio de capital total se sitúa en el 12,01 por ciento.
Al cierre del primer semestre de 2015, el volumen de activos líquidos y descontables en el Banco Central Europeo (BCE) (neto de los utilizados) suponía el 21 por ciento del total del activo consolidado.
La política de contención y racionalización ha permitido una reducción de los gastos de explotación del 3 por ciento sobre el agregado de Unicaja Banco y Banco CEISS, y la ratio de eficiencia se ha situado en el 41,8 por ciento.
El esfuerzo de saneamiento de los riesgos en los ejercicios precedentes y la inflexión en la evolución de los impagos desde la segunda mitad de 2014 han permitido reducir las cifras destinadas a la cobertura de pérdidas por deterioro, que se sitúan al primer semestre de 2015 en 93 millones de euros, un 23,3 por ciento menos que en el primer semestre de 2014.
En este primer semestre, el saldo de los activos dudosos del Grupo se ha reducido en 726 millones de euros, con descensos tanto en Unicaja Banco como en Banco CEISS, lo que ha propiciado una mejora de la tasa de morosidad del agregado de Unicaja Banco y Banco CEISS hasta el 11,2 por ciento, en línea con el conjunto del sector.
Además, el mantenimiento de una rigurosa política de saneamientos se refleja en el nivel de cobertura de los riesgos dudosos, que se sitúa en el 60,9 por ciento, uno de los más elevados del sistema (56 por ciento como media del sector en abril).