La necesidad de seguir reformando
Varios empresarios del Consejo para la Competitividad elogiaron ayer la política del Gobierno, que ha logrado devolver el crecimiento a la actividad y recuperar la creación de empleo, tras haber estabilizado las finanzas públicas, recuperado la financiación en los mercados y buena parte de la competitividad perdida por las fuertes elevaciones de costes y precios de los últimos años. La economía no tiene hoy nada que ver con la situación de hace dos años, cuando se creó este selecto grupo empresarial del más alto nivel, que representa a las grandes empresas nacionales y que aglutina prácticamente a todos los sectores de la actividad.
Estos progresos no han sido gratis. La sociedad ha pagado un elevado coste de recortes de gastos de servicios públicos, así como de inversión; y no habrían sido posibles sin una apuesta decidida por reformas de los mercados de bienes y servicios y del sistema financiero. Pero como queda mucho camino para restablecerse de los daños de la crisis, el itinerario reformista no puede ceder. Tal ha sido el mensaje del empresariado al presidente Rajoy, que se ha comprometido a mantenerlo en todas las líneas. Solo falta conjurar la pasividad que en esta materia suele generar un proceso electoral que en España arranca este mes y que durará año y medio.