La auditoría interna se afianza en el seno de las empresas
El 78% de las grandes empresas españolas cuenta con un comité de auditoría y una dirección de auditoría interna. Además, el tamaño de estos últimos departamentos ha crecido en los cuatro últimos años un 65%, pasando de 17 a 28 auditores de media. Los datos suponen, según KPMG, el afianzamiento de esta función dentro de las compañías.
Un fiel reflejo del afianzamiento del cambio cultural y el reforzamiento de la normativa sobre buen gobierno corporativo tanto a nivel nacional como internacional surgida en los últimos años". Así es como explican el intenso crecimiento de los departamentos de auditoría interna tanto entre las sociedades cotizadas como incluso en las que no están en Bolsa los autores del tercer estudio de la situación de la auditoría interna en España, realizado para el Instituto de Auditores Internos por la firma de servicios profesionales KPMG.
Según el informe, basado en una encuesta realizada a finales del pasado año entre 121 directivos, el 78% de las empresas participantes cuenta con comité de auditoría y también con dirección de auditoría interna. De acuerdo con los estudios anteriores este porcentaje era del 65% en 2004 y del 30% en 2001. Los resultados son, con toda lógica, mejores en las sociedades cotizadas, ya que para cumplir con la Ley Financiera el 100% dispone de un comité de auditoría. Muchas de las no cotizadas cuentan también con ambos departamentos. "Parece que las empresas no cotizadas, a pesar de que no tienen la obligación de tener un comité de auditoría, como las que sí cotizan, se están contagiando de algunas prácticas de buen gobierno", señala Tomás López de la Torre, socio de KPMG en España.
Sin embargo, el informe muestra, junto con el importante crecimiento de este tipo de departamentos en el seno de las empresas, que aún existe un 6% de compañías cotizadas que no dispone de la función de auditoría interna y que, por tanto, como recuerda el socio de KPMG, incumplen la recomendación 47 del Código Unificado. "Esta circunstancia podría estar dificultando a los comités de auditoría de las sociedades el cumplimiento de sus responsabilidades legales de conocimiento del control interno y de los procesos de información financiera de la organización", explica López de la Torre.
Entre los resultados del informe destaca que el 82% de las direcciones de auditoría interna dependen jerárquica y funcionalmente de los órganos de gobierno o los máximos ejecutivos. Pero los autores del informe señalan que "resulta llamativo" que la práctica de depender de la alta dirección de la empresa aún no sea una realidad en el 18% de las participantes en el estudio o que no dependa funcionalmente del comité de auditoría en el 22% de las empresas cotizadas en España. En informe también refleja que la comunicación del auditor interno resulta ser bastante fluida con los órganos de los que depende. La gran mayoría de los departamentos de auditoría se reúne con sus superiores jerárquicos una media superior a las cinco veces al año.
El 57% de los participantes cree que el papel de auditoría interna de su empresa ha sido desarrollado y definido como parte integrante del gobierno de la misma. No obstante, el informe critica que exista aún un 14% de empresas en las que no se considera que la función de auditoría interna forme parte de la estructura de gobierno corporativo.
Recomendación
La recomendación 47 del Código Unificado anima a que las sociedades cotizadas dispongan de una función de auditoría interna que, bajo la supervisión del comité de auditoría, vele por el buen funcionamiento de los sistemas de información y control interno.