Las reconversiones obligaron a repensar el tejido económico
La positiva transformación económico-empresarial que ha experimentado el País Vasco en los últimos 30 años no se puede entender sin una actuación público-privada que ha llevado a instituciones y empresas a trabajar conjuntamente para superar la reconversión industrial de los años ochenta que azotó especialmente a Euskadi, donde la industria siderometalúrgica y naval tenía un fuerte peso. Además, la comunidad vasca, en virtud de los acuerdos sellados con la Administración central del Estado, una vez acabado el proceso de transición democrático, recuperó el Concierto Económico, el sistema que regula las relaciones tributarias entre Euskadi y el Estado, y que le ha servido de herramienta para articular políticas fiscales favorables, aunque algunas de ellas estén todavía cuestionadas por los tribunales.
El tránsito de una industria de mano de obra intensiva hacia un enjambre empresarial tejido fundamentalmente por pequeñas y medianas empresas y con un incremento porcentual del sector servicios no ha sido sencillo. Los años en que la tasa de paro en Euskadi estaba por encima de la media española, el crecimiento del PIB se situaba por debajo y la actividad extorsionadora de ETA se encontraba en pleno apogeo están todavía instalados en la memoria reciente de los vascos. Sin embargo, han visto cómo la situación ha sufrido un profundo y positivo cambio. La economía vasca en la actualidad lleva cuatro años casi a pleno empleo y su tasa de incremento del PIB supera al conjunto de la media española y europea. Desgraciadamente, la lacra de la banda terrorista, a pesar del rechazo social, permanece todavía, aunque con menor intensidad.
José Guillermo Zubia, secretario general de la patronal vasca Confebask, indica que la tenacidad, el espíritu emprendedor y una acertada política institucional de apoyo permitió, tras el primer proceso de reconversión, el de los años ochenta, 'repensar el tejido económico vasco'.
Futuro
Se habían puesto los cimientos para el cambio, pero es en el periodo de crisis, entre 1991 y 1993, que afecta a todos los sectores, cuando se apuntala. Con esta negativa experiencia, las empresas dieron un paso hacia la modernidad y el futuro con la aplicación de políticas en materia de calidad y gestión, y la puesta en marcha de inversiones adecuadas para ganar músculo.
Además, permitió la aparición de sociedades punteras en sectores como la aeronáutica, por ejemplo. Zubia apunta que se ha realizado recientemente una nueva transformación para crear un tejido industrial que se debe cultivar, 'porque lo de hoy no servirá para mañana'.
Tributos. El Concierto, herramienta del cambio
La capacidad de autogobierno en materia fiscal y tributaria se ha demostrado como una de las herramientas fundamentales para dinamizar el cambio económico-empresarial que se ha producido en el País Vasco. La reactivación del Concierto Económico, en cuya comisión negociadora participó el entonces diputado de Hacienda Pedro Luis Uriarte, ha permitido contar con unos recursos financieros de calado. Este sistema, que regula las relaciones tributarias y fiscales entre el País Vasco y la Administración central, supone que se aporte al Estado el 6,24% de los impuestos por las transferencias no asumidas. Esta capacidad de gestión de los tributos ha facilitado, entre otros, el camino de la recuperación industrial y la financiación de importantes infraestructuras en una comunidad cuya renta es superior a la media europea.
Datos
Habitantes: 2.141.860PIB per cápita: 39.599Superficie: 7.235 km2I+D/PIB: 1,60%Extranjeros: 4,6%Fuente: INE