El FMI descarta la recesión en EEUU, pero recorta el crecimiento mundial
El FMI afirma que la economía mundial se ha desacelerado notablemente en el último trimestre de 2007 debido a las fuertes perturbaciones de los mercados financieros. El Fondo ha actualizado sus previsiones y concluye que la economía global crecerá a un ritmo del 4,1% en 2008, frente al 4,4% calculado en octubre. EE UU es el epicentro de la crisis y su crecimiento previsto pasará del 2,2% al 1,5%, pero el FMI lo excluye de una recesión.
El analista jefe del FMI, Simon Johnson, explicó ayer en rueda de prensa que para los cálculos de EE UU se ha dado por su puesto que habrá un estímulo fiscal similar al aprobado por la Cámara de Representantes (devoluciones fiscales y deducciones a la inversión empresarial). Johnson espera que este estímulo tenga efecto en el segundo semestre y calcula que podría sumar al crecimiento entre 0,2 y 0,3 puntos porcentuales. En todo momento tanto Johnson como Jaime Caruana, director del departamento monetario y mercados, evitaron la palabra recesión. 'Es una desaceleración significativa y global' dijo el analista jefe.
El FMI ha cambiado el modelo usado para medir el crecimiento (incorpora ahora la paridad de poder compra). Ello ha provocado una reducción de medio punto respecto al crecimiento registrado desde 2005. Con esta premisa, la reducción en el crecimiento para este año es de 0,3 puntos porcentuales (del 4,4% al 4,1%).
Para Johnson, las dificultades nacidas de la crisis subprime americana se han profundizado. Y explicó, 'la gran historia es la vivienda de EE UU'. En este sentido, Europa se ha visto empujada a esta crisis por los vínculos financieros y las relaciones comerciales con EE UU aunque éstas juegan ahora un papel menor que antes. Por eso, Europa no está tan afectada aunque la desaceleración será parecida en todos los países. 'No obstante, es difícil prever ahora a qué países va a afectar más', matizó. Con respecto al mercado de la vivienda en España, Johnson dijo que su evolución depende de la disponibilidad del crédito.
Otra fuente de preocupación es la inflación. Para el FMI, el BCE ha hecho un buen papel por proveer liquidez y transmitir la necesidad de vigilar los precios. En el caso de la Fed, creen que sus medidas serán efectivas aunque no tan rápido como en el pasado. ' La inflación es clave. No es fácil ser banquero central ahora', dijo el economista. Johnson dijo que los estímulos fiscales no son buenos en todos los países. 'Han de ser una reserva. Sólo deben usarse si la política monetaria tiene efecto retardado, fiscalmente es posible y no hay inflación. Si la hay, no es buena idea'.
Transparencia para equilibrar los mercados
Las condiciones de los mercados financieros han empeorado desde octubre. El problema, según Jaime Caruana, es que se han propagado las secuelas de la crisis de las hipotecas de alto riesgo.Los problemas son ya más generalizados porque es complicado valorar productos complejos, se ha deteriorado el crédito, hay mucha desconfianza y presiones sobre los balances.Caruana considera que para vencer esta situación hay que restablecer la confianza en el mercado interbancario con mayor transparencia en los balances. Además hay que capitalizar a las instituciones para reconstruir su capacidad crediticia. Preguntado por el escándalo de SocGen, Caruana se mostró partidario de una mayor regulación en ciertos mercados y más supervisión del riesgo.Con respecto al último frente abierto, los monolines, Caruana dijo que para los bancos será más barato recapitalizarlos que tener que ajustar más sus balances si estas aseguradores pierden su estatus crediticio.