El Mégane y Nissan impulsan un 43% el beneficio de Renault
Dos de las apuestas de Renault en los últimos noventa, el Mégane y la compra del 44% de Nissan, han resultado ser un éxito. Entre ambos impulsaron un 43% el beneficio de 2004, hasta 3.551 millones.
Este es el mayor beneficio cosechado por la compañía francesa en sus 107 años de historia. 'Estos resultados nos posicionan como el mejor fabricante generalista europeo', aseguró ayer Louis Schweitzer, en los que suponen sus últimos resultados anuales al frente de la compañía. El actual presidente de Nissan, Carlos Ghosn, asumirá la presidencia del grupo el próximo mes de abril.
Precisamente, la contribución de la compañía japonesa que dirige el directivo franco-brasileño-libanés ha sido clave en la evolución de los resultados del grupo desde su entrada con el 44% del capital. De los 3.551 millones que ganó el grupo del rombo, 2.199 millones provinieron de la participada -1.767 millones de euros correspondientes a su ejercicio de 2003 y otros 432 millones del trimestre comprendido entre octubre y diciembre de 2003-, según los datos recogidos en el informe de resultados emitido ayer. Los resultados de Renault en 2004 incluyen una carga extraordinaria por importe de 175 millones de euros correspondiente a los dispositivos de cese anticipado de trabajadores en Francia y España.
Las otras marcas del grupo Renault, en particular AB Volvo, contribuyeron a los beneficios en 253 millones de euros, frente a 155 millones un año antes.
Estas contribuciones permitieron que la firma mejorara su negocio en un año marcado por las dificultades para la industria. La facturación llegó hasta los 40.715 millones, lo que se traduce en una progresión del 8,5% en comparación con el ejercicio precedente. De este importe, la división automovilística facturó 38.645 millones, un 8,8% más, La financiera, por su parte, contribuyó con 2.070 millones, el 4%.
Caída del beneficio en 2005
En conjunto, las ventas de coches de la compañía totalizaron 2,48 millones de unidades durante el pasado año, lo que supone un incremento del 4,2%. La cuota de penetración resultante en el mercado mundial se mantuvo en el 4,1%. En Europa occidental, su mercado principal, la empresa se consolidó como líder con 1,8 millones de matriculaciones, Renault ha sido la marca más vendida el pasado año, si bien su cuota de mercado se desinfló tres décimas hasta el 10,6% del total.
En esta evolución de las ventas, el papel del modelo estrella de Renault, el Mégane, ha cobrado más importancia. Las ventas de este coche crecieron el 18,3%, hasta 702.000 unidades. Uno de cada 20 coches que se vendieron en el continente, fue un Mégane.
Sin embargo, la compañía del rombo se mostró pesimista a la hora de lanzar previsiones para 2005. Renault prevé una caída del beneficio operativo para este año, que se verá lastrado por la discreta evolución del mercado y acentuado por los mayores costes derivados del alza del precio del acero.
Alza del crudo
El alza del precio del metal y de otras materias primas podrá impactar en las cuentas de Renault hasta en 200 millones de euros, según informó ayer el responsable financiero de la corporación, Thierry Moulonguet. Así, la coyuntura de mercado 'poco propicia' y el aumento de los precios de las materias primas afectará a su margen operacional, que se situará por encima del 4% de la cifra de negocio.
En lo que respecta a la evolución del las ventas, Renault considera que el mercado del automóvil en 2005 se mantendrá 'estable' en Europa y crecerá levemente en los países en los que el grupo está implantado, a excepción de Turquía.
En este contexto, la compañía espera beneficiarse de la renovación de su gama, con modelos como el Modus, que se fabrica en la planta vallisoletana del grupo, el nuevo Clio (que llegará en el segundo semestre) o el Logan, que se empezará a producir en Rusia, Marruecos y Colombia.