Alternativas con opciones
En muchas ocasiones hemos explicado estrategias encaminadas a orientar en las diferentes combinaciones que se pueden efectuar con derivados. Pero puede haber veces que lo mejor para el inversor no sea esperar al vencimiento, sino que es más ventajoso salir de ella antes. Es probable que para muchos sean desconocidas las tres maneras que existen de salir de una posición con opciones. Cuando tenemos una opción existen tres alternativas que se pueden usar para lograr beneficios o evitar pérdidas: la opción se puede ejercitar, compensarla con otra opción o dejarla expirar sin valor.
Si se ejercita una opción que hemos comprado, elegimos comprar (opciones call) o vender (opciones put) el activo subyacente al precio de ejercicio o strike. Sólo los compradores de opciones tienen derecho o la posibilidad de ejercitar una opción. Los vendedores de opciones son los que han vendido el derecho a los tenedores de opciones. Como se sabe, el comprador de una call ejercitará su derecho si el precio del subyacente es mayor al precio de ejercicio y si ha comprado una put, entonces elegirá ejercitar si el precio de ejercicio (precio al que tiene derecho a vender) es superior al precio del subyacente. El comprador de una opción no sólo debe considerar el precio de mercado y el precio de ejercicio, sino que debe contar con que pagó una prima por el derecho y los beneficios conseguidos deben compensar este coste.
La segunda manera de salir de una estrategia es compensar la posición con otra opción. Esto consiste en deshacer la transacción original. El comprador de una call, para compensar esta posición y salir de la estrategia tendrá que vender una call con el mismo precio de ejercicio y vencimiento. De la misma manera, el comprador de una put tendrá que vender otra put con las mismas características para dar por terminada la estrategia. El hecho de poder deshacer las posiciones antes de vencimiento tiene importantes implicaciones para los que operan con opciones, sobre todo para los compradores. Para los que compran opciones out of the money y el precio del subyacente comienza a jugar en su favor pueden obtener más rentabilidad deshaciendo las posiciones durante la vida de la opción que si esperan a vencimiento. Por ejemplo, la call sobre Telefónica con vencimiento 20 de junio y precio de ejercicio 9 euros vale 0,53 euros por acción con el precio de Telefónica a 8,5 euros. Si el precio de Telefónica sube hasta 9 euros, justo en el momento que la opción podría empezar a ser ejercitada, la opción vale 0,72 euros por acción, un 38,48% más que cuando se compró. Así que al inversor le puede compensar más deshacer la posición que ejercitarla porque vendiendo la prima consigue un 38,48% mientras que si ejercita consigue un 5,88%, que es la revalorización del subyacente.
Cuando una opción no ha sido compensada ni ejercitada se dice que la opción termina sin valor, esto es, se deja vencer sin ejercitar. Al vendedor de opciones, como el beneficio máximo que puede conseguir es el importe de la prima, le interesa que la opción termine sin valor, que el comprador no la ejercite. Si termina sin valor, el vendedor consigue mantener el crédito conseguido por la prima de la opción al inicio de la estrategia. Como al vendedor de opciones siempre le interesará que la opción que ha vendido termine sin ejercerse, la pérdida de valor que experimentan las opciones con el paso del tiempo es un aliado de los vendedores de opciones. El valor de una opción es la suma de dos conceptos: valor intrínseco (importe que se recibe si la opción es ejercitada) y valor temporal o precio del tiempo, por lo que a mayor tiempo al vencimiento, mayor es el valor temporal, pero conforme nos acercamos al vencimiento, disminuye, de ahí que favorezca a los vendedores de opciones. El comprador que ha pagado la prima no la recuperará incluso si la deja vencer.
Aunque no lo hemos recordado, hay que tener en cuenta que las opciones sobre acciones son de tipo americano, esto es, se pueden ejercitar en cualquier momento, mientras que las opciones sobre índices son de ejercicio europeo, sólo se ejercitan al vencimiento. Que sean de uno u otro tipo puede condicionar al inversor a la hora de abandonar la estrategia.
Las bajadas del contado impulsan las 'puts'
Una semana más, las pérdidas han sido las protagonistas en el mercado de contado. La posibilidad de que el conflicto contra Irak esté más cerca, además de la bajada de los tipos de interés en la zona euro -de 0,25 puntos hasta el 2,5%, insuficiente según el mercado- han provocado un descenso tras otro que ha llevado al Ibex a cerrar la peor semana del año con una caída del 4,71%.En este contexto, en el que la práctica totalidad de los miembros del índice ha cerrado con retrocesos, los más acertados con derivados han sido los inversores que apostaron por un mercado bajista a través de las opciones de venta. Cabe destacar la revalorización que ha registrado la put sobre el SCH. Mientras el subyacente ha cedido un 8,40% en la semana, la put sobre la acción de la entidad bancaria ha ganado un 103,45%. No obstante, éstas no han sido las únicas revalorizaciones que han superado el 100%.Los retrocesos que han sufrido las acciones de Telefónica y su filial de móviles han propiciado que las opciones de venta se hayan revalorizado un 100% y un 102,63%, respectivamente. La prima de la put sobre Telefónica ha pasado de valer 0,25 a 0,50 euros, en las últimas cinco jornadas, mientras que el derecho de la put sobre Telefónica Móviles ha pasado de 0,38 a 0,77 euros. Todo ello, mientras en el contado ambos subyacentes se han dejado más del 7% en la semana. En las opciones de compra, pocos han sido los que han podido materializar beneficios. Tan sólo el ascenso de Indra en la semana (5,78%) ha posibilitado que los que confiaron en el buen comportamiento del subyacente a través de las calls hayan logrado una ganancia del 75%.