La banca cierra un conflicto de 15 años sobre las tarifas entre entidades
El acuerdo, que se definirá hoy en el grupo de trabajo en el que están presentes los principales bancos y cajas con la mediación del Banco de España, tendrá una traslación al cliente.
Tras 15 años de conflicto los cinco principales bancos españoles y el resto del sistema financiero han logrado alcanzar un acuerdo en materia de tarifas interbancarias, por el que se propone 'implicar un pago de la entidad presentadora a la receptora que cubre los gastos que esta última experimenta por gestionar la anotación del documento interbancario en la cuenta del cliente', según el preacuerdo alcanzado, en el que el Banco de España ha ejercido de mediador.
En este preacuerdo, que se elevará hoy a la comisión asesora encargada de negociar el pacto y por el que se creará un grupo de trabajo que actualice estas tarifas, se ha optado por que sea el 'sistema nacional de compensación electrónica (SNCE) el que defina un esquema multilateral para sus miembros'.
Hasta ahora las entidades mantenían acuerdos bilaterales por el envío de estas transferencias (como abono de efectos, letras, domiciliaciones, transferencias o cheques), pactos que se mantendrán, pero se abonaba un importe por el valor de las transferencias, en lugar de por el de los documentos remitidos, algo que ahora se elimina.
Además, las entidades de menor tamaño se quejaban de que estas tarifas bilaterales se fijaban unilateralmente por el SCH, el BBVA y el Popular, que, a su vez, pagaban menos a pesar de que son las que más transferencias realizan y las que más oficinas poseen.
Tras el acuerdo alcanzado ahora, las nuevas tarifas se basarán en 'el coste unitario estimado' que la entidad que presente la transferencia genera para las entidades receptoras, independientemente del número de operaciones.
Así, las tarifas serán voluntarias y operarán 'por defecto', es decir, por libre acuerdo de dos entidades. Además, el criterio de 'no concurrencia en plaza', es decir, la no presencia de una entidad en una zona determinada, desaparece definitivamente. æpermil;ste era uno de los puntos principales del desacuerdo existente entre las grandes entidades y las más pequeñas -que incluso llegó a Bruselas en 1988-, puesto que las de menor tamaño y con menos oficinas se quejaban del abuso de los grandes. Hasta ahora, si una entidad realizaba una operación en una zona donde tenía oficina, la tarifa era fija y de bajo importe, mientras que la comisión era un porcentaje del importe de la transferencia, con un máximo y un mínimo que podría llegar a los 300 euros, si no tenía presencia allí. Unido a lo anterior, otro aspecto importante es el relativo a la no fijación de una tarifa basada en el valor del documento presentado por el cliente para su transferencia. Así, a partir de que entre en vigor, el pago estará determinado por el número de documentos presentados independientemente de su valor.
Para lograr un ajuste gradual de estas tarifas, hasta llegar a una definitiva, se establece una fase transitoria. El primer periodo se ha fijado entre el 1 de abril de 2003 y el 31 de diciembre de 2004, en el que funcionarán las siguientes tarifas: hasta cinco millones de documentos, se abonará seis céntimos si la transferencia se realiza de forma automática, y nueve si es manual. A partir de cinco millones y hasta 10 millones de documentos la tarifa será de cinco céntimos, hasta 15 millones baja a cuatro céntimos y desde 15 millones el pago será de tres céntimos.
El cómputo se calculará a nivel consolidado y se tendrán en cuenta los documentos de 2002. A partir del 1 de junio de 2004 el grupo de trabajo, formado ahora por el SCH, BBVA, Popular, Sabadell, Banesto, Bankinter, Pastor, Barclays, La Caixa, Caja Madrid, Caixa Catalunya, BBK, Caja Duero, la CECA, Caja Murcia y la Unacc, volverá a reunirse hasta el 31 octubre. El objetivo será conseguir una tarifa 'cuasiplana' cercana a los criterios de la zona euro.
En el pacto se establece también que si se llega a una solución definitiva multilateral en la zona euro, se utilizará a partir de enero de 2005 y no habrá periodo adicional.
De hecho, y como medida previsora, se ha establecido un periodo adicional desde enero a junio de 2005 durante el cual las tarifas vigentes se establecen en un máximo de cinco a tres céntimos, dependiendo del número de documentos remitidos (de cinco millones a 10 y de 10 en adelante) en el caso de utilizar un sistema automático y de 10 céntimos para todos los documentos en caso manual. Aquí desaparece el concepto de grupo consolidado para pasar al de entidad individual.