Madrid, el nuevo Miami de la banca privada: las entidades se vuelcan con los ricos latinoamericanos
Firmas como iCapital, Abante, Diaphanum o Finaccess han formado equipos específicos para atender esta nueva línea de negocio
Madrid se ha convertido en la nueva meca de las fortunas latinoamericanas. En los acomodados barrios de Almagro, Justicia, Jerónimos y, sobre todo, Salamanca, cada vez se oyen más acentos mexicanos, venezolanos o peruanos. Personas que llegaron como turistas, enviaron a sus hijos a cursar postgrados, adquirieron una vivienda y, ya más arraigados, comienzan a realizar inversiones empresariales y financieras. “Es una ola que no para de crecer”, asegura Joaquín Casasús, director general de la firma de banca privada Abante. Los asesores financieros monitorizan esta tendencia desde hace tiempo, y son muchos los que han movido ficha. Hay entidades españolas como iCapital o Diaphanum que han creado equipos especializados en Madrid para atender a estos clientes. Y también firmas de origen mexicano o peruano —como Finaccess, Alterna Inversiones o Creuza Capital—, que ya estaban en Miami y que ahora han decidido abrir oficina en España.
17 de octubre. Ocho y media de la tarde. En el salón de actos de la sede de Abante Asesores, justo delante de la Puerta de Alcalá, el expresidente de México, Felipe Calderón, presenta sus memorias Decisiones Difíciles (Debate, 2020) ante un aforo a reventar. Casasús ejerce de maestro de ceremonias, ante el presidente de Abante, Santiago Satrústegui, y una nutrida representación de la colonia mexicana de Madrid. En primera fila hay representantes de la Asociación Empresarial México-España. Después del evento, firma de libros y vino español. “Este tipo de actos son muy interesantes para nosotros, porque nos acercan a una comunidad que cada vez es más importante”. El directivo de Abante explica que llevan años viajando a México para estrechar lazos con otras firmas y despachos, para que sus clientes les tengan de referencia cuando se animen a dar el salto. “Para nosotros, los mexicanos son el perfil más habitual dentro de estos nuevos clientes latinoamericanos”, asegura. Además de esas redes más formales, el boca a boca es fundamental.
Las relaciones España-Latinoamérica son históricas y de ida y vuelta. Un ejemplo son las familias mexicanas fundadoras de la cervecera Modelo (dueña de la marca Coronita), casi todas de origen español. En 2012 vendieron al gigante Ab Inbev el 50% que aún no controlaba del grupo Modelo, por 20.000 millones de dólares (16.000 millones de euros). Con esa lluvia de millones, una de las ramas fundó en México Finaccess, una firma de gestión de activos. Primero se expandieron a Miami y desde 2021 tienen también presencia en Madrid, cerrando así el tornaviaje.
Desde Finaccess explican que “Madrid se está convirtiendo en una plaza financiera internacional de primer orden”. La gestora de activos da servicio a las familias fundadoras, pero cada vez más a otros clientes latinoamericanos. Entre las principales razones que aprecian para pasar más tiempo en Madrid, destacan “la excelente oferta educativa y el vibrante mercado inmobiliario”.
También en 2021 desembarcó en España la firma mexicana Actinver, ahora rebautizada como Alterna Inversiones. La entidad es la mayor gestora de México por volumen de activos y espera llegar a 500 millones de patrimonio en el país entre 2025 y 2026. Otro desembarco latinoamericano en Madrid fue el de la peruana Creuza Capital, que ya tenía presencia en Perú, Chile y Colombia, y aquí busca captar clientes con más de 10 millones de euros.
A por la tercera residencia
Una de las personas que mejor conocen este perfil de clientes es Ligia Sandoval, que fichó el año pasado por iCapital para dirigir con Nicolás San Román el equipo de grandes fortunas latinoamericanas. Sandoval es una banquera con más de 30 años de experiencia. Antes de Madrid trabajó en Suiza, Miami y Panamá, otras importantes plazas financieras. “La mayor parte de los clientes a los que atendemos tiene en Madrid su tercera residencia, tras la que tienen en su ciudad de origen y otra [la segunda] en Estados Unidos”, relata. El perfil más frecuente es el de un importante empresario de la industria, la construcción o la banca, “que tiene aquí a alguno de sus hijos o de sus nietos estudiando un curso universitario o un posgrado, y que deciden pasar aquí una parte del año, normalmente en otoño o en primavera, cuando el clima no es tan extremo”, explica Sandoval. Hace unos años, todos empezaban comprando un piso en el barrio de Salamanca para poder utilizar, y algún otro como inversión, “pero ahora están mirando otras zonas, como Almagro y Chamberí, porque no quieren estar cruzándose todo el rato con conocidos”, apunta la banquera. Ahora alguno incluso ha empezado a comprar casa en la costa de Málaga.
¿Por qué Madrid y no París o Londres? Para esta tipología de clientes, Madrid es un lugar ideal: por el idioma, por los fortísimos vínculos culturales, porque el mercado inmobiliario es más asequible, por el clima y “porque tienen una seguridad para sus hijos que no tienen en sus países de origen, ni siquiera en Estados Unidos”, subraya Joaquín Casasús. De todos estos adinerados latinos, no todos llegan a tener inversiones financieras en Europa. Ese es casi el último paso. Casi siempre prefieren tener esos fondos en Estados Unidos, donde hay menos trabas burocráticas y la fiscalidad les favorece más. Aquí empiezan con las inversiones inmobiliarias, y luego buscan proyectos empresariales —”porque tienen el emprendimiento a flor de piel”, relata Casasús—. En una tercera fase se plantean tener aquí inversiones en acciones o fondos.
Sandoval explica que para estos ricos americanos, “invertir en Europa es una forma de diversificar”. La parte principal de su patrimonio está concentrada en las empresas de sus países de origen, y la parte financiera más en acciones de Estados Unidos. “Ni se plantean invertir en China, por ejemplo, pero tener algo de dinero en bonos o renta variable de España, Reino Unido o Francia, sí que les puede resultar atractivo”. La colonia venezolana también tiene una fuerte presencia en Madrid y ya hay quien llama al barrio de Salamanca Little Caracas. La firma Diaphanum ha fichado a Isabel Navarro Fernández de Caleya para llegar a este grupo. Recientemente, la asesora financiera compartía en sus redes sociales un evento celebrado el 19 de noviembre y respaldado por la Cámara de Empresarios Venezolanos en España. Una gala benéfica en Giselle Dinner Club, un restaurante recién abierto en el Paseo de la Castellana: conciertos de música clásica, cócteles y DJ para acercarse al colectivo de moda entre la banca privada madrileña.
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