Cataluña coparía un tercio de toda la condonación de la deuda autonómica
La cancelación total del pasivo ascendería a 46.300 millones, según estimaciones de los técnicos de Hacienda. La reducción no sería suficiente para que la Generalitat salga otra vez al mercado
La condonación de la deuda autonómica tendrá un claro ganador: Cataluña, que se lleva un tercio de todo el dinero que el Gobierno en funciones le perdonará a las comunidades. Los 15.000 millones que dejará de pagar al Estado duplican la cifra de Andalucía, la segunda comunidad que más desahogo sentirá en sus bolsillos, con 6.881 millones de euros. Esta es la conclusión a la que llega el sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) en unas primeras estimaciones elaboradas el viernes a partir de los datos del Banco de España y el propio departamento. Fuentes de Hacienda, no obstante, recuerdan que no son cifras oficiales y que todavía debe diseñarse la fórmula que se utilizará para calcular el porcentaje de asunción por parte del Estado.
La cancelación total de la deuda autonómica originada por la crisis económica de 2008 ascendería, según estos cálculos, a unos 46.300 millones de euros, de los que un tercio corresponderían a la Generalitat. No obstante, desde el propio sindicato insisten en que falta conocer los detalles del anteproyecto de ley para poder calcular con exactitud la dimensión de la cancelación del pasivo. Por su parte, fuentes del propio ministerio han señalado que aún no se tienen amarrados todos los detalles de este mecanismo, que será independiente para cada región, incluyendo a País Vasco, Navarra y Madrid, que no tienen deuda viva con el Estado.
Los datos en cualquier caso corroboran las quejas de la bancada de la oposición sobre que, aunque extensible a todos los territorios, la medida está diseñada a priori para servir de bálsamo a las finanzas del Govern. Por ponerlo en contexto basta señalar que a la Comunidad Valenciana, pese a ser la segunda que más deuda atesora del famoso Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) con 48.344 millones, solo se le condonarían 791 millones de euros.
Borrar de un plumazo ese pasivo, pese a todo, no permitirá a la Generalitat salir otra vez a los mercados. Cataluña lleva una década sin emitir deuda para financiarse. La última vez que lo hizo fue en 2009, cuando colocó 140 millones a diferentes vencimientos. Realizó otra en febrero de 2010, pero en ese caso la colocación fue fundamentalmente a través de oficinas.
Los cálculos de los expertos apuntan a que los años seguirán pasando antes de que la Generalitat pueda revertir esta situación. Diego Martínez López, profesor en la Universidad Pablo Olavide de Sevilla e investigador asociado en Fedea, detalla que incluso con esta condonación la comunidad seguirá lejos de alcanzar el objetivo de deuda del 13% del PIB, pues ahora mismo supera el 33%, según los datos del Banco de España. Para que consiguiera este objetivo, la Generalitat debería registrar un superávit durante los próximos 10 o 20 años. No obstante, lleva una década con saldos fiscales negativos. Bajo este contexto, Martínez López ve inviable que el Govern se abra a probar suerte en el mercado.
Esta misma lógica aplica para la Comunidad Valenciana, cuya deuda ronda el 44% del PIB. Andalucía, por contra, pese a ser el tercer territorio con el mayor agujero fiscal, regresó al mercado de deuda en 2018 con una emisión de 600 millones de euros en bonos a 10 años. Madrid, Galicia y Castilla y León también han hecho colocaciones similares en los últimos años. Lo cierto es que la condonación se queda lejos de la exigencia inicial de ERC de conseguir “el fin del déficit”.
Comunidades del PP y PSOE exigen una compensación similar
La negociación bilateral con Cataluña ha levantado ampollas en el resto de territorios. Autonomías lideradas por el PP y PSOE han pedido el viernes que el Gobierno en funciones se siente a negociar con ellos a fin de pactar el porcentaje de deuda a condonar. El único otro territorio que hasta ahora parece haber obtenido un trato similar ha sido Galicia, donde la dirección del BNG ha dado el visto bueno al principio de acuerdo con el PSOE para que su único diputado en el Congreso apoye la investidura de Pedro Sánchez a cambio de una “compensación análoga” a cualquier reducción que se otorgue a los territorios adheridos al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
Castilla y León y Cantabria han dicho que recurrirán el pacto acordado con la Generalitat, mientras que Andalucía ha dado un volantazo de criterio y ha calculado su propia cifra basándose en el peso poblacional. Murcia también se ha aventurado a cifrar, según sus propias pautas, la cantidad de deuda que el Estado debería perdonarles a causa de una “infrafinanciación”.
Esta fue la misma petición hecha por el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, que ha pedido que la quita de la deuda pública sea mayor para aquellas regiones que están infrafinanciadas con el actual modelo. Al igual que otros, espera que se celebre pronto un Consejo de Política Fiscal y Financiera. Su compañero de partido y presidente de Asturias, Adrián Barbón, también ha exigido “igualdad de trato”.
Sin entrar en cifras o referirse directamente a la quita para Cataluña, el president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha dicho que su comunidad es la peor financiada de España. “Ahora los de la primera velocidad nos toca ser a nosotros”, aunque para ello no va a “extorsionar a nadie” ni a “amenazar con romper nada”, dijo el viernes.
Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días