Hacienda avala deducciones a vehículos eléctricos de hasta 54.450 euros
Los que adquieran un híbrido enchufable también podrán beneficiarse de la medida. Se podrá combinar con el programa de ayudas Moves III, aunque se descontará de la base deducible
Una de las principales novedades que incluye el decreto aprobado este martes por el Gobierno es la puesta en marcha de una jugosa deducción fiscal en el IRPF por la compra de vehículos eléctricos e híbridos enchufables que, según se desprende del borrador que maneja el Ejecutivo, dejará fuera a los coches más caros del mercado. Los contribuyentes podrán deducirse el 15% del valor de la adquisición sobre una base máxima de 20.000 euros, siempre y cuando, eso sí, el valor de venta no supere los importes establecidos en el Plan Moves III de ayuda a la compra de coches electrificados que, en el caso de los turismos, es de 54.450 euros.
Según explica el borrador del texto que debe publicarse en el BOE, y al que ha tenido acceso este diario, “el precio de venta del vehículo adquirido no podrá superar el importe máximo establecido, en su caso, para cada tipo de vehículo en el Anexo III del Real Decreto 266/2021, de 13 de abril”. Este documento regula los programas de incentivos ligados al Moves III, que cuenta con diferentes límites de precio máximo según la categoría de los vehículos. El borrador explica que la deducción será combinable con este programa de ayudas lanzado en 2021, aunque para la desgravación se descontará “aquellas cuantías que, en su caso, hubieran sido subvencionadas o fueran a serlo a través de un programa de ayudas públicas”.
Esto significa que, por ejemplo, un coche eléctrico o híbrido enchufable que cueste 35.000 euros (la inmensa mayoría de coches eléctricos a día de hoy están por encima de la barrera de los 30.000 euros) podrá optar a ambas ayudas y recibirá un incentivo máximo de 10.000 euros. Para ello, el beneficiario deberá de entregar un coche antiguo para achatarrar y así recibir una ayuda de 7.000 euros del Moves III (esta cantidad, cuando se reciba, deberá de declararse en la renta). Descontada la subvención, la base sobre la que se aplicará la deducción del IRPF sigue siendo en este caso superior a los 20.000 euros, por lo que el comprador conseguirá 3.000 euros extra gracias a la última medida del Gobierno.
Si, por el contrario, el particular que se quiere beneficiar tanto del Moves III como de la deducción del IRPF opta por un turismo de, por ejemplo, 25.000 euros, la desgravación del 15% se hará sobre una base final de 18.000 euros, en caso de haber achatarrado previamente un vehículo.
La medida estará en vigor hasta el 31 de diciembre de 2024 y es susceptible de ampliarse un año más cuando se dé el visto bueno a la adenda del Plan de Recuperación que el Consejo de Ministros aprobó a principios de este mes. “La deducción se practicará en el periodo impositivo en el que el vehículo sea matriculado”, explica el borrador. Para acceder a la desgravación, además de con el pago completo del vehículo, el comprador puede abonar un 25% o más del valor del coche. “En este caso, la deducción se practicará en el periodo impositivo en el que se abone tal cantidad, debiendo abonarse el resto y adquirirse el vehículo antes de que finalice el segundo período impositivo inmediato posterior a aquel en el que se produjo el pago de tal cantidad”, especifica el documento.
Las ayudas fiscales, con todo, excluyen a los contribuyentes que quieran comprar un automóvil para desarrollar alguna actividad profesional. Según especifica el borrador, “los vehículos no podrán estar afectos a una actividad económica”. Además, en caso de que con posterioridad a su adquisición el coche se afectara a una actividad económica, “se perderá el derecho a la deducción practicada”. En paralelo, y para poder acogerse al descuento, el coche adquirido deberá ser nuevo, a diferencia del Moves III, que permite también los seminuevos de hasta 12 meses de antigüedad.
Límites de precio de los vehículos subvencionables
Para el Plan Moves III, que cuenta con 1.200 millones, el Gobierno estableció que los turismos subvencionables no pueden tener un precio superior antes del IVA de 45.000 euros (con IVA, el precio sería de 54.450 euros), una cifra que escala hasta los 53.000 euros en el caso de las furgonetas con espacio para ocho o nueve pasajeros (con IVA, el límite queda en 64.130 euros). De esta forma, el Moves III y la deducción del IRPF queda fuera del alcance de la mayor parte de las marcas consideradas prémium o de lujo, como Mercedes-Benz, que no cuenta con ningún turismo en el umbral subvencionable (sí tiene un monovolumen que se puede acoger a la ayuda, el EQT, que cuesta menos de 50.000 euros).
En la categoría de motocicletas, el Moves III y la deducción del IRPF establecen un precio máximo de 10.000 euros sin IVA, que con el impuesto se queda en 12.100 euros. Los cuadriciclos ligeros y pesados, que son vehículos notablemente más baratos que un turismo, también pueden acogerse a la desgravación del IRPF, en este caso sin límite de precio máximo (ya que no existe un tope en el Moves III).
Por su parte, en el Moves III se establece que en la instalación de puntos de recarga para particulares, comunidades de vecinos y administración sin actividad económica, el programa podrá subvencionar hasta el 70% del coste del punto de recarga y un 80% en caso de que esa estación se levante en un municipio de menos de 5.000 habitantes. Para los puntos de carga, la nueva deducción en la renta fija la base máxima en 4.000 euros anuales para personas físicas, una vez descontadas aquellas cuantías subvencionadas a través de programas de ayudas públicos. Nuevamente, esta ventaja tributaria parte de que no se desarrolle ningún tipo de actividad económica.
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