La china CATL gana un 15% más en 2024 e incrementa su dominio sobre la producción mundial de baterías
La compañía obtuvo un beneficio neto de 6.470 millones el año pasado. Hizo el 38% de todas las baterías del mundo, dos puntos porcentuales más que en el ejercicio precedente

Contemporary Amperex Technology (CATL), el mayor fabricante mundial de baterías para vehículos eléctricos, aumentó su beneficio neto un 15% en 2024 hasta los 50.740 millones de yuanes (unos 6.470 millones de euros al cambio actual), impulsado por la demanda global de baterías pese a una caída en sus ingresos. En su cuenta de resultados, remitida a la Bolsa de Shenzhen, la compañía indicó que su facturación anual descendió un 9,7% interanual hasta los 362.000 millones de yuanes (unos 46.123 millones de euros), en medio de la guerra de precios en el sector de vehículos eléctricos en China.
CATL mantuvo en 2024 su liderazgo en el mercado global de baterías con una cuota del 38%, dos puntos porcentuales más que en el año anterior, mientras que su dominio en China alcanzó el 44,45 %, según la China Automotive Battery Innovation Alliance (CABIA, por sus siglas en inglés). Entre sus clientes figuran automovilísticas de todo el mundo como Tesla, Volkswagen o los fabricantes chinos Li Auto y NIO. Con la vista puesta en su expansión global, la compañía planea salir a bolsa en Hong Kong en 2025 con el objetivo de recaudar al menos 5.000 millones de dólares (unos 4.577,7 millones de euros). De confirmarse esta cifra, sería la mayor oferta pública inicial en la ciudad desde 2021.
Parte de los fondos se destinarán a su planta de Hungría, que abastecerá a Mercedes-Benz y BMW. Pese al crecimiento de beneficios, CATL enfrenta riesgos por los aranceles y restricciones internacionales, además de haber sido incluida en enero en la lista de ‘Empresas Militares Chinas’ del Departamento de Defensa de EE UU, una designación que la compañía rechaza y busca revertir. La empresa, con sede en Ningde (sureste de China), anunció en diciembre junto al grupo automovilístico Stellantis la construcción de una fábrica de baterías en Zaragoza, con una inversión conjunta de 4.100 millones de euros. Dicha planta se prevé que comience su producción en 2026 y se centrará en la tecnología LFP (litio-ferrofosfato). Las baterías LFP son vistas por el sector como la vía más rápida para abaratar los vehículos eléctricos, ya que es una tecnología con una menor densidad energética en comparación con las tradicionales NMC, lo que las hace tener una menor autonomía, pero ser más accesibles en precio.
A priori, la gigafactoría maña será la mayor planta de baterías de España, por encima de la que Volkswagen está construyendo en Sagunto (Valencia), la cual tendrá una capacidad de producción de unos 40 GWh, ampliables en un futuro a 60 GWh (la de Stellantis y CATL tendrá 50 GWh). La planta de Zaragoza alimentará la producción de coches eléctricos de Stellantis en Figueruelas y Vigo, donde hace modelos de marcas como Peugeot, Citroën, Fiat, Opel y Lancia. La automovilística llevará a esas dos factorías de coches su plataforma de producción STLA Small, que será sobre la que Stellantis ensamblará los futuros vehículos eléctricos pequeños que saque a partir del año que viene. La STLA Small también se instalará en la fábrica italiana de Pomigliano, que se centrará en la producción de coches eléctricos compactos, más grandes que los que Stellantis hará en España.