Puente se marca como objetivo relanzar Renfe y transformarla en un gigante gestor como Aena
El ministro de Transportes apunta a Fernández Heredia como sustituto de Blanco y califica de “efecto 2000 en pleno 2025” lo sucedido el 1 de enero con los trenes Avril
“Vamos a plantearnos hacer de Renfe una Aena en no mucho tiempo”. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, tiene claro cuál es el espejo en el que debe mirarse la empresa pública Renfe para un futuro no tan lejano: un gestor con proyección internacional y capacidad de inversión y que se mida con las grandes empresas del Ibex 35. No en vano, ha incidido en que Aena es la sexta empresa por valoración en la Bolsa española, con 31.000 millones, gracias a los 87 aeropuertos que suma, la mitad de ellos fuera de España. Solo en los primeros nueve meses de este 2024, Aena sumó 1.500 millones de beneficios frente a los 43 millones de pérdidas anotados por Renfe Viajeros al finalizar el año en plena batalla por la alta velocidad ya liberalizada en parte. Pero la mayor diferencia entre ambas sociedades públicas es que Aena cotiza en Bolsa y Renfe no.
Apenas 48 horas después de que se anunciase la dimisión del presidente de Renfe, Raül Blanco, con efectos a partir del próximo martes, Puente ha destacado la red ferroviaria española y el papel de Renfe, la compañía europea que más indemniza por sus retrasos a los viajeros, y ha preferido mirar hacia delante más que quedarse en la serie de problemas que han asolado a la empresa pública durante el pasado ejercicio. “Renfe ha cerrado una etapa muy buena en gestión corporativa y materia económica, ha hecho un gran trabajo en mejora de las cifras y en expansión internacional. El reto a futuro tiene que ver más con la gestión pura y dura del transporte y para ello necesitamos un perfil distinto”, ha explicado Puente.
En este sentido, el ministro de Transportes no ha querido confirmar el nombramiento del actual secretario general de Movilidad Sostenible, Álvaro Fernández Heredia, como el sustituto de Blanco en el próximo Consejo de Ministros del día 14 “por respeto a las decisiones del Gobierno”, pero prácticamente ha adelantado su designación: “Si hablo de gestionar transporte, alguna pista estoy dando y para mí es el mayor experto en gestión de transportes del país”; se trata de un “gestor de campanillas”, ha ahondado antes de descartar que sea un perfil afín “porque ni siquiera es militante del PSOE”.
Sobre la marcha de Blanco, que se ha relacionado con los incidentes del pasado 1 de enero con la paralización de los trenes Avril de Talgo, Puente ha declarado que no puede “culpar al presidente de Renfe de las incidencias del mismo modo que espero que la oposición no me culpe a mí” y ha dado más detalles sobre lo sucedido en el primer día del año. “Tuvimos un efecto 2000 en pleno 2025″, ha indicado para explicar a continuación que se produjo un “lapso temporal desconocido, en un vacío, y los trenes no arrancaban” ese primer día del año para hacerlo a la una de la mañana del día 2. Según él, “el software venía mal” y, al venirse de un año bisiesto, “los trenes estaban como en un limbo”.
El futuro de Talgo
Sin salir de la marca Talgo, y preguntado por la situación de la compra de la empresa fabricante de trenes, Puente ha insistido en que al Gobierno español le corresponde “tutelar” que se garantizan dos elementos en la resolución: la españolidad y el futuro industrial. Así, que una empresa como la vasca Sidenor, que ha presentado una oferta de compra por el 29,9% del capital, se interese va en la línea con las preferencias gubernamentales, sobre todo, tras el veto del Consejo de Ministros a la opa del consorcio Ganz Mavag (propietario de Magyar Vagon). Aun así, el ministro ha dejado claro que Talgo es una empresa cotizada con sus accionistas y son ellos los que deben decidir y el Gobierno no puede ir más allá. El principal propietario de la empresa es el fondo Trilantic, que espera algo más de lo que ofrece Sidenor (por debajo de los 5 euros de la opa rechazada) y que su propuesta sea sobre el 100% del capital.
Choque de modelos
Puente ha puesto en valor el trabajo de su Ministerio en los últimos años. “El dato más significativo es el de la inversión”, ha resumido, antes de recordar que en 2016 y 2017 los presupuestos destinados a la obra pública estaban paralizados. “Heredamos un páramo donde nada se movía” y ahora ha anunciado que el Ministerio acabará el año con una inversión superior a los 10.000 millones de euros, la segunda más alta solo por detrás de 2011, y tras haber superado ya en 2023 los 8.000 millones.
Por sectores, ha resaltado la prioridad hacia la alta velocidad, a un ritmo anual que más que duplica lo destinado en 2017, último ejercicio completo de Gobierno del Partido Popular. Y, hablando del PP, ha lamentado que autonomías como Galicia o Andalucía, ambas en manos del PP, cuestionen objetivos como las conexiones con la frontera gallega como paso previo a extenderse a Portugal.
Sin embargo, más allá del tren más rápido, ha querido resaltar que la inversión en tren convencional el año pasado fue diez veces superior a la destinada en 2014.
“Ninguna motosierra crea prosperidad”, ha aseverado para defender el modelo económico del Gobierno liderado por el PSOE desde 2018, basado en la inversión y en la apuesta social y frente a otros modelos que apuestan por los recortes y “la jibarización de la inversión pública”. A este respecto, ha comparado la situación actual de salida de la crisis tras la pandemia con la Gran Recesión que arrancó en 2008. “España es el país que más crece del mundo desarrollado” y el responsable “se llama Pedro Sánchez”, ha puntualizado.