La reclamación de mejoras salariales complica el nuevo convenio de las ‘big four’
Los sindicatos exigen eliminar la cláusula que impidió que muchos de los profesionales del sector percibieran las subidas negociadas en el actual convenio, que expira a finales de año
Los sindicatos y la patronal de las consultoras retomaron este martes las conversaciones para la renovación del convenio de las big four (KPMG, EY, PWC y Deloitte) que expira el próximo 31 de diciembre, aunque sin avances. Los representantes de los trabajadores han vuelto a exigir subidas salariales, así como mejoras en las condiciones laborales, alegando que las empresas pueden afrontar dichas reclamaciones gracias a los “beneficios récords” que han obtenido en los últimos ejercicios. Por su parte, la Asociación Española de Consultoras (AEC) —que representa al 67% de la empresas del sector—considera que las pretensiones económicas planteadas son muy elevadas, según han señalado fuentes de la negociación.
El diálogo para llegar a un acuerdo sobre el que será el decimonoveno convenio colectivo de empresas de consultoría, tecnologías de la información y estudios de mercado y de la opinión pública tiene lugar poco después de que el todavía vigente cumpliera un año (se firmó en abril de 2023 y entró en vigor el 26 de julio de ese año). Esto se debe a que el texto incluyó una cláusula de que la mesa de diálogo debía iniciarse nueve meses antes de que expire. Fuentes de la mesa destacan que si no se alcanza un acuerdo antes de la fecha de vencimiento el pacto se prorrogará, como ocurre en todos los convenios, si bien afirman que es importante intentar llegar a un punto común para readaptar las mejoras salariales introducidas el año pasado y que “las compañías se vean obligadas a incluir en sus presupuestos este tipo de costes”.
Así, la de este martes es la tercera reunión y, según señalan fuentes de ambas partes de la negociación, hay “voluntad de llegar a un acuerdo”, pero todavía se mantienen las distancias. Los sindicatos reclaman la eliminación del artículo del convenio sobre compensación y absorción de las mejoras salariales pactadas, que impidió que las condiciones económicas pactadas el año pasado no fueran percibidas por todos los profesionales del sector. Sin embargo, para la patronal esto es una línea roja, de acuerdo a las fuentes consultadas. En la mesa se han sentado representantes de los sindicatos CC OO, UGT, CIG y ELA/LAB y de las patronales AEC y la Asociación Nacional para la Investigación de Marketing Económico y Social (ANIMES).
El actual acuerdo —que se alcanzó tras tres años de negociaciones, numerosas movilizaciones y una huelga (la primera) del sector— actualizó las tablas salariales, que se revisarán con cada subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). A ello se sumaron alzas salariales del 5,5% para el 2022, que se pagaron con carácter retroactivo desde el 1 de julio de dicho año; del 2,5% para 2023 y del 2% para 2024. Es decir, según las escalas de sueldo publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) como anexo al convenio colectivo, este año no puede haber sueldos inferiores a los 15.422,40 euros brutos anuales.
No obstante, los sindicatos subrayan que no todos los profesionales del sector percibieron dichos incrementos, pues el convenio prevé que las condiciones económicas firmadas se absorberían “por los aumentos que en el futuro pudieran establecerse en virtud de preceptos legales, convenios colectivos, contratos individuales de trabajo y por cualesquiera otras causas, con la única excepción de aquellas conceptos que expresamente fuesen excluidos de absorción”. Es decir, que “todos los profesionales cuyos sueldos estén fuera de las tablas salariales no percibieron estas subidas”, explica una fuente conocedora de la negociación.
Casi un 10% más de ingresos
Por otro lado, las organizaciones sindicales han puesto encima de la mesa la actualización de las tablas con un incremento mínimo de un porcentaje acumulado de dos dígitos y la inclusión de nueva cláusula para obligar a la revisión salarial vinculada al Índice de Precios de Consumo (IPC), si bien, por el momento, la representante de las empresas tampoco ha mostrado signos de llegar a un punto de encuentro sobre este asunto. El último informe anual elaborado por la AEC sobre la consultoría española indica que en 2023 las empresas ingresaron 21.575 millones de euros, lo que supone un 9,7% más que en 2022 y cifras por encima a las registradas antes de la pandemia de la covid-19.
Fuentes de la AEC afirman que el objetivo de la negociación es “construir un buen acuerdo” y alcanzar soluciones que favorezcan a todas las partes. “Para nuestro sector, el talento, es decir, sus profesionales, es el elemento más importante”, señalan desde la patronal, al tiempo que aseguran que su compromiso es llegar a un pacto que, “como ha sucedido en los últimos años, contribuya al crecimiento sostenible de la consultoría, una industria que ofrece empleos de calidad, formación especializada y carreras profesionales a largo plazo”.
Por su parte, Raúl de la Torre, responsable del sector TIC (Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) en CC OO, defiende que “en una situación de beneficios empresariales récord, que se incrementa año tras año, la patronal insiste en utilizar la contención salarial como modelo de recursos humanos”. Recuerda también que España “es el segundo país que peor paga” a los trabajadores del sector, lo que propicia que los profesionales se muevan para trabajar en el extranjero.
Los sueldos anuales más altos contemplados en la tablilla para el año 2024 de 21.057,94 euros para la categoría superior del área BPO (Business Process Outsourcing o Externalización de Procesos de Negocio), en los que se incluyen servicios de contabilidad, administración, recursos humanos o atención al cliente; de 21.390,54 euros para los trabajos de centros de gestión de usuarios (CAU); 28.850,23 euros para el área de Desarrollo de software, programación y explotación de sistemas; de 28.959,34 euros para la división de consultoría, ciberseguridad, bases de datos, sistemas en la nube; y 19.263,75 euros para los profesionales de más alto nivel que realizan estudios de mercado.
Por último, para el convenio todavía en vigor se alcanzó el acuerdo de eliminar el nivel más bajo de todas las áreas (denominado E3), así como crear el área de programación que antes se incluía con la consultoría y una subida automática del nivel más inferior de esta división al siguiente (del E2 al E1) a los tres años de experiencia. Ahora, los representantes de los trabajadores reclaman, de nuevo, eliminar la actual categoría más baja.