El Gobierno estima que la reforma de las pensiones beneficia a las nuevas entradas en el mercado de trabajo
Se han abordado propuestas para reducir la brecha de género en las pensiones y convocan una nueva reunión para el 12 de diciembre
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que dirige el ministro José Luis Escrivá ha mantenido en la mañana de hoy una reunión con la patronal y los sindicatos para seguir negociando la segunda fase de la reforma de pensiones.
El punto de partida era complicado, porque tras la reunión del lunes, el Gobierno lo tiene un poco más difícil para lograr el respaldo de los agentes sociales a la reforma, debido al rechazo frontal que ha despertado la propuesta de Escriva de ampliar de 25 a 30 años el periodo de cálculo de la base reguladora de la pensión con la posibilidad de eliminar las 24 peores mensualidades.
Al término de la reunión el Gobierno ha detallado algunas cifras del impacto de la propuesta. Según estos cálculos, el nuevo sistema (pasar de 25 a 28 años, eligiendo los 28 mejores de entre 30 años para el periodo de cómputo) "protege mejor las pensiones de los nuevos entrantes en el mercado de trabajo ante carreras laborales menos lineales, cada vez más frecuentes". Además, se han "abordado propuestas para reducir la brecha de género en las pensiones".
El Gobierno ha quedado en recopilar todas las propuestas aportadas hoy por los interlocutores sociales. Se ha convocado una próxima reunión para el lunes 12 de diciembre."
De hecho, los máximos líderes de CC OO, Unai Sordo y de UGT, Pepe Álvarez se apresuraron ayer a negar rotundamente que vayan siquiera a sentarse a negociar esta propuesta con el Gobierno si antes no existen garantías de acuerdo político que permita aprobar esta propuesta en el parlamento.
Y algo parecido indicaron desde el flanco empresarial a pesar de que la patronal nunca ha visto con malos ojos la ampliación del periodo de cómputo de la pensión, una propuesta que llegó a presentar uno de los últimos gobiernos del PP.
Así, Sordo aseguró ayer que su sindicato “no está por la labor” de hablar de esta medida si no existe antes un consenso político suficiente. “No la vamos ni a negociar si no hay previamente un consenso político sobre lo que se quiere hacer”, dijo el líder de CC OO que, acto seguido, aseguró que en la actualidad no hay una mayoría parlamentaria suficiente para que esta propuesta pueda salir adelante en el Congreso de los Diputados.
Por su parte, el secretario general de UGT reconoció que la posibilidad de llegar a un acuerdo en esta segunda fase de la reforma de las pensiones “tiene más dificultades” que la primera fase. Así, mostró la “profunda decepción y desacuerdo” de UGT con la propuesta del Ejecutivo conocida el lunes. “El Ejecutivo está empeñado en aumentar los años para calcular las pensiones y no nos parece que esa sea la solución”. Por el contrario, Álvarez criticó que la propuesta gubernamental “no recoge las reivindicaciones sindicales, por ejemplo, para premiar las carreras largas de cotización”.
Por su parte, los empresarios, siempre han considerado que la fórmula de cálculo de la pensión debe evolucionar a tener en cuenta toda la carrera laboral. Si bien, la vicesecretaria ejecutiva de la asociación de autónomos ATA (una de las principales organizaciones de CEOE), Celia Ferrero, consideró ayer que pese a la ampliación beneficiaría a los expulsados del mercado laboral en sus últimos años de carrera profesional, “hay un problema de forma”, ya que la propuesta de ampliar el periodo de cómputo de la base reguladora no está dentro de las recomendaciones del Pacto de Toledo.