Javier Rdguez.-Alarcón (Goldman): “Analizamos compañías desde 200 parámetros diferentes”
Asegura que el análisis cuantitativo permite una mejor gestión del riesgo, de forma diaria, y detectar con mucha más agilidad tendencias de mercado
Tiene claro que el análisis cuantitativo será el futuro de la gestión de activos. Javier Rodríguez-Alarcón está al frente del departamento de Goldman Sachs Asset Management que aplica la inteligencia artificial a la gestión de activos y que mueve un patrimonio de 197.000 millones de euros. Su equipo, formado por más de 100 profesionales de distintos perfiles –de gestores a analistas de datos, todos ellos con conocimientos de programación– aplica algoritmos de creación propia a un universo de 16.000 compañías y bajo 200 parámetros diferentes. Rodríguez-Alarcón asegura que este modelo da acceso a un volumen de información capaz de garantizar rentabilidad con un riesgo más controlado que en la gestión tradicional.
- R. ¿Cómo se aplica la inteligencia artificial a la gestión de activos?
- R. Los objetivos son los mismos que para el gestor tradicional, generar retornos por encima del mercado, generar alfa. Pero lo que nos hace diferentes en que hacemos énfasis en el uso de la tecnología. Por ejemplo nosotros hacemos previsiones de retornos y riesgos de manera diaria para un universo de 16.000 compañías. Hacer eso de manera manual es imposible.
- R. ¿Logran más rentabilidad que en un fondo que usa modelos de gestión tradicionales?
- R. Sí y no. En un mercado exuberante y frente a un fondo con posiciones muy concentradas, va a ser difícil. Pero la mejor forma de hacer la comparación es con el binomio riesgo y rentabilidad. Habrá quien genere más rentabilidad pero con más riesgo. Nosotros tenemos el riesgo más acotado, podemos especificarlo. El análisis cuantitativo te da pistas para cambiar la decisión de inversión en una compañía, de modo que si no evalúas una determinada información nunca lo sabrías. Da un ángulo muy diferente.
- R. ¿Cómo es su modelo de gestión?
- R. Nos enfocamos en cuatro pilares de inversión, dos desde el punto de vista fundamental, como son las valoraciones y los negocios de calidad, y dos desde el punto de vista más técnico, como son el sentimiento del inversor y las tendencias temáticas. Cada una de las compañías en cartera se evalúan desde esos puntos de vista. Nuestro modelo europeo nos proporciona 200 señales, 200 maneras diferentes de evaluar una compañía. Se trata de señales que ofrecen información alternativa sobre por ejemplo si una empresa de consumo minorista se está viendo afectada por cambios en las preferencias del cliente, relacionados con la pandemia. Hacemos una análisis del riesgo y de la volatilidad intrínseca de cada compañía de manera diaria y eso nos da una visión en términos de rentabilidad y riesgo.
"Hacemos previsiones de retornos y riesgos de manera diaria para un universo de 16.000 compañías”
- R. ¿Este análisis permite identificar mejor los excesos del mercado?
- R. Sin ninguna duda. En el mercado actual hay que entender de forma precisa las tendencias y las relaciones entre compañías. El sentimiento de los participantes del mercado tiene una influencia muy fuerte y esto puede ser muy favorable para nosotros para obtener alfa.
- R. ¿Y qué información alternativa podría ser ahora la más valiosa?
- R. Un ejemplo claro son las patentes, son un activo intangible muy importante y muy difícil de valorar. Nuestro análisis cuantitativo permite analizar las patentes en un universo de 16.000 compañías y establecer relaciones entre ellas. Se pueden llegar a conclusiones muy diferentes a las de una persona que no tiene acceso a esa información. Otro ejemplo son los clicks en páginas web, un indicador que fue muy efectivo durante la pandemia, en que nos movimos de una economía tradicional a una virtual. A través de esa información podemos medir qué web se buscan, de dónde proceden esas búsquedas, cuánto tiempo duran, si las hacen mujeres u hombres, si lo hacen desde el trabajo o desde casa…Todo ese tipo de información se puede recoger. También recurrimos a la geolocalización, para ver por ejemplo dónde está un grupo de consumidores en un período concreto del día, o si las empresas trabajan con turnos nocturnos o no y si han reducido su capacidad.
- R. ¿Pueden detectar riesgos de mercado que se escapan a la gestión tradicional?
- R. Sí. Podemos detectar por ejemplo compañías que se vean muy afectadas por fenómenos como el de Reddit, podemos identificar por tanto ese riesgo y decidir si lo tomas o no. Eso te da la habilidad de poder navegar el mercado que tenemos ahora, que es muy diferente del de hace 20 meses.
- R. ¿Cómo son las carteras de este tipo de fondos?
- R. Están muy diversificadas. La filosofía de inversión es identificar anomalías que son persistentes y consistentes y que las podamos implementar en una gran porción de la cartera. No vamos a tener posiciones muy concentradas. La idea es tener posiciones que nos aporten un ratio de información interesante. Eso supone que vamos a tener de 150 a 300 compañías en cartera. Lo importante es mantener un control muy fuerte del riesgo, estamos completamente invertidos. Y muy apegados al día a día, manejamos datos diarios. Nada que ver con un gestor tradicional que maneja los estados financieros trimestrales o semestrales.
- R. ¿Hay mucha rotación de cartera entonces? ¿Son cortoplacistas?
- R. Hay señales técnicas de sentimiento de mercado que pueden cambiar de manera rápida, en dos semanas. Pero otros indicadores son de más largo plazo, los de valoración y fundamentales, entre 12 y 18 meses. Cuando evalúas todo eso, el horizonte de inversión de las compañías va a estar entre los 10 y los 12 meses. Y en ese tiempo puede rotar toda la cartera. Nos gustan compañías bien gestionadas, con negocios de calidad, valoración atractiva y sobre las que el mercado tiene un sentimiento positivo. Esas son las compañías perfectas.
- R. ¿Son fondos más caros para el partícipe?
- R. Es cierto que para un modelo así necesitas gente con la experiencia y el conocimiento adecuado. Y recursos para poder comprar información y tecnología, pero son comisiones estándar. El fondo GS Emerging Markets Core, que renta el 9% este año, tiene unos gastos corrientes del 0,76%. Y el GS Global Small Cap Core, que gana el 22% este año, del 0,75%. El interés de los inversores institucionales es muy fuerte a nivel global y también crece el de los inversores particulares.