El 26,5% de las empresas cree que el inglés no es imprescindible
Esta cifra ha subido 10 puntos respecto al año anterior, según un estudio de EAE
Las ingenierías siguen siendo los grados más buscados por las empresas, según el V Barómetro DCH sobre la gestión del talento en España y Latinoamérica, presentado este jueves por EAE Business School. Acumula así el 23, 78% de la demanda que se produjo en 2020, 3,78 puntos porcentuales más que el año pasado. En segundo lugar también repite Tecnología Informática (21,33%), con un aumento de 5,33 puntos porcentuales respecto a 2019. Dos datos que ilustran el auge de la rama tecnológica en los últimos años y el impulso extraordinario que ha recibido durante la pandemia.
En el lado contrario destaca la carrera de Administración y Dirección de Empresas (ADE) que, aunque vuelve a subir al podio con un 17,13%, ha sufrido un descenso de 2,87 puntos frente al año anterior. Una caída en línea con la tendencia que han experimentado la mayoría de carreras: ha descendido la demanda de todas ellas en favor de la rama tecnológica. La otra excepción son los graduados sociales, que suben de un 1% a un 1,75%, y la educación, que no aparecía en la edición anterior del informe y en 2020 captó el 0,70% de la demanda.
En consecuencia, las áreas con mayor incremento de personal han sido tecnología (24,84%) y operaciones y logística (23,8%), que han subido 7,84 y 5,08 puntos respectivamente. En cambio, el mayor descenso lo han experimentado las áreas de marketing (-4,87), finanzas (-3,62) y recursos humanos (-3,51). A pesar de que el trabajo de esta última área, según aseguró la responsable del informe y profesora de EAE Business School, Pilar Llácer, “ha sido más importante que nunca”.
Cuando los expertos en recursos humanos hablan de las habilidades tecnológicas que se necesitarán en el futuro, como es el caso de la programación, con frecuencia hablan de ellas como “el nuevo inglés”; contrasta, sin embargo, el acuciado descenso de la importancia que le conceden a este idioma en la última edición del barómetro. Así, el 26,52% de los profesionales de recursos humanos asegura que el inglés no es imprescindible, más de 10 puntos por encima del 15,60% que lo apuntaba el año anterior. A pesar de ello, también ha crecido el porcentaje de empresas que demandan, al menos, un nivel C1 de inglés, que ha pasado de un 26,1% en 2019 a un 31,82% en 2020. Por contra, ha decaído la proporción de responsables de recursos humanos que se conforman con un nivel básico (3,03%) o intermedio (38,63%).
Desde el año pasado, el estudio también contempla la implantación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en las empresas. En este caso, la igualdad de género es el más afianzado con un 21,51%, similar al año anterior, seguido de la salud y el bienestar (15,12%). Llama la atención, sin embargo, que a pesar del contexto de la pandemia, este objetivo descendió 2,88 puntos en comparación al año anterior. Este aspecto ha cobrado una mayor relevancia durante el Covid-19, pero aún hay mucho camino que recorrer desde las empresas, pues la poca sensación de salud y bienestar en la organización ha sido el principal efecto negativo de la pandemia en la gestión de personas para el 18,64% de los encuestados.
Liderazgo
En los últimos tiempos, los expertos han hecho hincapié en el auge de modelos de trabajo más colaborativos y han insistido en que, a pesar de la distancia, estos debían mantenerse durante el teletrabajo. Esto no ha sucedido así en el caso de los mandos, donde han vuelto a asomar ligeramente las jerarquías que se llevaban años intentando aplanar. Si bien el liderazgo colaborativo sigue siendo el más habitual (40,46%), este ha experimentado un descenso de 1,54 puntos respecto a la edición anterior. Por su parte, el informe detecta un incremento de 4,19 puntos del modelo jerárquico, que se sitúa en el 25.19%. En esta línea, y aunque aún muy minoritario, también ha crecido el estilo autoritario, que pasa de un 1% al 1,53%.
El estilo de liderazgo fue la razón de 11,94% de los cambios de trabajo en 2020, frente al 13,16% del año anterior. No obstante, gana peso su relevancia a la hora de considerar que una empresa es atractiva para trabajar: así lo apunta el 9,87% de los encuestados, mientras que este porcentaje no llegaba al 8% en el año 2019.