Nissan estudia 20.000 despidos en todo el mundo, según la agencia Kyodo
La reducción de empleos forma parte de un plan de reorganización a medio plazo que el fabricante japonés presentará el 28 de mayo
Nissan Motor estudia un recorte de empleo que afectaría a más de 20.000 personas en todo el mundo, según publica la agencia de noticias japonesa Kyodo.
El Covid-19 ha forzado al fabricante nipón a reducir su producción y a valorar medidas de reestructuración en Japón y este reajuste de plantilla forma parte de las medidas que contempla el plan de reorganización a medio plazo que Nissan presentará el 28 de mayo.
Este recorte del empleo supera al de 12.500 trabajadores afectados que Nissan Motor dio a conocer a mediados del año pasado. Sin embargo, los problemas para Nissan empezaron con la detención de su expresidente Carlos Ghosn. El exdirectivo, considerado durante años el ejecutivo modelo de la industria de la automoción, fue arrestado en Japón en noviembre de 2018 por supuestas irregularidades financieras y, a finales de diciembre de 2019, violó las condiciones de su libertad bajo fianza y se fugó del país a Beirut.
Además, la firma arrastra un problema de envejecimiento de su oferta de vehículos y una parálisis de gestión que ensombrecen sus perspectivas de negocio, relata Bloomberg. Nissan presentará sus resultados correspondientes al ejercicio fiscal 2019/2020 también 28 de mayo. La marca nipona avanzó a finales de abril unas pérdidas netas de 95.000 millones de yenes (800 millones de euros).
El plan de reestructuración que está elaborando el fabricante nipón contempla el recorte de 2.800 millones de dólares (2.600 millones de euros) al año en costes fijos ante la caída de las ventas provocada por el Covid-19 y tras años de bajadas.
La compañía radicada en Yokohama eliminará gradualmente la marca de bajo coste Datsun y cerrará una línea de producción adicional aparte de la ya acordada de Indonesia. Para cumplir el objetivo de reducción de gastos, también ahorrará en marketing, investigación y otras áreas, según una fuente consultada por Bloomberg.
La alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, que presentará un plan conjunto el 27 de mayo, se está viendo obligada a una gran reorganización a causa de la pandemia y Nissan podría acometer una reducción de su capacidad de producción del 20% hasta el año fiscal que finaliza en marzo de 2023, según el diario financiero Nikkei. Actualmente, ensambla alrededor de siete millones de vehículos por año, con 55.000 unidades el año pasado en España, lo que supone el 10% de su fabricación europea.
Planta de Barcelona
La información de Kyodo se suma a otra difundida la semana pasada por Nikkei, que dio cuenta de la intención de Nissan de cerrar su fábrica de la Zona Franca de Barcelona y trasladar su producción a plantas de Renault. Una portavoz de Nissan calificó la información de "conjetura".
La planta, que da empleo a 3.000 personas de manera directa y a 20.000 de forma indirecta, trabaja desde hace tiempo a niveles muy bajos de capacidad y, una vez concluya mayo, dejará de fabricar el pick up Clase X de Mercedes-Benz.
Los sindicatos temen que se pueda producir el cierre de la planta tras la pérdida del modelo y el mal momento que atraviesa la marca en Japón a causa de la pandemia. Tras quedarse sin el Mercedes-Benz Clase X (a partir de mayo), al centro de Zona Franca le quedan el Nissan Navara y el Renault Alaskan, más la variante eléctrica de la NV200.
La dirección de Nissan Motor Ibérica trasladó este martes a los sindicatos que puede garantizar durante un año la fabricación de los modelos que actualmente se ensamblan en la planta barcelonesa, pero no los volúmenes de empleo, "dada la incógnita sobre cuál será demanda". Los trabadores se reúnen el lunes con la ministra de Industria, Comerio y Turismo, Reyes Maroto, por videoconferencia.
La firma japonesa reanudó la actividad el 4 de mayo en Zona Franca tras siete semanas de parón para atender los pedidos que tenía comprometidos con Daimler, pero tan solo dos días después se vio obligada a detener la producción y enviar a la mayoría de los trabajadores a casa con un permiso retribuido tras no poder seguir trabajando por la falta de piezas.
El paro fue consecuencia directa de la huelga indefinida iniciada en Montcada i Reixac, que se ocupa de la estampación de la carrocería y que también obligó a paralizar la fabricación en el centro de Sant Andreu de la Barca.
Al igual que otras firmas del sector, Nissan se ha visto obligada a suspender sus operaciones en muchas fábricas por el impacto que están teniendo en la demanda de vehículos las derivaciones de la pandemia de coronavirus.