El Ibex salva los 9.900 puntos en una semana plana
El euro se sitúa en los 1,21 dólares El índice español se anota un 0,42% en la semana y un 0,23% en la jornada del viernes
Mario Draghi se ha impuesto sobre la temporada de resultados empresariales y ha marcado en la recta final de la semana el ritmo en los mercados de divisas, renta variable y deuda. El presidente del Banco Central Europeo no se saltó el guion previsto y mantuvo sin cambios su política monetaria a la espera de junio, cuando el mercado confía en que dé pautas sobre la retirada de los estímulos económicos. Ahora bien, sí reconoció que mantiene bajo vigilancia la evolución económica de la zona euro y que algunos indicadores apuntan a la moderación del crecimiento, en parte a causa del proteccionismo.
La sensibilidad mostrada por Draghi a la debilidad de los últimos datos macroeconómicos ha presionado a la baja al euro, que ha retrocedido hasta los 1,2103 dólares y que se sitúa así en mínimos de enero. Las firmas de análisis apuntan que podría mantener su tendencia a la baja en los próximos meses a medida que gana enteros la posibilidad de que el BCE alargue de septiembre a diciembre el programa de compras de deuda. Una opción que implicaría además que la subida de los tipos de interés no se produjera hasta finales de 2019.
La recuperación del dólar frente al euro lleva a pensar a los expertos de DWS que la moneda estadounidense “ha superado su prolongada debilidad y no nos sorprendería si continúa fortaleciéndose. Estratégicamente, esperamos que el dólar se cambie a 1,15 euros en un horizonte temporal de 12 meses”.
Las palabras de Draghi también sirvieron para relajar la curva de tipos en una semana en la que el bono estadounidense a diez años superó el 3% y se sitúa en niveles de enero de 2014. Sin embargo, en esta ocasión los buenos datos que se están conociendo en la temporada de resultados de Estados Unidos, han evitado que las Bolsas registraran las fuertes caídas vistas en febrero cuando el treasury se asomó al 2,9% y firmas de análisis como JP Morgan ponen ya la barrera para los mercados de renta variable en el 4% para el bono estadounidense a dos años.
Otras como Carmignac señalan que el alza del bono de EE UU a diez años se debe a la necesidad del Tesoro estadounidense de refinanciar una gran cantidad de bonos en este momento en el que la Fed ya ha puesto punto y final a su programa de recompra de deuda. De esta forma, Didier Saint-Georges, miembro del comité de inversión de Carmignac, afirma que los rendimientos del bono estadounidense podrían seguir subiendo, y afectar a los rendimientos a escala global, algo que no sería favorable para los mercados”.
El bono alemán a diez años se ha relajado hasta el 0,57%. Circunstancia que ha permitido que la primera de riesgo española se modere hasta los 68 puntos básicos.
La debilidad del euro ha impulsado así junto con los resultados empresariales dados a conocer –con Telefónica y la gran banca como referentes en España– a la renta variable. El Ibex en una semana apática ha logrado anotarse un 0,42%.
El índice español se anotó un exiguo 0,23% en la jornada del viernes que le hace aferrarse por el momento a los 9.900 puntos gracias al tirón de valores como Siemens Gamesa, que se revalorizó un 3,94%, Técnicas Reunidas, que sumó un 2,75%, Grifols, que subió un 2,31%, y BBVA, que se anotó un 2,22% tras ganar un 11,8% más y superar las previsiones de los analistas.
Por el contrario, Cellnex cedió un 3,72% en la jornada del viernes tras perder 35 millones de euros en el primer trimestre tras dotar 55 millones a prejubilaciones. Ferrovial, por su parte, se dejó un 1,03% tras anunciar que provisionará 236 millones por costes en su filial británica en sus cuentas de enero a marzo.